AZIRLEY (Good Omens)

XII

azirley se levantó notando que estaban en una especie de habitación de la realeza sobretodo por los muebles llenos de piedras preciosas, sus gafas no estaban y sus alas estaba visibles.

- siéntate - Dios se sentó en la mesa y Azirley obedeció.

- quiero ir con mis padres.

- y yo queria que destruyeras la tierra pero supongo que no todo sale como uno quiere.

Derrepente en la tercera silla apareció satanás sentado cómodamente teniendo unas alas gigantes de murciélago.

- boo - dijo serio viendo a Dios.

- tienes prohibido estar aquí y lo sabes bien lucifer.

- satanás- corrigió - y tú no tienes derecho a decirme que hacer, además recuerda que este lugar - giro sus dedos - era nuestro.

- ¡Vete al infierno con Lilith engendro del mal! - hablo fuerte Dios.

- ¿Sigues dolida por eso querida? Tanto como para odiar a tus creaciones y buscar cualquier escusa para acabar con ellas pero claro sin arruinar el amor que sienten hacia a ti porque la señora no puede vivir sin ser adorada.

Azirley se sorprendió ante está declaración viendo como estos dos se miraron con odio.

- ¡ Destruye la tierra ! - dijo Dios viendo a azirley.

- ¡No te atrevas! - dijo satanás para verla.

- no estoy entendiendo absolutamente nada... - hablo azirley - en el armagedón ambos querían hacer una guerra...

- yo quería la guerra para que los humanos me adorarán a mi - hablo satanás- la loca si quería acabar con todo - señaló a Dios.

Dios lo vio con severidad - me estás sacando de quicio y no voy hacer tan misericordiosa si sigues con esa actitud lucifer.

-¡Satanás! - corrigió alzando la voz.

- ¡El nombre más horrible que pudiste elegir!

- ¡ Lucifer ese si era un nombre de mierda! - dijo en el mismo tono que el de su contra parte - ¡además todo esto es porque me lleve Crowley!

- ¡no me afecto en nada yo me quedé con aziraphael y su nombre es crawly !

- ¡Lo cambio desde que cayó!

- ¿Que tienen que ver mis padres con todo esto? - pregunto azirley ambos seres volvieron hacer concientes de la existencia de esta recuperando la compostura.

- por eso no debemos hablar - dijo Dios sería viendo a satanás.

- como sea lo debía saber en algún punto- miro a azirley - tus padres son nuestros hijos .

- si lo sé cómo todos los angeles y demonios - azirley no entendía el porque de tanto misterio.

- no, es muy diferente, ellos son nuestros hijos nacidos de la mitad del poder de cada uno antes de la caída - aclaro Dios.

Azirley frunció el ceño con sorpresa viendo a satanás que asintió y luego a Dios.

-... ¿Por eso solo yo estoy aquí? - miro al suelo entendiendo porque no trajeron también a beel.

- exactamente - hablo satanás levantándose arreglando su traje.

- yo cree a crawly y ese- lo reparó con la mirada - creo a aziraphael una muestra de lealtad según él pero se llevó a mi creación durante su caída entonces yo me quedé con la suya - Dios también se levantó - bueno... Ya sabes demasiado - Dios cruzo los brazos - ya que estás aquí sirve para algo y ayúdame a poner en marcha la segunda venida - azirley vio con miedo a los seres.

- ¿Que ganó yo?

- ¿Que te parece una apuesta?.

- te escucho - sonrió con malicia.

- borremos su memoria - hablo Dios

-¿¡Que!? ¡No! - protesto azirley levantándose.

- veremos si verdaderamente quiere salvar a la tierra - hablo satanás ignorando a azirley.

- o destruirla.

Satanás y Dios vieron a la nombrada - por favor no hagan esto - dijo como último alejándose un poco.

Asiendo caso omiso a su petición tomaron sus manos lanzondole una luz entre tinieblas.

Mientras tanto los seres inmortales y Adam que rogó para estar ahí estaban subiendo el elevador hacia el cielo sorpresivamente muriel no había hablado en todo el camino, Beelzebub,Crowley y beel habían cambiado aún traje de color blanco y Gabriel se había puesto su traje de arcángel.

Cuando el elevador paro Muriel fue la primera en salir caminando dando grandes pasos largos todos se preguntaban que plan tenia aquel ángel.

Llegaron una enorme sala de juntas de color blanco y tenía una enorme tierra en la mitad en dónde metatron estaba junto a Michael y uriel.

- ¿Que hacen aquí? - pregunto metatron al verlos

-¡aaaahhhh!- Muriel soltó un grito corriendo hacia el tumbandolo al suelo.

Michael y uriel iban a levantarse pero beel apareció su arco está vez con fuego infernal en la punta de la flecha.

- Muevanse y tendrán que buscar nuevos cuerpos - amenazó volviendo a su apariencia original y estos se sentaron en silencio.

Muriel golpeaba el rostro de metatron - ¡¿Dónde está Dios?!- le gritó tomándolo del saco.

- ¡No lo sé! - dijo recibiendo otro golpe - ¡quitenmela! - grito hacia los presentes.

- y que nos golpe también a nosotros no gracias - Crowley cruzo los brazos volviendo a su apariencia demoniaca igual que Beelzebub - sigue con confianza muriel y dale uno de mi parte.

- querido... - aziraphael noto la tierra.

- ángel detenla tu no quiero que me lanze un rayo de luz divina o algo así - dijo sin dejar de ver a muriel.

- no querido eso no,miren.

Todos miraron la tierra viendo como habían millones de puntos grises apareciendo.

- ¿Que está pasand... - Uriel se esfumó en un humo gris.

Luego siguió metatron, ,muriel, Michael y gabriel, Adam intento rápidamente devolverlos pero por más que movía sus manos nada pasaba como si su poder hubiera Sido drenado

- ¡Gabriel! - Beelzebub grito mientras que su hijo bajaba el arco viendo a su padre con preocupación pero Beelzebub también se esfumó.

- este poder .... Es de Azirley, se los llevo ¿Por qué ?..- beel aseguró viendo a los padres de esta los cuales se vieron con preocupación

- algo hizo con satanás... - aseguro Adam - mis poderes desaparecieron.

En la tierra los angeles estaban en un lado mientras que los demonios en otro, Beelzebub vio a su arcángel tratando de acercarse a el pero una barrera no se lo permito haciendo que la empezará a golpear, Gabriel toco la barrera viendo a su amado.

Los humanos estaban arrodillados sin poder levantarse alejados de los seres inmortales.

- ¡Angeles y demonios! - una voz firme sonó en medio de los dos bandos, dejando ver a una joven muy hermosa Gabriel, Muriel y Beelzebub reconocieron esas alas - ¡Les daré la guerra que tanto han querido! - chasqueo los dedos y todos obtuvieron armas y armaduras - ¡Pero! - sonrió con superioridad - ¡No podrán asesinar a ningún humano y la guerra acabará... - miro a ambos lado - ¡CUANDO TODOS ESTEN MUERTOS!.

Con estas palabras apareció un trono en medio de estos sentandose cruzando las piernas desapareciendo las barreras y un espíritu de guerra se implantó en todos los seres celestiales y demoníacos comenzando a luchar con todo su poder incluso aquellos amantes prohibidos.

Un domo gris se formó y en su interior el sumbido de una mosca sonó.