El Plan Que Nos Unió

•CAPÍTULO 3•

-¡¿QUE HAS HECHO QUÉ?!

Le tapo rápido la boca a Tyler y abro mucho los ojos. Varios voltean a vernos y yo me siento completamente avergonzada.

-¿Puedes parar de gritar? Nos están viendo todos-hablo en un murmullo y Tyler hace que le destape la boca.

-¿Ahora te avergüenzas? ¿Después de haber salido corriendo cuando te miró el grupo de chicos que toda mujer desea que la mire?. ¡¿En serio?!

Me mira con indignación y trato de defenderme pero la Profesora de Literatura se me adelanta.

-Tyler, ¿quiere pasar al frente y decirnos por qué está gritando cuando debería estar leyendo en silencio?

Tyler voltea a verla y niega frenéticamente.

-No, no. No es necesario. Ya mismo me pongo a leer. Pero muchas gracias por su opción de expresarme ante los demás.

La Profesora niega con la cabeza y sigue con su trabajo de copiar las consignas en el pizarrón.

-¿Ahora sí dejarás de gritar?-murmuro y él me mira con mala cara.

-Ya...Es que no puedo creer lo rara que eres a veces-habla susurrando y toma su libro para fingir que está leyendo.

-No soy rara. No me interesan ellos, que es otra cosa completamente diferente.

-Definitivamente dejaste toda la dignidad en ese pasillo, Twy.

-Si sigues así voy a enterrarte la cabeza en el libro.

-Okey, okey. Ya me callo, agresiva.

Me doy cuenta de como trata de no reírse y aprovecho para seguir leyendo.

La verdad, no me importa mucho como redactar un guión teatral, aunque me gusten las películas y las obras en vivo. Pero prefiero eso, antes que seguir contando mis estupideces del día.

Cuando voy por el tercer párrafo de mi lectura, es el momento en que escucho un susurro a mi lado.

-¿Entonces, le pediste disculpas a Cameron?

Siendo sincera, creí que su silencio iba a durar menos.

No hay que subestimarlo.

-Si, tuve que hacerlo. Sino, la Directora podría haber llamado a mis padres y eso sí que sería un desastre.

-Y ahora debes pedirle disculpas al profesor Quinn.

-Tenía planeado hacerlo hoy, cuando terminen las clases. Siempre pasa por al lado mío en la salida.

-¿Quieres que te acompañe?

-No hace falta, será solo un segundo. Le pido perdón por lo que pasó y nos vamos. Es sencillo.

Tyler asiente, sin despegar la mirada de su libro.

-Está bien, pero si cambias de opinión solo dímelo. Ahora vayamos a lo importante.

Comienza a sonreír lentamente y me mira.

-¿No te pareció ni un poquito lindo?

-¿Quién?

-El Profesor Quinn.

Lo miro de golpe y levanto las cejas con sorpresa.

-¿Qué?

-Hablo de Cameron, tonta. ¿Quién más va a ser?

-¿Ese estúpido sin cerebro?

-Exacto.

-Obvio que no, ¿Entiendes que él cree que el mundo gira a su alrededor? Y hoy lo ha demostrado al 100%. Si me quedaba alguna duda, hoy me la quitó.

-¿Tan mala fue la conversación en la oficina?