Disgusto

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Riley

Desperté al sentir un húmedo beso, pensando que era Clarise. Encontrándome con Ava, con una singular sonrisa tan falsa como ella misma, así fue durante el tiempo que compartimos juntos y me aferre a ella que no lo note, sin darle importancia a las veces que mis padres me lo decían que esa mujer no era buena para mí.

- ¿Qué haces aquí? ¿Dónde está mis padres y Clarise? - movió su cabello en un acto de nerviosismo, tal vez por mi tono de voz.

- No lo sé, cuando entre estabas solo, tal vez estén evitando contarte lo del accidente - fruncí el ceño sin entender

- ¿De qué accidente hablas? Vamos dilo que sé que mueres por hacerlo para quedar bien - negó fingiendo una ingenuidad que no poseía.

- Solo me entrere que el auto Clarise tuvo un accidente cuando venía de recoger a tu hijo - negué tratando de incorporarme, apreciando como el dolor me detenía, las maquinas conectadas a mi cuerpo emitían sonidos alarmantes.

- Cálmate te haces daño - trata de tranquilizarme.

- Mientes, porque me haces esto ¿Ava? - agitado, la tomo de la mano con la fuerza que los medicamentos me lo permiten, gimió de dolor - juro que si lo haces es por joderme, lo pagaras caro -. Vocifere con convicción. Tratando de deshacerse de mi agarre que al escucharla quejarse me aferraba más a su mano.

La puerta se abre de golpe entrado el doctor se guido por una enfermera que revisa, los equipos. El doctor me hace soltar a Ava que soba su brazo donde hay una evidente marca, su mirada horrorizada de mi persona, ya que nunca había sido tan bestia con ella, lo que ignoro al ver entrara a mis padres, a Joe, detrás del Clarise. Se acerca besando mis labios tranquilizándome.

- ¿E- estas bien? - analizo su cuerpo sin ver ningún signo de golpes, solo sus ojos rojos e hinchados con un evidente rastro por a ver llorado -. Asintió, me tranquilice al ver que se encontraba bien -. Theo ¿Dónde está nuestro hijo? - desvió su mirada a mis padres, mi madre, se engullo en el pecho de mi padre que la abrazo para tranquilizarla, Joe no quitaba la mirada de Ava con una pisca de desconfianza hacia ella.

- Díganle la verdad, el merece saberlo, para que ocultarlo si la verdad siempre se sabe - dijo contundente Ava mirándome con lastima, aun sobando su brazo.

- Muy cierto, la verdad siempre sale a la luz, y tú haces el papel de intermediaria entre la verdad y el engaño ¿no es así, Ava? - la mirada furiosa de Clarise, igual que la de mi amigo me tiene impaciente por el silencio de todos excepto Ava que escupe su veneno porque dudo que sea por un buen actuar.

- Solo quiero que le sean sincero Joe, porque encubrirla, si por ella - señalo con el dedo a Clarise - por ser una mala madre tu hijo... - una furiosa Clarise camina a pasos agigantados y seguros llegando a Ava que retrocede la toma por el cabello haciéndola gritar - Riley por favor dile algo a esta mujer -. Suplica siendo arrastrada a la puerta. Miro mi a madre aun solloza en el pecho de padre.

Joe una media sonrisa al ver la determinación de Clarise al sacar sin siquiera decir una solo palabra.

- Por favor, señores estas escenas no le hacen bien al paciente -. Interrumpió el doctor.

- Ya dejen de evadir mi pregunta ¿dónde está mi hijo? ¡Carajo! - Clarise dio un respigón.

- Primero tranquilízate, ya escuchaste al doctor, no te hace bien -. Mi padre por fin articula palabra, las lágrimas se hacen presente en el rostro de Clarise, mi madre no tarda en consolarla.

- Porque no hablan de una vez y dejan de dar tantas largas al tema. Te lo vuelvo a preguntar Clarise ¿dónde está nuestro hijo? - se acerca temerosa, pero con convicción tatuada de decirme.

- Todos estábamos en esperas de noticias tuya, por lo que Manson se ofreció a ir por él, lo que no vi problema - suspiro, esperando que diga lo que realmente quiero saber, pero no quiero asustarla más, al verla que la está pasando mal - fue en mi auto por nuestro hijo, momentos después me llego un mensaje amasándome por lo que lo llame, y me dijo del accidente -. Aprete la mandíbula, recreando la peor escena.

- Hijo, Manson le salvo la vida a mi nieto, está muy grave, ya que el impacto lo recibió en la espalda evitando que a Theo le sucediera algo más grave -. Mi padre tomo la palabra dándole un respiro a Clarise - él está bien, solo se fracturo su bracito izquierdo, supongo que al momento que Manson se le abalanzo encima para protegerlo -. Asentí, volví mi vista a Clarise, que mantenía la mirada en Joe como si todo no terminara allí, el movimiento en sus manos la delatan.

- Hay algo más que deba saber - la tome de la mano acariciándola para tranquilizarla - ¿Clarise? Quedamos en no más mentiras - afirmo.

- Recientemente he recibido mensajes, con un contenido algo extraño - mire a Joe que tecleaba su celular, un momento ese es el celular de Clarise.

- Si, para ser exactos - hizo una pausa, dramatizado suspenso - fue amenazada, ¡"si no eres mía, no serás de nadie"! esto es una clara amenaza para mí -. Un jadeo de mi madre.

- Dios quien podría hacer tal amenaza, ¿tienes alguna idea linda? - acorta la distancia y le muestra su apoyo como siempre lo han hecho, acto que agradezco que nunca la hubiesen dejado sola.

- No sé si este equivocada - me miro - creo que fue Taylor - se acercó temerosa al ver mi mandíbula tensa por la impotencia de no poder mover y arreglar esta situación -. Amor, perdón, no te lo dije en su momento para evitar un mal acontecimiento.

- Estas consciente que, si no lo hubieras cayado, habríamos evitado este accidente, o por lo menos tomaríamos a las precauciones necesarias - afirmo, desviando su vista a mi padre.

- Clarise, fue Taylor, fue el que te agredió. - mi padre la miro con preocupación.

- De que demonios hablan ¡carajo, por que hacen todo más difícil! No quiero más secretos, si los hay como nos protegemos - asintió apenada al ver que había actuado mal al ocultar algo tan importante.

- ¿Como esta Theo? Quiero verlo - el doctor que todo está tiempo se mantuvo en silencio.

- Lo siento, Sr Riley, pero usted no puede dejar la cama o de nada servirá haberle operado, su hijo está bien, mañana será dado de alta solo por precaución por su problema de ansiedad - frustrado por la situación.

- Cuando podre saber si esta maldita operación tuvo el resultado. - Clarise negó por la forma tan tosta de dirigirme al doctor.

- Riley vasta, solo está haciendo su trabajo, por lo pronto cálmate, sé que cometí un error, pero no lo hice con mala intención, si hubiera sabido esto lo hubiera evitado, pero no puedo dar marcha atrás, si quieres desquitar tu ira es conmigo, no con nadie más en esta habitación. Ahora iré con mi hijo, más tarde lo traeré. Por lo pronto, sigue las intrusiones del doctor y mantén a la lagartija lejos o no respondo, recuerda eres mi esposo -. Su determinación, contundencia en cada palabra.

- No lo he olvidado mi amor, solo...

Sin esperar a que terminara salió dejándome con la palabra en la boca y sintiéndome como un idiota. Comprendo el por qué lo oculto, hubiera hecho todo a mi alcance por cobrarle el haber tocada a mi mujer.

KARMA Riley ClarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora