Solo Tú Y Yo [Ticci Toby x Tn] T3

Capítulo 7.

Más tarde...

Salgo del baño para luego caminar y buscar en el cajón de mi armario ropa para Sofi. Le hemos comprado ropa el mismo día en el que vino aquí, sin embargo, recién al tercer día dejó que la bañe. Recuerdo cuando se puso a llorar cuando vi sus heridas hechas con cinto y algún cable de seguro, cicatrices y golpes en su espalda y por todo su cuerpito. Cuando vi cómo sus costillas se marcaban en su pecho y cómo su cabello tan lindo se caía un poco. Lloró mucho, y admito que yo también derramé unas pocas lágrimas.

¿En serio su madre era mi hermana? Que asco me da saber que tengo en mi sangre algo que ver con ella.

Hoy solo a dejado caer una pocas lágrimas, cada vez que le doy un baño trato de decirle algún chiste o contarle algo interesante, algún dato, para que se distraiga de sus heridas. También trato de que ría o sonría haciendo algunas cosas con mis poderes. Sé que aunque sea pequeño, todo esto ayuda para que ella se sienta mejor, o al menos para que sepa que aquí la vamos a cuidar y querer.

Como hace algo de frío escojo un pantalón de buzo negro, una remera rosa manga corta y su ropa interior. Cierro el cajón y vuelvo al baño, donde Sofi me espera envuelta en una toalla que también le conseguí para ella. Su mirada perdida en una esquina del baño se desvía hacia a mí cuando me acerco a ella. Sonrío mientras me arrodillo frente a ella y dejó su ropa sobre el retrete. Sofi desvía su mirada, agachando su cabeza.

—¿Te encuentras bien? —cuestiono, tratando de que me mire, pero ella solo asiente.

Suspiro. La visto con cuidado ya que no sabe muy bien cómo mantenerse de pie, aunque se sostiene de mi hombro. Una vez que termino de vestirla, la cargo en mis brazos para salir del baño y acostarnos en mi cama. Ella se acurruca en mí y yo solo me pongo de costado, mirándola. Sofi se acurruca más y eso ya me dice que está llorando de nuevo. Pienso hasta que se me ocurre algo.

Alejo un poco mi mano para asegurarme que ella no la golpee si se mueve, mis ojos se tornan rojos emitiendo un pequeño brillo que ilumina el techo, y creo una pequeña llama de fuego. Empiezo a crear diferentes formas con esta. Una planta. Una flor. Un conejo. Diferentes cosas. Al pasar del tiempo fui mejorando mis poderes y ahora puedo hacer varias cosas con él, aunque en pocas ocasiones los ocupo, la verdad ya no los necesito mucho, solo la velocidad y sanar.

Me acomodo un poco cuando Sofi se gira levemente para ver qué estoy haciendo. Queda mirando fijamente. Cuando la encontramos, hice lo mismo para que deje de tenerme miedo, y por eso ahora solo mira fijamente, entretenida. La miro un momento y ella solo aparta la mirada. Sonrío un poco.

—¿Quieres ver algo más increíble? —murmuro dejando de hacer el fuego, haciendo que mis ojos dejen ese brillo rojo y vuelvan a la normalidad.

Sofi me mira un momento y asiente. Sonrío de nuevo. Me nuevo un poco y ella hace lo mismo para dejarme llegar a mi estante de luz, en el cuál tengo algún que otro juguete que me he comprado o que me regalaron. Agarro la mayoría, me pongo bien contra la pared y hago que Sofi se ponga frente a mí, dejando un espacio vacío en la cama donde dejo los juguetes.

Sofi me mira un momento, sin entender lo que estoy haciendo. Yo solo le sonrío mientras mis ojos se tornan verdes. Estiro una mano hacia un juguete de león, creo una pequeña luz verde en las puntas de mis dedos y lo toco. En cuestión de segundos el pequeño león se empieza a mover, poniéndose de pie ya que estaba acostado. Se estira un poco con un pequeño bostezo y empieza a caminar.

Sofi, asustada, se va un poco para atrás quedando más pegada a mí. Sonrío levemente.

—No te asustes, no hace daño —murmuro para calmarla.

Extiendo mi mano y la dejo frente al león, quién sube lentamente. Acerco mi mano a Sofi para que lo vea. Ella lo mira un momento hasta que agarra su manita y la acerco al león para que pueda acariciarlo. Al ver que el león le deja, Sofi sonríe levemente sin despegar sus labios y lo sigue acariciando.