Sangre de mi Sangre - Nian

Capítulo 7.- Reencuentros Inesperados.

Narra Ian:

Había comenzado la mañana con una junta muy importante sobre la nueva construcción que había en puerta, con la cual no fue nada sencilla de lidiar y ahora mi secretaria me decía que afuera había una mujer que decía llamarse Nikolina Dobrev, a quien se le ocurre querer jugar con algo tan sagrado como lo es la memoria de mi Nina.

Me quedo viendo toda la ciudad a través de la inmensa ventana de mi oficina cuando escucho una voz femenina, una voz que me deja completamente desconcertado, me giro lentamente para ver de quién se trata aunque muy en el fondo lo sé.

Y al estar de frente veo que se trata de Nina, me es imposible creerlo, pero lo es. Está diferente, ya no es aquella adolescente de la que me enamoré. Escucho como mi secretaria se disculpa, le digo que no se preocupe. Tengo muchas preguntas aún no puedo creer que sea Nina quién está frente a mí ¿pero cómo es eso posible? Recuerdo que la última vez que la vi estaba muerta, cuando la tenía entre mis brazos su cuerpo estaba inerte, no tenía pulso.

Le digo a Emily que nos deje solos y le ordeno que no me pase llamadas. Al segundo en que ella sale de la oficina escucho hablar a Nina.

-Sé que te estarás preguntando si esto es real. –Me dice viéndome fijamente a los ojos. –Sí, soy yo la que está aquí, Ian.

Claro que me lo estoy preguntando, es que me es imposible creer que sea ella. Una parte de mí quiere lanzarse a ella, estrecharla entre mis brazos y dar gracias al cielo porque está viva pero la otra parte solo desea reclamarle, saber porque nos hizo esto a mí y a nuestra hija. La otra parte de mí solo desea odiarla.

-No lo puedo creer. –Me limito a decir de manera enfadada.

-Ian... yo lamento mucho todo lo que pasaste. Sé que me creías muerta, que sufriste mucho. –Me dice con los ojos cristalinos.

-Y por lo visto no lo estabas. –Digo con una mueca desagradable. -¿En dónde estuviste todo este tiempo y a que vienes ahora? –Le pregunto molesto.

-Ian si yo te contara todo lo que paso, no vas a poder creerlo. –Me dice acercándose a mí y yo retrocedo.

-¿Contarme qué? ¿Por qué te hiciste pasar por muerta? ¿Por qué nos abandonaste a tu hija y a mí? –Le digo de manera exaltada. -¿Qué vas a contarme?

-Ian las cosas no fueron así. –Veo como sus lágrimas se hacen presente en su rostro.

-¿Entonces como fueron? Explícame como fueron porque yo lo único que sé y que recuerdo es tenerte aquel día entre mis brazos sin vida. –Le grito recordando aquel momento, el momento más doloroso de toda mi vida.

En ese momento la puerta se abre y veo entrar a Nicole y Natalie a la oficina. Nina se encuentra de espaldas hacía ellas por lo que no la pueden ver.

-¿Se puede saber porque tu secretaria no nos dejaba entrar? –Dice Nikki de mala gana y Natalie se acerca hacia mí y me saluda con un beso en la mejilla.

-Mamá y yo decidimos venir para invitarte a comer. .-Volteo a ver a Nina quien no despega la mirada de Natalie y no parece muy sorprendida. Natalie se gira y la mira.

-Ella era la señora que te decía papá. La que fue ayer a casa a buscarte. –Dice ella muy sonriente. Veo como Nikki se acerca y en ese momento sus miradas se cruzan. –Ella es mi madre, Nicole Reed. Ayer ella iba a atenderla pero cuando regresamos usted ya no estaba.

Si yo me llevé una sorpresa muy grande al descubrir que Nina no estaba muerta, ella también se la ha llevado al enterarse que Nicole, la que era su mejor amiga años atrás, ahora es mi esposa y madre de Natalie. Lo veo en su mirada, se ve devastada y está conteniendo las lágrimas.

-Hija, vamos a esperar afuera a tu papá, él tiene cosas que arreglar con la señora. –Dice Nikki, Natalie asiente y salen de la oficina.

-Te casaste con Nikki. –Me dice por fin derramando todas las lágrimas que llevaba acumulando. -Sabía que estabas casado pero jamás imaginé que fuera con la que era mi mejor amiga. –Dice secándose las lágrimas. Yo trato de decir algo pero ella me interrumpe. –Será mejor que me vaya, tu familia te está esperando. –Me dice afligida.

-Necesitamos aclarar algunas cosas, Nikolina. –Ella me mira desolada. –Espero mañana podamos seguir la conversación pero no aquí. –Ella asiente mientras abre su bolso y saca una tarjeta, me la da y veo que en ella esta apuntada una dirección que conozco perfectamente y un número de teléfono.

-Ya sabes dónde encontrarme. Adiós Ian. –Me dice dándome una última mirada y camina hacia la salida de mi oficina.

-Adiós Nina –Suspiro en cuanto se cierra la puerta.

Bueno pues como se los prometí. Me dio mucha pena y tristeza escribir este capítulo. Ojalá lo disfruten. Espero sus comentarios y votos que son los que me hacen seguir motivándome a escribir para ustedes.

¡Gracias por su apoyo incondicional!

#Wattys2015