Capítulo 21

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Al día siguiente me desperté con unas uñas acariciando mi espalda y sonreí al verla a mi lado despeinada y sin maquillar.

- Hola preciosa

- Hola mi amor – me acerque a darle un beso y fue cuando caí, esto sin camiseta, vaya...., ayer no me la puse despues de eso, bueno da igual, ahora me ducho y me visto, que tengo que ir a casa, que es el cumple de Sara.

- Mierda Lissa, hoy es el cumpleaños de Sara me va a matar por no haberla felicitado aun.

Llamé a Sara

- Felicidades capulla

- Gracias cariño, el viernes por la noche, fiesta en mi casa

- perfecto, te veo el viernes

- Dile a Lissa que venga también.

Pasaron los días, el viernes fue todo genial, el cumple de Sara fue emocionante cuanto menos, recordamos tiempos vividos y el sabado por la mañana volvimos a casa y le dije a Lissa de quedar el domingo por la mañana, lo tenia todo preparado, nos íbamos a un hotel a 2 horas de la ciudad, toda la semana. Cuando llegó el domingo le dije que me dejase conducir a mi y que ella llevaría los ojos vendados todo el viaje, por que quería que todo esto fuera una sorpresa, cuando llegamos a la casa, era perfecta, tal y como había imaginado, pero no entramos, solo entré para hacer el check in y dejar las maletas, nos fuimos a comer por ahi y cuando se estaba haciendo de noche, volvimos a la casa y le vendé los ojos a Lissa

- Espera fuera un momento cariño

- Vale

Cogí las rosas que tenia preparadas y revisé toda la habitación revisando que estuviese todo como lo pedí, sales de baño, luces de ambiente y pétalos de rosa en toda la cama formando un corazón, y unas vistas impresionantes a la ciudad desde la terraza, la guié hasta la esquina de la habitación y me incliné ante ella, mostrando el ramo.

- Bueno, no se si sabes o intuyes el por que te he traído aquí esta semana, pero quiero que sepas, que te amo, que no solo tu estas enamorada y que cuando me lo dijiste me quedé en blanco por que no sabia como reaccionar ante todo lo que estaba sintiendo, que cada momento que paso contigo es oro, y cuando te besé por primera vez toda la niebla y miedo que podía tener en mi cabeza se esfumaron, por que solo tenia una meta una vez te besé, sabes cual?

- Cual?

- Quería que esa persona tan hermosa que acababa de besar fuera mi novia, asique idee todo un plan, para que todo fuera realidad, te puedes quitar la venda mi amor – me hizo caso y se quedó muda mirándome – Quieres ser mi novia Lissa?

- Claro que quiero amor – Nos besamos lentamente y al separarnos dejé el ramo de rosas en la cama y fui con la segunda parte del plan, bajé las persianas de la habitación, puse música ambiente y configuré un azul cálido en la habitación.

- Ahora cariño, vamos a tomar un baño en esa hermosa bañera

- Juntas?

- Solo si tu quieres cariño, si no pues me ducho y luego tu

- Claro que quiero, voy a preparar la ropa

- voy preparando entonces el baño

Puse la bañera a llenarse con unas pocas sales de baño, ella entró cuando la bañera estaba casi llena, la mire y la besé, solo me bastó eso para darme cuenta de que es ella la persona que necesitaba en mi vida

- Te ayudo a quitarte la ropa cariño

- Si me ayudas lo mismo no solo nos bañamos

- Me puedo arriesgar

Empecé a desnudar la acariciando su cuerpo mientas tanto, la dejé solo en ropa interior y cuando me iba a desnudar yo, ella lo hizo por mi, antes de meternos en la bañera nos quitamos el faltante y ella se puso delante de mi, me puse a darle un masaje en la espalda con el agua calentita y le enjaboné el pelo, sintiendo cada caricia que ella de paso me regalaba, despues de un par de caricias y besos escondidos por una sonrisa, salimos de la bañera para secarnos, nos pusimos el albornoz y antes de que ella pudiese empezar a vestirse empecé a besarla delicadamente, mientras acariciaba su cadera, ella puso sus brazos al rededor de mi cuello, esta mujer me estaba volviendo loca, no podía con ella, el beso se empezó a poner un poco caliente de más pero me daba igual, ella prendía en fuego mi cuerpo, continué besando su boca cuando ella se separó de mi con sus ojos grises casi negros de la excitación y me susurro un – Mi amor si no paras de besarme así voy a malinterpretar lo que está pasando – continué besándola y cuando me separé le dije – Lo mismo es lo que estas pensando

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