tu qué haces aquí ?- me sonríe.
- no lo sé- mira a otro lado- no se cómo llegué aquí- sonríe- cuando desperté aquí estaba.
- oh pero que tierna- ella me mira con su mirada sería-, que lindo que me vinieras por mi- reí y me dio un bastonazo.
- te doy tiempo de que corras- sonríe con esos dientes perfectos.
- seguro no me alcanzarás- dije riendo.
- tiene 10 segundos para correr- empieza a contar y yo no me muevo- uno- comenzó a correr- oh corre que sabes que si te alcanzaré- con su bastón tira de mi pie y hace que me caiga en la nieve fría- te dije que te alcanzaría- sonríe.
-eso fue trampa - me ayuda a levantarme y ella niega.
- te di 10 segundos pero no los aprovechaste y sabes bien que yo juego sucio- sonríe.
- aún así es trampa- ella niega.
- vamos a tomar un café, ya hace frío- me dice poniedoce su guante morado.
Asiento y nos vamos a un hermoso café que estaba cerca, entramos y vimos una gran pero gran cola, venable parecía desesperada así que nos vamos a sentar esperando nuestro turno, después de 15 minutos al fin llega nuestro turno, ella pide un café normal y yo pido un chocolate caliente.
Salimos del café y nos sentamos de nuevo en una banca mirando a la gente que a mina le desagradaba y a mí me parecía graciosa su cara de desagrado a la gente, mirábamos los autos y la nieve blanca, también a uno que otro niño jugar con la nieve y hacer muñequitos y bolas de nieve.
Vi aún niño jugar con una pequeña a las bolas de nieve, decidí unirme cuando me acabe el chocolate, mina al verme dejarla sola me quiso seguir pero le dije que ahora venía.
-hola niños- ellos me miraron- puedo jugar a las bolas de nieve con ustedes?- ellos tan solo asintieron y comenzó la guerra.
Estaba contenta jugando asta que se me escapó una bola de nieve a la dirección de mina cerré los ojos para no mirar, cuando los abrí vi que tenía la cara llena de nieve, mis amiguitos y yo comenzamos a reír.
- corran- dije y ellos y yo salimos corriendo, mina venia atrás de mi con una bola de nieve.l
La lanzó y me pego en la espalda, a lo que la mire y comencé a decir " me rindo me rindo" y mis amiguitos comenzaron a reír al igual que mina, se veía contenta y no se la razón de aquella sonrisa tan bonita que tenía, se acercó a mi y tomo mi mano para luego ayudarme a levantarme.
Luego de eso decidimos que era mejor ir a casa, pues sabe que mañana me voy a ir a Italia, y saben ella se va conmigo no me importa lo que diga papá, eso ya no me importa, soy mayor de edad y puedo hacer lo que a mí se me de la regalada gana, aparte de que soy demasiado independiente.
Entramos al departamento en el que estaban mis padres para decirles eso, pero no los encontramos en casa así que le dije a mina que pasara mientras yo iba a recepción a preguntar a dónde habían ido mis padres.
- disculpe señorita- no me hace caso ñ- DISCULPE SEÑORITA - al fin me mira.
- que se le ofrece señorita- me mira irritada.
- sabe a donde fueron mis padres- me miró como diciendo no se quienes son- a si perdón, mi padre se llama tayron y mi madre Maite, sabe dónde están- la mire.
- mira chica a mí no me importa saber a donde fueron pues yo solo atiendo y listo, no te puedo dar información de tus padres- voltea los ojos, yo frustrada miro a mi alrededor y veo que nadie mira.
- mira idiota de mierda- agarro su camisa bien planchada- s mi no me hablas así- voltea los ojos- y no vuelvas a hacer eso o yo misma los dejaré así- saco una pistola de mi pantalón- ahora zorra me dirás a dónde fueron mis padres- ella me mira con miedo y veo mover su mano a un botón- más te vale no hacer eso o disparo- ella detuvo su mano y me miro con miedo en sus ojos- ahora habla o si no te daré en esa cara tan estúpida un balazo.
-bi...bien- dice- ellos le dijeron que iban al casino- dice con miedo.
- vez que tan fácil era zorra- suelo mi agarre- gracias.
Meto mi pistola de juguete a mi bolso y luego me voy directo al ascensor y pico el último botón y subo, espero un buen rato para llegar y después de llegar voy a la habitación donde me encontró a mina sentada mirando la hermosa ciudad, luego me mira con una sonrisa y me hace unas palmaditas a su lado para que me siente, es lo que hago y las dos miramos la hermosa ciudad, no se por cuánto tiempo pero ya estaba oscuro y se comenzaban a ver muchas más luces en la ciudad, ella tomaba mi mano pero parecía nerviosa y en su cara no había expresión alguna, aún que me gustaba tener contacto con ella aveces no me parecía correcto pues me acordaba de que yo soy una asesina y que no merecía w nadie, que soy un peligro y más cosas, aveces pensaba en que no merecía la felicidad que tengo en estos momentos.
Aveces tenía miedo de que mina supiera mi verdad y que yo fuera las que destruyera sus sentimiento por mi y por todo lo que sabe de mi, me daba miedo perder todo lo que tenía con ella en estos momentos, tenía miedo a perderla, no quisiera perderla pues me dolería, aún que no quiera hacerle daño se que se lo estoy haciendo mintuendole en estos momentos, haciéndome llamar Liliana, no se que hacer si decirle la verdad o seguirle mintiendo y segur haciendo mucho más daño.
- mina- ella me mira- te tengo...que decir algo.
- si claro dime- me sonríe de lado-es algo serio verdad?- asiento- no te preocupes juntas resolveremos eso- que comprensiva.
- yo.... Mi verdadero nombre no es Liliana- me mira- es Sofía- sigue mirando- es Sofía delawere, se que te suena el nombre pues mi nombre sale todos los días en las noticias buscándome, soy la hija de los mafiosos más grandes- mira a otro lugar, pareciera no importale- por eso estoy huyendo de los angeles, mi padre me dijo que pronto encontraría el cuerpo-, ella voltea rápido con los ojos como plato- lo sé, suena raro muy raro pero es la verdad, mi madre es Michael delawere y mi madre Ester delawere, son los mismos de la otra vez pero con apellidos diferentes, perdón por mentirte, no era mi intención pero no quería que nadie supiera mi verdadera identidad, ahora lo sabes por qué no quiero mentirte, no quiero que montamos en eso que tenemos aún que realmente no se que somos realmente, pero me gustaría pasar una vida contigo, sin mentiras y sin engaños- me sonríe- perdón por mentirte pero era necesario-, mis últimas palabras cuando sentí los cálidos labios de mina en los míos y sus manos en mi cuello.
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Amor criminal
RandomHay historias que no no las cuenta completas o con detalle, puesta es la historia de Sofía una joven criminal que es hija de los más grandes mafiosos de América, está joven se hace llamar Liliana Williams para no ser descubierta ya que si tuviera su...