NOIR

IX

—¡Tiene que ser un error!¡No estoy de acuerdo con esto!— La voz de Maximus era audible por toda la enfermería molestando a más de un paciente entre ellos el pobre Neville que tenía oídos sensibles.— ¡¿Como puedo ser solo un Alfa común y corriente?!¡Soy el niño que vivió esa poción es defectuosa!— Comenzó un berrinche el Griffindor más la atmósfera bajo unos cuantos grados cuando el niño regordete escucho la fría voz a sus espladas.

—Dudo mucho que una de mis pociones sea defectuosa, señor Potter— La irritada voz de Snape hizo presencia y Neville por primera vez en lo que llevaba en Hogwarts agradeció al tétrico profesor de pociones por aparecer de la nada.

—P_Profesor Snape yo_— Fue callado por la mirada gélida del jefe de casa que con pasos lentos y cronometrados llego al lado de la medimaga.

—Callate Potter, la poción para castas secundarias a sido hecha por mi y ni el mismo creador de ellas a logrado crear una tan perfecta como las que hay en Hogwarts que por cierto, es un gusto informarle que han sido completamente mi elaboración basada en la pocion real— Gruño mientras que su seño se fruncia cada vez más.— Es completamente imposible que falle así que callese señor Potter o me veré en la obligación de llevar esto a la Dirección del centro, a sido denominado un Alfa común estese alegre de su resultado, otros estudiantes ni siquiera han sufrido algún cambio— Bufo nuevamente antes de prácticamente expulsarlo de la enfermería.— Y tu Weasley eres inesperadamente un Alfa dominante— Bufo antes de despedir también al niño pelirrojo.

—Gracias Severus— Agradeció la medimaga al profesor pero este solo nego.

—Era de esperarse que esa bola de grasa tubiese ese carácter considerando que su padre no es precisamente un pan de dios— Bufo ¿En que demonios estaba pensado Lily al enseñar a su hijo a ser tan tirano?— Siguiente— Entonces el menor de los Potter ingresó. Por suerte el menor de esos chiquillos era completamente diferente al mayor. Era educado, refinado, inteligente y con unos modales excelentes algo que parecía no haber sido heredado de ninguno de sus padres. Inesperadamente el niño le caía bien.— Harrison, Draco— Saludo secamente a sus mejores alumnos en pociones. Aquellos dos tenían un increíble potencial. Draco lo había sacado de su madre quien habia sido un increíble alumno de pociones cuando aún todos eran alumnos de aquella escuela ancestral. Por otro lado no sabia de donde había sacado Potter su talento, Lily no era precisamente un as en posiones, la pelirroja se esforzaba pero solo era un poco superior a la media, James por otro lado era, junto a Sirius Black, de los peores de la clase, siempre estallaban los calderos, arruinaban las posiones y en el peor de los casos habian creado una especie de cosa que se movía y respiraba, algo realmente aterrador.— Rojo y Magenta— Dijo para que la medimaga pudiese anotar en los registros que ya había sacado.— Harrison tendrás que cambiarte de habitación— Bueno al niño no parecía haberle gustado la idea.

—Profesor por favor no cambie a Harry— Y ahí estaba la voz de su ahijado como  siempre, alegando por aquel niño de iris boscosos y mirada calculadora. No entendia de donde el afán del pequeño chico en proteger al ahora alfa cuando este fácilmente podía salir de una situación mucho más problemática con facilidad. Potrer podría engañar a todos, claro, menos a el.

—Draco, si permito que este en la misma habitación de tres omegas que podrían entrar en celo en cualquier momento ¿Que crees que sucederá?— Levanto una de sus negras cejas esperando la respuesta que por supuesto no iba a llegar. No hacía aquello porque quisiera separarlos o algo relacionado a ello. Solo deseaba que los omegas de su casa estuviesen protegidos y seguros, pues sabía que en cuanto todos supieran de los omegas, ya de por si escasos comenzarían los acosos y movimientos para ganarselos y por alguna razón que desconocía Slytherin era la casa donde mayor cantidad de omegas siempre se presentaban. En su año no solo Lucius que cursaba en sexto, si no que varios miembros más habían acabado con aquella casta, agregando a Regulus que había ingresado a Hogwarts un año después. —Eso pense, si hago esto es por el bien de ustedes, no es que tenga algo en tu contra Harrinson pero como sabrás los impulsos de un alfa son mucho más fuertes que los de un omega— Sabia que el chico debía haberse leído mínimo unas tres veces el libro que hablaba sobre las castas.