XV

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Beomgyu se pregunto más de una vez a donde estaba manejando Taehyun. Estaba manejando nervioso y sin mirar a Beomgyu ni siquiera por un segundo de reojo.

Pero al final terminaron llegando a el cuarto compartido de Soobin y él.

—¿Y bien? Creo que debemos hablar.

Beomgyu se quitó la chaqueta y esperó a que Taehyun se sentase a su lado. Lo miró fijamente, esta vez sin odio y Taehyun lo miraba esta vez como si tuviera vergüenza o miedo.

—¿Quieres conocerme? Está bien.

Se sentó a su lado y pasó una mano por detrás del mayor, acercándolo a su pecho para que se recargara.

—Nunca me sentí aceptado en la vida, siempre quise buscar algo en lo que si encajara pero era imposible. No era de calificaciones perfectas, no destacaba en ningún club escolar y no era súper guapo. Siempre me faltó ese sentimiento de pertenencia. Un día... conocí a una chica por internet, una con una doble vida. Subía videos cómicos a otras plataformas pero en otras subía contenido sexual y la gente la amaba por eso. Me dijo que podía intentarlo de forma inocente, como alguien de forma anónima o si tengo confianza mostrar mi cara.

—Y así... empezaste.

Beomgyu se acurrucó sobre él apachurrándome más sobre su pecho.

—Supongo que sí, poco a poco se fue creando una rutina, se volvió mi sentido de vivir. El sexo ordinario pronto se tornó horrible y aburrido, empecé a jugar con otras cosas que se adaptarán a mi. Entonces solo así pude darme cuenta cual es el verdadero arte de esto, creo que suena muy extraño pero... realmente fue mi único consuelo.

A pesar de que Beomgyu no lo estaba viendo a la cara sabía perfectamente que lo más seguro fuera que ya algunas lágrimas brotaran del rostro del contrario. Su voz estaba ligeramente quebrada y su pecho comenzaba a subir y bajar de forma irregular y rápida.

Lo hizo imaginarse el dolor por lo que tuvo que pasar, sabía que el simple hecho de dedicarse a ese contenido no era fácil ni mucho menos agradable. Desconocía ciertamente la forma en la que Taehyun lo sobrellevaba pero sabía que había sido difícil.

—Se que esto no justifica lo que hice, de hecho no busco que lo justifique solo... supongo que algún día debí decírtelo.—suspiró muy grande y cerrando los ojos volvió a hablar—Ella y yo pronto nos volvimos amigos, amigos con derechos y en su momento compartimos algo más que sexual pero no la veo como mi ex. La veo como a alguien que le tengo respeto. Pero ella... está muerta ahora, abusaron de ella hasta que murió.

Por un momento a Beomgyu se le estremeció el estómago del simple hecho de escuchar lo que le había pasado. Debió ser duro solo pensaba en eso.

—Creo que... debiste haber escuchado de ella, Kwon yunoo, la encontraron en una bolsa en una calle de Itaewon.

Trato de hacer memoria y finalmente la recordó, hace aproximadamente tres años por lo menos por un total de dos semanas todo el internet hablaba de ella, pero también había otra noticia. El chico en su funeral que cubrió cada uno de sus moretones con pétalos de rosa. La cara de aquel joven nunca se mostró por los términos de privacidad que se establecen así que solo lo tomaron como un gesto de amor.

—¿Eras tú?—preguntó Beomgyu en voz baja, como si quisiera que Taehyun no lo escuchara.

—¿El chico de las rosas? No era yo.—sonó molesto—Fui el idiota que golpeó a ese idiota.

También recordaba vagamente eso, casi antes de que todo el mundo se olvidara del caso, uno que otro habló de una grabación que no fue mostrada en noticias, "un loco golpeó a un chico con noble corazón"

Exhibicionista.  |   TaegyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora