Al día siguiente, Hakim estaba en su despacho hojeando un pergamino que le había llegado.
Era una carta de las muchas criaturas que vivían en manada o harem de su reino a parte de los habitantes como él. Hadas.
A pesar de ser criaturas pequeñas, estas poseían un poder de proteger los recursos naturales de los bosques y ayudar en lo que podían a otras criaturas del lugar, a parte de ellas estaban también otros animales mágicos como los Elfos y duendes. Los animales que no eran mágicos pero viven en sus bosques son los conejos, aves, Tigres, ciervos, petauro del azúcar y otras criaturas que no puedan defenderse.
Si, los tigres son gatos grandes que pueden cazar y matar a las otras criaturas, pero estos tigres no eran asesinos de las mismas criaturas del lugar, ellos protegían a los más pequeños y comían si, pero comida que los mismos elfos y hadas que le hacían aparecer a ellos y a todos los animales restantes del bosque.
Pero el punto era, que las hadas le habían mandado un pergamino dónde le decían que una parte del bosque donde ellas plantan y cuidan plantas medicinales (no sabe para qué si el tiene el poder de curarlos) estaba quemada.
El lugar estaba hecho cenizas, pero el lugar que estaba quemado era el césped y suelo de siembra, las plantas no estaban, era como si las hubieran arrancado.
Dejó el pergamino y miró a su consejero y mano derecha.
_ Adel llévame allá con las hadas.
Salieron del despacho y caminaron por los pasillos de color rojo, blanco y dorado del lugar, con retratos de serios gobernantes pasados.
Sus hermanos estaban ocupados, Fergus tenía esgrima a esa hora de la mañana y Gaelan clases de etiqueta, lo último lo consideraba estúpido pero las reglas reales exigían ello.
Cuando salió fuera del palacio real, ya habían varios guardias listos en sus caballos, vestían armaduras doradas con el logo del fénix en el centro de su pecho, montados en sus caballos color negros.
El ese día vestía una larga capa color blanco con detalles en plateado, una camisa blanca de botón y un chaleco elegante color dorado, pantalón licra color gris y sus botas negras hasta sus pantorrillas.
Su caballo estaba listo, uno de raza Frisón color blanco.
Tenía su equipamiento de jinete listo y se montó en el, lo tomó por las riendas de un color dorado y las agitó, este galopando saliendo de las grandes puertas que daban con el puente fuera del palacio, algunos de sus guardias siguiéndolo y consejero.
Cuando estuvieron fuera del puente siguieron su camino hacia el bosque que tenían con árboles y grandes piedras frente a ellos, también en frente tenían al pueblo de Phoenix y los guardias al rededor custodiando y veían volar algunos fénix dentro del lugar, más Hakim rodeó el pueblo y sus guardias junto al consejero le siguieron, los otros que rodeaban el pueblo hacían reverencia al ver pasar al Rey.
Llegaron al otro lado del pueblo, dónde daba la salida del nombrado e iban al bosque, seguían andando y Hakim podía ver algunas criaturas que soltaban algunos chillidos alegres por verlo pasar, el iba con algo de rapidez y por eso no podía detenerse a saludarlos.
Pasaron algunos minutos y detuvo en un suave jalón de riendas a su caballo y este se detuvo para empezar a caminar más despacio, una parte del bosque donde estaban que tenía pinos, árboles, plantas, una larga vegetación natural ellos se encontraban, sus guardias estaban al tanto si tenían que proteger a su Gobernante y su fiel consejero estaba a su lado.
Se detuvieron y algunas Hadas salían de los arbustos chillando emocionadas y reverenciando ante el ojidorado, algunos elfos también salían y duendes, casi algunos animales de las otras especies también salían a recibir al supremo.
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La Rosa Del Fénix
RomanceUn Alma oscura, Un Alma que para otros es profundamente malvada, con sentimientos como la de una Rosa marchita, esperaba por un Alma blanca, un Alma pura de buenos sentimientos y de sonrisa tan brillante cuan estrellas en una noche fría y sombría co...