Capitulo 30

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Sara...

Han pasado un mes mas desde que estoy aquí, todo ha ido de maravilla, la doctora siguió haciendo esas terapias en la piscina y bueno..., ya sabemos como termina eso

Eh mejorado bastante, ya no tengo moretones, puedo caminar con normalidad eh incluso descubrí que por alguna razón tengo más flexibilidad en mi cuerpo que la que tenia antes, Jacob dice que eso es una gran ventaja, pero cada vez que lo dice me lanza su típica mirada lasciva de siempre

Raquel también ha venido a visitarme, así que le tuve que contar la repentina aparición de mi madre, lo cual no le agrado, de echo cuando se la topo de frente tuvo que salir huyendo al cuarto de baño para no tirársele encima

James ha estado algo tenso cada vez que mamá comparte con nosotros, y es entendible, pero no me imagino todo lo que tuvo que pasar él de niño para que se sienta así cada vez que su presencia esta en su campo visual

-¿Aun no entiendo por que le diste otra oportunidad?

Raquel me miraba indignada mientras me ayudaba a empacar mi ropa en l maleta que Jacob habia traído para mi

-Es mi madre y además todos merecemos una segunda oportunidad, ¿no crees? – la pelirroja suspiro cerrando los ojos un momento para luego mirarme y poner su mano en mi hombro

-Sabes algo amiga, eres muy buena para este mundo de mierda, ninguno de nosotros te merece – la chica me sonrió – más aun así decidiste quedarte con todos nosotros

-Pues claro, ustedes son mi familia – nos abramos por unos breves segundos para seguir empacando lo que faltaba para cerrar la maleta

Mire la habitación de hospital por ultima vez, recordando todos los momentos que pase aquí, tanto tristes como felices eh incluso algunos lujuriosos cada vez que mi pelinegro veía la oportunidad

-¿Lista para volver a casa? – mire a Raquel quien estaba en el lumbral de la puerta con mi maleta, sonreí levemente y agarre la urna de mi pequeño en mis manos para salir de la habitación junto con la pelirroja

Me hubiera gustado quedarme en el pequeño apartamento que estaba compartiendo con Raquel, pero por petición de Jacob iba a volver a la casa que teníamos en Alemania al igual que Raquel, pues tal parece que ella y Nicolas habían tomado la decisión de vivir juntos lo cual me emocionaba bastante por ambos

Al salir del hospital nos encontramos con Jacob y James apoyados en la camioneta que nos llevaría al aeropuerto para irnos a casa, finalmente pude ver a mi lobito nuevamente con sus típicos trajes, su loción fue lo primero que me invadió al estar a pocos metros de él para luego ser sus brazos en mi cuerpo, sumergiendo mi rostro en su pecho y dándome un beso en mi cabeza

Yo sin embargo llevaba puesto unos pants negros junto con una camisa de él que me quedaba bastante grande del mismo color, al igual que unos deportivos blancos y un intento de coleta mal arreglada. La verdad es que queria sentirme cómoda en todo el vuelo y poder dormir un poco en el trayecto ya que no dormí mucho la noche anterior por los nervios de volver a casa

-Moria por este momento

Susurro en mi oído mientras yo sonreía para mirarle y darle un pequeño beso en sus labios

-Vamos, quiero llegar a casa cuanto antes

-Lo que la reina ordene

Jacob abrió la puerta para que nos pudiéramos montar Raquel y yo par así mi hermano y él irse en los asientos de adelante, el trayecto fue tranquilo, la pelirroja me hablaba de múltiples cosas entre ellas la mil y un formas de cómo iba a decorar la casa que compartiría con Nicolas ahora

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