¿Quién eres? (Hyunlix)

Capítulo 17

---Sonríe más seguido, te vez
Hermos@  cuando lo haces...✨️

~~Narra Hyunjin

Luego de una cirugía de nueve horas, un nuevo paciente entró a urgencias, según escuché había tenido un accidente en motocicleta.

—Doctor Hwang, lo necesitamos en el quirofano doce—  Me dijo uno de los médicos que estaban en urgencias, prácticamente me lo ordenó y eso que yo soy el jefe del hospital, mi padre es él dueño.

Pero ese es el costo a pagar por ser uno de los mejores cirujanos de este hospital y probablemente del mundo entero, digo ya que muchos pacientes de otros países son traídos hasta acá para que sea yo el que haga su cirugía, al principio todo estaba bien pero eso cambió cuando ni siquiera me quedaba tiempo de comer, aún no me queda tiempo pero al parecer mi metabolismo ya se acostumbro a comer unas cuantas migajas al día.

Entre al baño y me quite la ropa sucia de la anterior cirugía, me desinfecté y me coloque otro traje quirúrgico nuevo y aquí vamos  nuevamente a la sala de cirugía.

—¿Y que tenemos aquí? ¿Cual es el diagnóstico?— pregunté colocándome los guantes y el tapabocas.

—Paciente de treinta y tres años, con posible trauma craneal grado tres, tres costillas rotas  y una de ellas está cerca del corazón, corte profundo casí llegando al fémur, tiene un brazo rozo y una hemorragia  en el pulmón izquierdo— Mierda ¿como es que sigue vivo? Yo con un pequeño corte en el dedo siento que estoy muriendo y que se me saldrán las tripas.

—Bueno eso es todo, hay que
comenzar— La cirugía dió inicio.

—Bisturí— Hice el primer corte cerca de su corazón, me debatí intentando elegir cual operación hacer primero, si hacía del pulmón era posible que la costilla cerca del corazón lo pinchara y se creará una hemorragia más grande la cual seria difícil de detener y luego estaba la hemorragia en sus pulmones la cual lo podía ahogar y para terminar de joder... su cráneo roto.

Me decidí por la del corazón, que sea lo que dios quiera.

—Succión—

La cirugía duró aproximadamente catorce horas, no he dormido ni un solo segundo, los párpados me pesan, estoy tan casando que solo pienso en llegar a mi cama y dormir pero luego recuerdo que tengo que manejar a casa de Felix y pasar por él y por arte de magia el sueño se va y solo me quedan las ganas de abrazarlo y tal vez dormir en sus brazos.

Media hora después estaba fuera de su casa esperando a que saliera ¿Como es posible que alguien se quede dormido en la ducha sin ahogarse? Yo me quedo dormido y despierto en el infierno.

Y pensando en eso no me di cuenta de cuando el sueño me venció y quede totalmente inconsciente sobre el timón de mi carro, unos golpecitos al vidrio me despertaron.

Abrí mis ojos con dificultad y entonces lo vi, ahí estaba él, mi hermoso novio,  él estaba parado frente a mí, vistiendo una pijama roja la cual hacía resaltar el pálido de su piel y esas preciosas pecas, mis ojos lo escanearon de pies a cabeza, joder se veía realmente sexy y hermoso con ese short corto  que dejaba a la vista sus piernas blancas, su camisa era de botones pero habían unos que no estaban abrochados, dejaba ver parte de su pecho pero hubo algo que me llamó más la atención.

"SUS MEDIAS DE POLLO"

Joder ¿Como alguien puede verse tan tierno y caliente usado esas medias?

—¿Por qué me ves de esa manera?—  Preguntó y yo subí la mirada hasta su rosto, él mordía su labio inferior y sus tiernos ojos brillaban con la luz de la luna.

—Creo que hoy cenaré pollo— Le sonreí y me baje del carro, lo tome con posesión de la cintura y lo atraje a mi cuerpo con fuerza haciendo que de sus labios salga un pequeño jadeo.

Con desesperación uní nuestros labios en un beso cargado de pasión, las manos de Felix se deslizaron por mi cintura hasta llegar a mi trasero, pensé que solo las posaría ahí pero me hizo soltar un gemido que se ahogó en sus labios cuando sus dedos apretaron mis glúteos.

—¿Por qué hiciste eso?— Le pregunté cuando el beso terminó, él sonrió con picardia.

—Desde la mañana que te fuiste a trabajar tenía ganas de hacer eso— Me susurro al oído y sentí como su lengua se introdujó en ese lugar, haciendo que me separé de él rápidamente por lo raro que se sintió.

Mientras yo sentía los nervios al tope por lo que hizo, él se moría de la risa frente a mí y juro que me gustaría grabarla y ponerla de tono de llamada, me gustaría grabar este momento y colocarlo de fondo de pantalla  para verlo todos los días y que su rostro risueño me de fuerza para seguir soportando lo dura que es la vida.

—Te amo— camine nuevamente a él y coloque mis manos en sus mejillas húmedas por las lágrimas que su risa había ocacionado y es así como quiero verlo.

Llorando pero de alegría y me llena de felicidad saber que al menos en este momento yo fuí su fuente de felicidad.