𝑨𝚖𝚘𝚛 𝚎𝚗𝚝𝚛𝚎 𝚘𝚍𝚒𝚘 [𝑯𝒚𝒖𝒏𝒍𝒊𝒙, 𝑴𝒊𝒏𝒔𝒖𝒏𝒈 𝒚 𝑪𝒉𝒂𝒏𝒎𝒊𝒏]

¿Es tu vida o la de ellos?

–¡LEE MINHO!, ¡¿ENSERIO PENSASTE QUE IRTE SERÍA FÁCIL?¡

–Jisung quédate junto a Changbin y protege Felix, no lo dejes ningún momento solo, no te separes de Changbin.–Le dijo Minho llevándolo con Changbin.

–Minho, ya no te pongas en peligro, la policía no tardará en llegar ya les avisaron, por favor...no te arriesgues más...

–Jisung...

–Por favor...

Minho se quedó unos segundos mirando a Jisung, después miró a Changbin y suspiró.

–Lo siento...Changbin, llévate a todos fuera de aquí, no quiero que nadie se quede, cualquier cosa que vaya a pasar solo me pasará a mí, no quiero que nadie siga corriendo peligro...

–Minho...

Changbin asintió mirando a Minho y después tomó la mano de Jisung.

–No Minho, por favor no...Changbin suéltame...–Jisung miró a Minho con los ojos cristalizados.–No me iré...no te dejaré...

–Jisung...–Minho puso una de sus manos en la mejilla de Jisung acariciándola.–No hagas las cosas más difíciles...Changbin, sácalos de aquí.

Changbin volvió a asentir y trató de hacer que Jisung caminara sin lastimarlo.

–Minho...prométeme que estarás bien...–Dijo derramando algunas lágrimas.

Minho estaba aguantando las ganas de llorar, sonrió mirando a Jisung.–Te prometo que estaré bien...–Dijo.

Jisung se limpió las lágrimas y se dió la vuelta para caminar hacia donde se encontraba Felix.

–Lixie...

Felix se separó del abrazo de Hyunjin y sonrió al ver a su padre, fue hacia él y lo abrazó.–¿Dónde está papá?

–Lix...tenemos que salir...

–¿Qué?, ¿y papá?...

–Jisung, Minho quiere que nos vayamos lo antes posible.

–¿De qué están hablando?...

Jisung volvió a abrazar a Felix derramando algunas lágrimas.–Salgamos de aquí...

Felix no entendía lo que pasaba, pero obedecío a su padre.

Una vez que todos estaban afuera afuera, Minho derramó las lágrimas que estaba aguantando estando hace unos minutos con Jisung.

Sabía que en cualquier momento Min-Joon no iva a dudar en matarlo, así que se preparó mentalmente para aceptar que había perdido, era la única forma en la cual podía proteger a su familia y amigos.

Min-Joon dió un aviso solo con el movimiento de su cabeza para que sujetaran a Minho, los hombres que los sujetaron pudieron darse cuenta que no se resistía, también que los demás no estaban.

Al amarrar a Minho en una silla y haberlo puesto enfrente de Min-Joon, uno de los hombres se acercó a Min-Joon y le susurró al oido.

–Señor, los demás no están.

Min-Joon no pudo evitar poner una cara de confusión y molestia por aquellas palabras.

–¿Cómo que no están?

–Si, señor, al parecer se fueron.

–Ellos no pueden irse de aquí, búsquenlos y traíganlos.

El hombre asintió y fue con los otros a decirle la orden que Min-Joon les había dado.Una vez que ellos se fueron Min-Joon se quedó analizando a Minho quien ahora se encontraba tratando de liberarse, sabía lo que aquellos hombres habían ido a hacer.