Pedro Pascal (Unión) 1/2

499 21 1
                                    

Pedro Pascal --- Unión

Pedro y Renata se conocen de años y han mantenido una relación que afortunadamente se ha mantenido privada. Ambos se alegraron de que él fuera nominado en tantos premios por su papel en TLOU. Ella le promete que asistirá a las ceremonias de premiación para apoyarlo; con esto saliendo por primera vez en público juntos como una pareja. Pero desafortunadamente un asunto familiar por parte de Renata la hace viajar a México.


La primer noticia con la que me encuentro al momento de bajar del avión en California fue que Pedro no ganó el Emmy a mejor actor principal en serie de drama. Mi corazón se hizo pequeño al imaginar la reacción interna de mi pareja y mucho más sabiendo que no estaba ahí.

Lo primero que hice al subir al taxi, fue sacar mi celular y entrar a las redes sociales, en donde al principio encontré muchos mensajes hacia Pedro.

"Tú siempre serán el ganador en nuestros corazones" "Para nosotros ya eres un ganador, Pedro" y cientos más con imágenes. Busque hasta que por fin encontré el video de la premiación.

Sabía que no iba a externar lo que sintiera en el momento, por lo menos no en cámara. Era una persona extraordinaria que se alegraba de los logros de los demás, de eso estaba segura, sin embargo, eso no quería decir que no le doliera que no haya sido él.

No iba a poder hablar con él en ese momento, seguramente estaría en el after de la premiación. Solo le mande un mensaje diciéndole que había llegado a California y que ya estaba instalada en un departamento cerca de la zona.

"Eres mi ganador, corazón. No lo olvides. Llegue a California" y después de eso le mande la ubicación en donde me hospedaba.

No espere una respuesta de su parte, el llegaría. Lo único que quería era abrazarlo y estar ahí para él. Así como lo estuvo conmigo cuando me llamaron para decirme que mi abuela había fallecido. No fue un asunto que me doliera, puesto que no estaba tan unida con mi familia, mucho menos con la paterna, quien todavía vivía en México; pero por decencia tuve que asistir, además de que ella me metió en el testamento dejándome algunas cosas que no quería. Cedí toda mi parte a quien correspondiera.

Así como paso con él, no estábamos presentes con el otro, pero el apoyo nunca faltó.

Cerca de las 2 de la mañana, la puerta se abrió, permitiéndome ver a Pedro entrar. Todavía llevaba su cabestrillo y lucía tan elegante como siempre.

—Hola, cariño— me saludo con una sonrisa; no perdí tiempo y me acerque a rodearlo con cuidado con mis brazos; sin lastimar su hombro, que con el paso del tiempo podía moverlo un poco más. —No tienes una idea de cuanto te necesitaba, Renata— susurra dejando un beso en mi cuello antes de esconder su rostro en el mismo sitio.

Siento su aliento un poco agitado chocar con mi piel, disfruto de la sensación que me provoca su presencia. Con él me siento completa y no entiendo como hemos podido pasar tanto tiempo separados.

Fue una semana eterna para ambos —Yo también, cariño. Te extrañe tanto— se lo hice saber pasando mis manos por su cabello que esta un poco duro por los productos que tiene para su peinado.

El suspira apretándote con su brazo sano contra sí.

—¿Cómo estás?— el ya estaba sentado en el banco de la sala, dejándose acariciar el cabello y la piel de su cuello. Su coronilla estaba contra mi pecho. Hace un sonido en respuesta, como quitándole importancia al asunto —No me mientras, Pedro. Te conozco más que tu mismo—

Se queda callado, no le exijo una respuesta. Sé que necesita un momento para ordenar sus pensamientos; porque él es así, es muy sincero con lo que dice y siente, pero cuando se siente mal trata de minimizar la situación para no preocupar a quienes le importan de verdad.

One Shots ---- Pedro PascalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora