Capítulo Quince

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                         Valerie

Al otro día me doy cuenta que Tyler volvió sin nosotros a Nueva York, Alexander viene a mi habitación para decirme que volveremos solo él y yo, pero que nos iremos en la tarde. Siento que el pecho se me oprime. Pensé que él me creería pero supongo que nadie se imaginaría que su mamá es una mujer malvada capaz de todo para separarlo de mi, por no creerme suficiente para él.

Alexander me mira con algo de lastima.

—No debería meterme en esto, pero nunca pensé que tu serías capaz de engañar a Tyler.

—No lo engañé, pero entiendo si no me crees, él tampoco me creyó. —dije sin ánimos.

—¿Y si te digo que te creo? —eso me hizo mirarlo. Estamos en mi habitación mientras yo terminaba de arreglar mi maleta para volver a Nueva York.

—¿Me crees?

—Algo siempre me dijo que había algo que no cuadraba, siempre le insistí a Tyler para que hablara contigo, pero estaba muy dolido y en verdad las pruebas que le mandó su madre parecían muy reales.

—Te juro que no lo son.

—Tendrás que demostrarlo.

—Ese es el problema que no sé como demostrarlo.

—Ya se me ocurrirá algo.

—Gracias. —dije porque sentí algo de alivio por saber que Alexander me creía.

—No es nada, solo quiero que la verdad salga a la luz.

Asentí.

—Ah Valerie, otra cosa.

—¿Si?

—¿Que tienes que ver con la niña que estaba con Diane el otro día? —me preguntó mirándome fijamente y palidecí.

—No sé de qué niña hablas. —dije tratando de hacerme la desentendida.

—Creo que si sabes, pero no te presionaré.

Mierda él sabía, sabía de Olivia.

Alexander estaba saliendo de la habitación cuando lo detuve.

—Por favor no digas nada.

—No lo haré, no es mi secreto por contar, pero él merece saberlo.

—Lo sé, pero tengo miedo.

—Él la amará.

—¿Eso crees?

—No lo creo, estoy seguro. —dijo esbozando una sonrisa.

Dos lágrimas se deslizaron por mis mejillas sin permiso, este viaje había sido un viaje lleno de emociones y supongo que me habían superado.

Me daba mucho miedo contarle a Tyler sobre Olivia. Me daba miedo que él no llegara a quererla y que ella lo sintiera, porque de algo si estaba segura. Y era de que Olivia lo amaría sin importarle nada.

Y tenía miedo de lo que me pudiera hacer la madre de Tyler si se enteraba que trabajaba con él. No me cabía duda que esa mujer era capaz de cudesentendido.

Ya en el jet de vuelta a Nueva York le conté a Alexander todo lo que había pasado. Que la madre de Tyler me había mostrado fotos suyas en la cama con otra, que me había pedido mantenerme alejada de él o sino mis padres se quedaban sin trabajo. Que sabía de la existencia de Olivia y me había amenazado para que no le contara a Tyler. Alexander me miraba sorprendido.

—¡Mierda! Sabía que Charlotte Jones era algo malvada, pero nunca creí que llegaría hasta ahí.

—Yo tampoco pensé que era capaz de tanto, pero ya ves.

Trabajando Con Mi Ex (Libro I) 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora