Musa

Capítulo 20

 Nos fuimos a la cama al terminar y pusimos una peli, pero noté que ella estaba algo incomoda.

- Que te pasa amor

- Que me duele mucho la espalda y no llego a echarme el aceite relajante

- Te lo echo yo?

- Vale pero si te incomoda o algo verme desnuda me lo dices, que no quiero que te moleste o pienses que quiero otra cosa, que aunque también la quiera evidentemente por que eres una diosa en todos los sentidos, te voy a esperar el tiempo que haga falta sin presionarte, no

- Ya tranquila no te preocupes, ya te he visto antes, no te acuerdas?

Ella se quitó la camiseta y joder, sigue impresionan dome, cuando se dio la vuelta para mostrarme su espalda y decirme donde le dolía, le eche el aceite y empecé con un pequeño masaje de esos que me gusta dar desde pequeña, empece por el cuello, haciendo círculos para liberar tensión, baje a sus paletillas con una pequeña caricia y acabe tocando cada parte de su espalda con caricias y masajes, le dije que se sentara mirándome y empece a darle un pequeño masaje en la clavícula, me quedé mientras embobada viendo sus ojos y entonces fue cuando me di cuenta de que le daba pena, enseñarme su cuerpo así, asique me acerqué a ella y le susurre un preciosa, antes de acostarla y ponerme encima de ella.

-Voy a hacer algo que llevo un tiempo queriendo hacer.

-Que?

-Tu solo estate quieta, cierra los ojos y siente, no te haré absolutamente nada que pueda hacerte sentir mal, desde que me enseñaste tu cuerpo el otro día, me he quedado con ganas de esto. - fue entonces cuando lentamente acaricie su rostro, su cuerpo, y con mis manos dibujé cada cicatriz que tenía en su piel, noté como se tensaba bajo mis manos y fue el momento idóneo ya que cogí su bazo y empecé por ahí, bese con delicadeza cada rincón de su cuerpo que veía con una cicatriz, noté como empezaba a llorar cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo, subí a su cara, le di un beso y acaricié su rostro antes de continuar, le musite un – Paro? - La vi negar con la cabeza, asique, continué acariciando y besando cada centímetro de su piel desnuda, justo antes de terminar de besar todo su torso, me quité la camiseta del pijama que llevaba y subí a sus labios y rozando los míos con los suyos le dije – ahora que tu me has mostrado tu parte más sensible y he visto lo hermosa que eres, podria decir que con estas cicatrices eres aun mas preciosa, es momento de que abras los ojos, para descubrir una parte muy intima de mi vida – mientras ella abría los ojos, llenos de lagrimas, yo seguía acariciando su cuerpo, al verme, estalló en lagrimas, y me abrazó uniendo nuestros cuerpos semis desnudos, sentí un escalofrío al notar sus manos, acariciar mi cuerpo susurré.

-Que pasa Lissa? Soy horrible no? - Se separó de mi

Qué?, NO, eres la cosa mas bonita que he tenido el placer de conocer, y que me muestres algo que te hace tanto mal, solo hace que me sienta orgullosa de lo que eres y de como eres, de lo fuerte que eres por que has conseguido pasar por todo esto y seguir aquí, y haces que me sienta afortunada de tener el placer de verte de esta manera, y habría esperado lo que hiciese falta para verte así y habría esperado aún más si cuando te vieses preparada para mostrarte te hubieses echado para atrás, por que estoy enamorada de ti y de como eres,y que tengas estas cicatrices solo me demuestra que eres más fuerte de lo que pensaba y me hace sentir todavía más orgullosa de que te muestres ante mi

- ..... estas enamorada de mi

- Desde hace años Eli, desde que te veía desde lejos en el instituto, desde que te vi en el gimnasio aquella mañana, supe que tenia que hacer lo posible por arreglarme contigo y cuando me diste esa oportunidad, bueno, yo me conformaba con ser solo tu amiga, pero llegas, me besas y pones mi mundo patas arriba

- ....

- Eli mi amor no hace falta que me digas nada, yo esperare lo que haga falta para que ordenes tus sentimientos, pero una pregunta, me dejas tocar las cicatrices?

- Sí

Y así comenzó un rastro de caricias en mi cuerpo, en cada una de las cicatrices de este, me pidió que me levantase de la cama y me dio la vuelta con su mano en mi cadera delicadamente, me acarició todas las cicatrices de mi espalda y fue cuando la sentí arrimarse a mi cuello y besarlo despacio, empezó el mismo rastro de besos que hice yo, pero me sorprendió una cosa, cada una de las cicatrices que besaba susurraba un preciosa, perdoname o un diosa, caí rendida a sus pies cuando sentí las caricias que me daba, el sentimiento que transmitía y la dulzura que me mostraba aun seguía dándole vueltas a lo de que está enamorada de mi, yo de ella también, pero no se lo quiero pedir ni decir aquí, asique tenia que hacer algo para pedirle que fuera mi novia, me dio la vuelta y la vi con lagrimas en los ojos, besando cada centímetro de mí, suave como si me fuera romper por una caricia más fuerte de lo debido, me abrazó cuando acabó de besar mi cuerpo y me dio un beso largo y profundo

- No sabes lo preciosa que eres Eli, eres un maldito monumento, que no he visto un cuerpo más hermoso que el tuyo y esto no caerá en balde, por que te prometo Eli, que haré lo que haga falta para que te sientas tan segura conmigo que todos tus problemas se te pasen, que acariciaré tu cuerpo las veces que haga falta y de daré mis ojos para que te veas como lo que eres, y que haré lo necesario para que me quieras tanto como te quiero yo, por que Eli, me has demostrado lo que es amar a alguien y que alguien te quiera como me quieres tu, y no pienso perderte o renunciar a ti – Lloré como una niña pequeña cuando me dijo eso y acabé durmiendo a su lado, abrazadas sin miedo de ser rechazadas.