Exhibicionista. | Taegyu

XX (E)

Taehyun sintió que sus ojos se iluminaron y sonrió tan feliz abrazando fuertemente a Beomgyu. Sintió su piel suave y caliente por debajo de su camiseta, pronto esa camiseta ya no estaría en el cuerpo de Beomgyu.

—Tus padres.

Lo detuvo Beomgyu antes de que empezase a besarle todo el cuerpo. Sinceramente Beomgyu estaría más que dispuesto pero sería una terrible falta de respeto, algo a lo que Beomgyu no estaría dispuesto.

—No puedo moverme de la cama Beomgyu.

El mayor pensó un momento. Reflexiono y suspiro grande.

—Solo quítame esta sensación. Esta sensación que me pide tu cuerpo.

Taehyun volvió a sonreír y besó su cuerpo. Beomgyu dio una lucha interna por tratar de no cometer ningún ruido. Pero era imposible, parecía que incluso Taehyun lo estaba haciendo a propósito y no había duda de ello. Beomgyu acarició su cabeza, guiando su pelo hacia sus zonas sensibles las cuales el contrario ya conocía tan bien, ni siquiera sabía cuando había pasado todo eso, pero ahora puede que Taehyun lo conociera mejor que a si mismo.

La otra mano desocupada de Taehyun bajó hasta su pantalón, fue difícil pero finalmente tenía una mano apretando sus glúteos de forma agresiva. Beomgyu gimió agudo y casi por puro instinto comenzó a frotarse repitiendo en voz baja una y otra vez el nombre de su hombre.

El líquido preseminal comenzaba a humedecer a ambos, resultando una dulce armonía de un chapoteo constante seguido de jadeos por parte de ambos. Taehyun comía de Beomgyu como si no lo hubiera visto en años (se sintieron como años) y Beomgyu se dejaba en completa disposición dejándose devorar completamente. Si por el fuera, dejaría que Taehyun comiera de su carne hasta que el saboreara sus huesos.

Taehyun con su boca trazó un collar de chupetones que fue bajando hasta llegar a su abdomen. El lo mientras, su mano ya había bajado la ropa interior de Beomgyu jugando libremente con su dedo más largo, masajeando a su propio gusto esperando a que Beomgyu comenzara a retorcerse.

Sin embargo lo abrazo con más fuerza, llorando casi del placer, se sentía tan bien volver a ser tocado. No podía dejar de experimentar nuevas emociones en su vientre, se sentía tan caliente, tan bien.

Taehyun rió en voz baja, se abrió paso con sus manos y dejó entrar un dedo. La falta de lubricante hizo que el proceso fuese doloroso, sin embargo Beomgyu lo aceptó sin ningún pero. El dolor de no haber estado con Taehyun tanto tiempo era peor; finalmente en ese instante se había dado cuenta lo mucho que lo había extrañado, no podría estar lejos nunca más.

Beomgyu comenzó a gustar más contacto, desesperado por la calidez que alguna vez Taehyun le había lado y ahora era incapaz de vivir sin ella ahora que la conocía. Nada serie capaz de alejarlo, nadie.

Sin darse cuenta, Beomgyu se había terminado corriendo después de unos jugueteos de Taehyun, le avergonzó que todo lo que había estado tratando de ocultar saliera. Sin embargo Taehyun lo miró y se llevó a lo boca un poco de aquel líquido, sonriendo placentero.

—Si pudiera romperme una costilla seria contigo.

A Beomgyu le asustaron esas palabras, Taehyun seguía herido y aún así estaba complaciendo las necesidades tan absurdas que tenía.

Taehyun se reacomodo en la cama con dolor, tiró a Beomgyu para atrás y se escabulló entre sus piernas. Comenzó a besar su pecho como si se estuviese amantando, bajó hacia su abdomen, pelvis, muslos. A medida que más bajaba y pasaba por sus puntos sensibles Beomgyu se retorcía en la cama, tratando de no ser escandaloso pero que lo tocaran de esa forma después de tanto tiempo hacía que quisiera llorar del placer.

—Taehyun, solo... hagámoslo y ya.

Pidió, tembloroso cuando sus piernas se contrajeron y su interior apretaba hacia la nada.

—Beomgyu, no voy a tener sexo contigo.

—¿Qué?

—Voy a demostrarte mi amor, mi anhelo, mi vida en ti. Esto no es sexo, lo entiendes, ¿no?

—No seas cursi ahora...

