SUBASTADA

Capítulo 28

Sara...

Han pasados algunas semanas desde mi estadía en el hospital, a Jacob le dieron de alta, pues su recuperación comenzó a ir con rapidez desde que lo pusieron a mi lado, se dejaba tratar por las enfermeras y seguía todas las indicaciones que el doctor le daba al pie de la letra, incluso estaba presente cuando el doctor me hablaba a mí y también me ayudaba a seguir las indicaciones al pie de la letra

Sin embargo, aun estando de alta no se despegaba de mí, mandaba a uno de sus hombres a que fuera por algo de ropa para él junto con algunas cosas de aseo personal y se las traía, bañándose en el baño de mi habitación y aun así exigió tener una camilla a mi lado para descansar y estar al pendiente de mi salud. Yo sin embargo no refute en lo más mínimo ante ese pedido que había hecho debido a que, aunque le dijera algo me iba a ignorar completamente

Mi hermano por otra parte incremento la seguridad alrededor del hospital y cuatro manzanas más, algo exagerado lo sé, pero no había nada en la faz de la tierra que lo hiciera entender que exagero un poco con el tema de la seguridad. De hecho, Jacob aumentaba su esquizofrenia diciéndole que era muy poca seguridad, ganándose un manotazo mío en el hombro

Me han venido a visitar Ana, Raquel, la señora Wolf y a duras penas Ramses, quien tuvo que ingeniárselas bastante para que lo dejaran pasar, pues Jacob no accedía a que viniera a verme, pero uno que otro beso por parte mía lo termino convenciendo. También comencé a averiguar que le había pasado a mis guardaespaldas

Martin se encontraba en el mismo hospital que yo estable, había recibido múltiples golpes eh incluso algunas quemaduras de la explosión que yo no me había dado cuenta, Jacob me dijo que justamente cuando estaban a un hilo de desvivir a Martin, Jason llego a tiempo matando al otro tipo evitando que le dispararan a Martin

Eso explicaba el disparo que había escuchado cuando habían cerrado la puerta de esa camioneta, con respecto a Romanov solo recibió una herida de bala en el hombro y Jacob le dio una semana de descanso para que se recuperara y pudiera descansar un poco de sus labores de guardaespaldas, pues todos estaban agradecidos por su leal trabajo y tras algunas quejas por parte del mayor termino por aceptar la orden de su jefe

-¿Lista preciosa?

Jacob saco de mis pensamientos, estábamos de camino a visitar la habitación de Martin que estaba un piso abajo del mío

-Si, vamos – el pelinegro comenzó a andar la silla de ruedas en la que estaba sentada, pues mis piernas al recibir múltiples golpes al igual que mi cadera quedaron debilitadas un poco y tenía que recibir unas cuantas terapias para recuperar mi fuerza y volver a andar con normalidad. Eso no me frustraba o me deprimía, más bien me daba aún más fuerza para que mi recuperación fuera más rápido y poder salir de aquí bastante bien

Llevaba una sudadera unos shorts negros, pero eran tapados por una manta en mis piernas, junto con unas medias de ositos de lo más acogedoras, entramos al ascensor y Jacob presiono el botón un piso abajo del mío para ir a visitar a Martin, me daba mucha alegría saber que él estaba bien, pero a la vez me sentía culpable por sus heridas y por casi correr el riesgo de caer muerto

Pellizcaba un poco la piel de mi muñeca por los nervios y me mordía la mejilla internamente dejando pequeñas heridas en ella pero que se iban a cicatrizar en algún momento, lo único que me reconfortaba era la mano de Jacob en mi hombro apretándolo un poco, haciéndome saber que él iba a estar conmigo en todo momento

De echo en estas semanas me ha tratado como una princesa, eh incluso a veces consigue uno que otro chocolate para dármelo cuando tenia antojo de uno, el tema del bebé sigue sin hablarse, incluso si había un canal en la televisión con algo respecto a maternidad, familia, embarazo o bebés, lo quitaba inmediatamente cerrando mis ojos con fuerza y olvidar todos esos recuerdos dolorosos, la sangre recorrer en mis piernas, los doctores quitando lo poco que quedaba de mi bebé en mi vientre, y esos días en los que me sentía tan vacía y sin dirección alguna