Francisco se tira exhausto sobre el sofá de su oficina. Nunca se hubiera imaginado lo complicado, cansador y absurdamente consumidor que era ser dueño de algo.
Apenas tenía 26 años y ya era dueño de un hotel prestigioso; no formaba parte del top 10 del país, apenas alcanzó el top 50 el año pasado (considerando que eso fue antes de que él asumiera el cargo).
—¿Me vas a contar de dónde salió ese amigo tuyo?—La silla de su escritorio da una vuelta y es Juani quién pregunta.
Francisco grita y se cae de culo al suelo.
—Che, ¿¡me querés matar, gordis!?—Su pecho se mueve ritmícamente más rápido y se frota el costado del trasero.
Fran busca la mirada animada, juguetona y divertida que tiene Juani, pero sólo se encuentra con ojos cansados, como los suyos.
Sintió una puñalada en el corazón.
Antes de poder decir palabra, Juan se levanta de la silla y camina hacia él.—Completamente intencionado—Responde, alzando las manos en un gesto de "me atrapaste"—. Pensé que no había más secretos entre nosotros.
—Auch. Un escopetazo dolía menos—. Francisco no puede evitar añadirle gracia a la situación, pues si no lo hace su pareja, debera hacerlo él mismo.
Juan le extiende la mano y el otro la toma sin dudar. Están menos de 3 segundos frente a frente; el menor agudiza la mirada mientras que Fran se fija en sus rulos despeinados y deshechos, Juani odia tenerlos así.
Fran vuelve a sentarse en el sillón, y palmea el lugar a su lado para que lo ocupe. Juani suspira, rueda los ojos, se muestra molesto pero le obedece igual.
—Pérdoname—Es lo primero que dice Fran, tomando las manos de su novio entre las suyas—. No era mi intención ocultar nada, olvidé mencionarlo y–
—Qué buena racha que llevás olvidando cosas.
Romero acaricia los dedos de Juani.
—Pero si nuestro aniversario es en 2 meses más. ¿Qué olvide?—No sé, algo se te habrá pasado—Él otro contesta con un puchero, volteando la cabeza.
—Che, Juanchi, decime que te molestó—Fran toma la barbilla ajena, obligándole a que lo mire—, lo voy a cambiar.
Juani se le lanza encima y lo envuelve en un abrazo.
Poner mala cara suele ser su escudo cuando está triste. Quizá por eso Fran tampoco se toma tan seriamente sus discusiones.
—¿Qué pasa?—El mayor repite su duda,
—Ya no pasás tiempo conmigo—Juani murmura con la cara oculta en el cuello de Fran—. Te extraño. Paso mucho tiempo en el hotel, pero vos no tenés tiempo para mí.
Auch, eso sí que le dolió.
—Juan—Su voz sale afectada, decaída. Le hace cariños en el pelo mientras piensa cómo arreglar eso—. Lo siento.
—Ese suggar daddy tuyo–
—Era mi papá.
—Es lo mismo—Juani continua—. Arruinó nuestra relación. No entiendo porqué insististe en hacerte cargo del hotel, el viejo apenas te reconoció.
Francisco suspira, deja un beso suave en su frente.
—¿Puedo decirte algo estúpido?
—Si me vas a preguntar si quiero un beso–
Fran le pone un dedo en los labios para que se calle.
—Después eso. Vos sabes que mi viejo no me crió, tiene otros hijos que sí quiso—Juani asiente—. Pero me dejó su mayor logro a mí, este lugar. Y como creo en el destino, J. Creo que, sí esto me pertenece ahora, debe ser por algo.
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ʜᴏᴛᴇʟ ʀᴏᴍᴇʀᴏ ᵇˡᵃˢ ˣ ᵉˢᵗᵉᵇᵃⁿ
FanfictionDonde Esteban es recepcionista en un hotel O Donde Blas consigue su primer trabajo como botones. *algunos caps sobre juani x fran