One Shots ---- Pedro Pascal

Franky Morales (No quieres cenar)

Dedicado a NitaJuarez

}Franky Morales --- ¿No quieres cenar?

Naomi y Franky son pareja se conocen desde que el llegó a vivir a Vancouver, estaba en una etapa de descanso de las fuerzas armadas hasta que lo llamaran. Todo fue tan espontáneo, que empezaron a vivir juntos luego de 2 meses de conocerse y luego de 4 años de relación, se vieron obligados a estar alejados.

Hacía ya 5 o 6 meses que no la veía, ni siquiera una llamada. Solo cartas, como con años anteriores, así nos tenían internados en el bosque. La única forma de comunicación eran radios entre nosotros y la base militar que se encontraban a 10 km del campamento donde nos encontrábamos.

Me estaba volviendo loco, estaba mal ser dependiente de ella, de su presencia, de las emociones que me embargaban solo con verla, pero desde que la conocí, nunca más quise alejarme de Naomi. Se convirtió en mi razón de seguir, mi motivo para mantenerme vivo. Lo mejor que me paso en la vida fue ella.

Me fui a Vancouver para librarme de tanta mierda que había hecho, para que mi mente estuviera en paz por lo menos un tiempo. Aprovechar los años que me dieron libres para poder encontrarme, y lo hice, pero tuve mucha ayuda.

Naomi era lo único que quería en la vida, si algo más me faltaba, no importaría porque la tendría a ella. Y simplemente con eso podía ser feliz. Sin embargo, no podía negarme a esto, estaba en mi contrato y tuve que hacerlo.

Y ahora estoy pagando las consecuencias de no leer las letras pequeñas. Estoy alejado de mi mundo y de mi paz para un simple reentrenamiento de supervivencia en el exterior. Como si 15 años de servicio no fueran suficientes.

Me fui hace 6 meses pensando que podría llamarla, pero no fue así cuando nos retiraron todo. Técnicamente sería como si estuviéramos internados en el bosque, nada de comunicación que pudieran "rastrear". La situación que habían ambientado era bastante real.

Y todavía me quedaba la mitad de mi estadía.

—Nunca pensé verte tan desesperado por alguien— se burló William de mí.

—Cállate—

—Tampoco te desquites conmigo—

—No lo entiendo. Quiero hablar con ella, por lo menos escuchar su voz. Saber que me sigue amando y yo me estoy muriendo de las ganas de irme de aquí.— ese era uno de mis grandes miedos, muchas de mis relaciones anteriores se habían roto por el tiempo que llegaba a no estar.

Y ahora que la encontré y me enamoré como un loco, no quería que pasase eso. Que ella se cansase de esperarme, porque me moriría si algo así se le pasara por la cabeza.

—Si te ama, lo entiende— respondió más calmado y tratando de darme ánimos. Pero yo no estaba para eso.

La tarde del día siguiente regresaríamos al campamento principal. El experimento de supervivencia terminaría, y solo faltaría la preparación táctica. Lo único que me reconfortaba es que no estaba solo, muchos de mis amigos también habían sido reclutados y en mi grupo se encontraba Will. Me reencontraría con Pope y Ben al regresar.

En el camino de regreso, volví a acercarme a uno de mis supervisores —Señor, pido autorización para hacer una llamada importante a Vancouver—

—¿Algún asunto relevante?—