Reencuentro

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Volví a despertar con más vigor. Al principio estaba desorientada y pensé que habría despertado en mi pésimo y milimétrico piso alquilado. Después recordé que no estaba sola.

Esta vez, no había gente a mi alrededor. Vi a alguien que pensé que sería el chico que me había encontrado en la misión, pero no logré reconocerlo de primeras porque le había conocido en la más completa oscuridad. Y ahora había luz. No era un entorno demasiado iluminado pero era suficiente. Y tenía buen rollo.

—¿Cómo te encuentras? Imagino que mejor —comenzó a hablar—. Te saqué de allí como pude. Como cabe imaginar no hice nada más. No quise terminar la misión por ti. No habría podido.

—Gracias por salvarme el culo —respondí tras la confirmación que esperaba.

—No hay de qué, aunque la próxima vez nos lo podríamos ahorrar, ¿no crees? Te inyectó el muy cabrón una sustancia letal pero llegamos a tiempo para tomar medidas. Probablemente notes efectos secundarios durante unos días. Quizá semanas.

—No sé cómo agradecértelo. Pero me gustaría salir de aquí y volver a mi piso.

—No soy quien para impedirlo pero aquí estarás a salvo y te podrás recuperar prontamente.

—Así que esta obsesión por mí viene dada de la información que conozco. Vamos, que me queréis utilizar.

—No trabajamos de ese modo. No utilizamos, colaboramos. Y a ti también te conviene.

Me planteé que quizá tuviera razón muy a mi pesar. Lo que tenía claro era que no iba a dar por perdida la misión.

—Tenemos contactos. Pero para contar con ellos necesitamos más información.

Observé sus ojos verdes claros que me inspiraban nostalgia y confianza. No sabía por qué, pero era la típica conexión que sientes con alguien que conoces desde hace mucho tiempo. Y ni siquiera recordaba su cara. Me sentía extrañamente cómoda con él y eso era algo que no me pasaba con prácticamente nadie.

—No estoy preparada para compartir nada de lo que guardo. No sé si puedo confiar en vosotros.

—Bueno, te he salvado la vida, ¿tú que opinas? —pregunto con una sonrisa encantadora.

Se colocó unas gafas holográficas que jamás había visto en ninguna otra parte.

—Piénsatelo. Espero que la respuesta sea positiva. Y también espero que consideres eso de quedarte aquí , te vendrá bien. Lo digo por experiencia.

Abandonó la sala.

Punk's Not Dead | DedsecDonde viven las historias. Descúbrelo ahora