BROKEN HEART © [Libro2]

CAPITULO 14

Alexa

CONFUSIÓN, VERDADES Y DESEO.

Estoy en la entrada del palacio viendo como dos camiones repletos de juguetes entra por la enorme reja, estoy tan confundida que no me cabe en la cabeza quién es el responsable de mandar tantos juguetes. Un guardia se acercó a mi diciendo que traerían un cargamento pequeño.

Creí que sería la comida que las personas del servicio realizan, pero no. Son dos camiones llenos de juguetes solo para Lada, una vez los encargados de traer los juguetes se baja, me obligo a plantar mi firma en la hoja. Los señores me dan una reverencia antes de irse.

Bajo las gradas y tomo la manilla de la puerta del camión haciendo que se abra, todos los juguetes están en cajas y estoy tan confundida. Varios nombres se me vienen a la cabeza los cuales pueden hacer esto pero lo termino dejando de lado. Les pido a los empleados que saquen un tercio de los juguetes.

La mayoría se los lleva al cuarto de juegos de Lada y los otros a su cuarto, veo que sacan castillos, muñecas, peluches y muchas cosas más. Me doy la vuelta para entrar y me encuentro a Axel en los pasillos que mira divertido la escena.

—¿Que son todas esas cajas? Creí que la obsesión con comprarle demasiadas cosas a tu hija había cesado. — se ríe— Por algo agrandamos su habitación demoliendo dos habitaciones más.

— No tengo idea de quién le compro todo eso— lo miro acusadora—¿No fuiste tú verdad?

— Claro que no— dice frunciendo el ceño— Muchos civiles saben que tenemos a una princesa futura heredera de la corona, ellos debieron de hacer tal gesto.

Suspiro ya que puede tener razón.

Sigo a los empleados para indicarles a donde poner y desempacar las cajas, todo el trabajo lleva tres horas donde ayudo a los empleados a desempacar. Son demasiados juguetes solo para Lada, la mayoría de juguetes tendría que donarlos ya que no alcanzaría en el salón de juegos ni en su habitación.

Una vez terminamos de acomodar todo me voy a buscar a mi hija, salgo al jardín para buscarla pero no la encuentro. Entro a el comedor, la cocina, su habitación, la biblioteca pero sigo sin encontrarla. Empiezo a llamarla pero no tengo respuestas, el corazón me empieza a latir fuerte y salgo corriendo buscándola en todas las habitaciones que tiene este lugar.

La boca se me seca, el pecho se me hincha, la garganta se me cierra de solo pensar que me la arrebataron de estas cuatro paredes. Abro todas las puertas y no la encuentro, le pido a los guardias que me ayuden con su búsqueda y me asienten corriendo a buscarla.

No pudo ir lejos, me voy a otro pasillo y la llamo queriendo encontrarla. La puerta del salón de coronación está cerrada, me acerco queriendo abrir la puerta y escucho que hablan adentro. La llamo y abro la puerta de un todo encontrándome a mi hija jugando con las muñecas y la pantera.

Corro hasta donde está estrechándola a mi cuerpo, tuve tanto miedo de perderla.

— Te estuve llamando cariño—la detalló— ¿Por que no contestaste?

— Perdón mami— me da un beso en la frente— ¡Estuve jugando con garras! ¡Es una pantera muy grande con patas pesadas!

Veo a su pantera de peluche y las muñecas decapitadas, las manos y las piernas de la muñeca están fuera de su cuerpo.

— ¿Es amable garras?— le pregunto siguiéndole el juego— ¿No me va comer?

Me niega.

— Él te conoce— toma su peluche y guarda las muñecas— Eres su mamá y yo soy una diosa poderosa que cuidará por siempre.