Beomgyu cubrió su rostro de la vergüenza pero Taehyun lo detuvo besando su mano. A pesar de que el se estaba muriendo del dolor y le costaba respirar, sentía que no había mejor forma de morir que no fuera esta. Junto a Beomgyu, el hombre por el cual tanto luchó sin darse cuenta, el hombre que por primera vez se esforzó por mantenerlo a su lado, simplemente la persona que siempre deseo.

Taehyun hizo caso, agarró su miembro, palpitante por atención. Sería mentir si dice que no está tan ansioso como Beomgyu y desea hacerlo suyo ahora mismo, así que no tenía porque contenerse.

Cuando finalmente entro en el, se sentía estrecho y caliente, como si Beomgyu aún fuera virgen. Eso lo enorgullecía, sería el primer y último hombre en tomarlo, nadie cambiaría eso.

El mayor casi gritó de placer cuando lo sintió en su interior, jamás se había sentido tan necesitado y mucho menos así de excitado por el simple hecho de que Taehyun entrara en el, aún sin moverse. Sin resistirlo más movió sus caderas de un lado a otro buscando contacto y fricción entre sus cuerpos, gimiendo vergonzosamente en su propio acto.

El contrario lo agarró de los muslos y beso uno de ellos dejando un fuerte chupeton que rápidamente agarró un rojo hermoso. Abrió sus piernas con facilidad y se hundió más en ellas, sonriendo victorioso comenzó a moverse en estocadas cortas.

Beomgyu se aferró a la espalda de Taehyun tan fuerte, como si el contrario quisiera escapar de él otra vez, rasguñó su espalda a medida que Taehyun hacía una estocada y daba en su punto. No podía explicarse el porque estaba tan sensible pero estaba apunto de llorar del placer cuando una de las manos comenzó a pasear su pecho.

Había extrañado esas manos apretando sus pezones tan fuerte, admitía que se volvía un poco masoquista cuando se trataba de aquello, pero Taehyun era quien se metía un pezon a la boca y jugaba con el, moviéndolo de arriba hacia abajo y succionando e incluso mordiendo.

—¡Taehyun!

Gritó desesperado Beomgyu, apenas había comenzado y de alguna forma Beomgyu estaba de espaldas, con sus glúteos apuntando directo a la cara de Taehyun, el los miró hambreado y los abrió con sus dos manos dejando leves nalgadas. Beomgyu gimió ante esto, era vergonzoso porque estaba seguro que estaba lo suficientemente dilatado para que se notara a simple vista, aparte de que su consciencia estaba tan sucia que no podía dejar de mover las caderas.

Esto paró hasta que Taehyun metió su lengua ahí, Beomgyu gimió tan alto que inmediatamente se cubrió la boca. Definitivamente lo habían escuchado, ¿qué más da?

Arqueó su espalda y escondió su cara entre las sábanas, sosteniéndolas con fuerza. Taehyun estaba succionando, jugando con su lengua y ocasionalmente jugueteaba con su dedo. Beomgyu terminó por correrse apenas comenzaba el juego de Taehyun.

Taehyun tomó un poco del líquido y lo metió a su boca, saboreando como si fuese un caramelo, después volvió a sumergir su cara entre Beomgyu y volvió a meter su lengua.

—me conoces tan bien... ¡ah!

A pesar de sufrir una orgasmo Taehyun no se vio inmutado y siguió estimulándolo, estaba vez Beomgyu estaba llorando del placer y siendo interrumpido varias veces por ocasionales nalgadas que dejaron su culo un tanto rojo, pero descubrió un nuevo fetiche raro, le gustaba que Taehyun hiciera eso, quería hacerlo una y otra vez.

Cuando Taehyun se separó, jadeando se limpió el cabello de su cara de dejó sus últimos besos en el cuerpo de Beomgyu, volvió a tomar su miembro y lo introdujo sin problemas, como si Beomgyu hubiera lubricado solo.

Así siguió una y otra vez llenándolo, todo el vacío que alguna vez Beomgyu había sentido estaba desapareciendo, esto era lo que realmente quería.

Taehyun terminó por correrse dentro de él sin previo aviso, fue raro y algo abrumador, pero Beomgyu lo había disfrutado. Antes de quedarse profundamente dormido le dio un pequeño beso inocente a Taehyun el cual se vio algo sorprendido, aún no estaba acostumbrado a este tipo de muestras de afecto.

—Te amo.