-g.

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El reloj indica que

es hora de decidir

que quiero hacer

en realidad,

y es que ni yo misma se. 

Recuerdo haberle

dicho a mi mejor 

amiga que nunca fingiera amor, 

que hiciera lo que

en realidad quería; 

y estoy aquí, 

besando unos labios 

que no me atraen, 

tocando un cuerpo 

que no me seduce, 

jurando amor cuando 

en realidad solo siento dolor. 

Tengo los ojos cerrados

mientras siento como 

mi cuerpo responde 

a cada una de las caricias, 

mientras que mis pensamientos

están en otro lugar, 

en otra persona. 

Y recuerdo aquella película

de la mujer que vivía

atrapada en una relación 

que no deseo, 

aquella que cuando

besaba a su esposo 

pensaba en aquel desconocido del bar, 

que suspiraba,

gemía, 

gritaba,

sonreía, 

todo con falsedad, 

deseando que llegara pronto el final.

También recuerdo

lo que sentí cuando 

suspire y me di cuenta

de que no quería

seguir viviendo así, 

recuerdo que lloré toda

una madrugada cuando 

me di cuenta de que me 

estaba convirtiendo 

en un títere sin sentimientos.



Tic tac.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora