High Speed Lovers [Chestappen AU]

18. We've got some problems

Durante los siguientes diez días, Max y Checo se sumergieron en un frenesí de actividades para disipar los rumores y prepararse para la carrera que se avecinaba.

Habían dejado ahora a tres gatos al cuidado de la hermana de Max, quien amablemente accedió a cuidarlos, al sin y al cabo disfrutaba estar con ellos; afortunadamente la pequeña Snow fue aceptada por ambos bengalas, a quienes Max extrañaba, pero sabía que tan pronto volviera a casa, esta vez sí se reuniría con ellos.

Max se encontró con Gabriela y salió públicamente con ella, dejando que los paparazzi capturaran imágenes de ellos juntos para desviar la atención de su relación con Checo. Aunque le costó un poco al rubio besar, abrazar y en general estar con otra persona que no fuera Checo, sabía que era necesario para proteger la privacidad de ambos y mantener la tranquilidad en su relación.

Mientras tanto, Checo se enfocó en su entrenamiento ya de vuelta en Milton Keynes, dedicando largas horas al simulador y a sesiones intensas en el gimnasio para estar en óptimas condiciones físicas para la próxima carrera. A pesar de extrañar a Max, se mantuvo concentrado en su objetivo y encontró consuelo en el apoyo de su familia y amigos cercanos.

Finalmente, llegó el día de la sesión de fotos para Castore en Londres, ambos estaban ansiosos por volver a verse, así fuera por un día nada más, pues sabían que luego debían volver a separarse por diferencias en sus itinerarios. Max y Checo se reunieron en el estudio, donde fueron recibidos por el equipo de producción y fotógrafos.

"¿Estás listo para posar como el modelo profesional que eres, Checo?". bromeó Max, pasando un brazo por los hombros del mexicano, de manera amistosa, ya que sabía que el chisme era más rápido que ellos en sus autos y debía tener precauciones "Claro que sí, Max. Solo espero no arruinarlo todo", respondió Checo con una sonrisa.

Después de varias horas de trabajo, la sesión de fotos llegó a su fin y Max y Checo se despidieron del equipo de Castore con amplías sonrisas.

A pesar de los desafíos y la presión de los medios, se sentían más unidos que nunca y listos para enfrentar cualquier obstáculo juntos.

Al salir, se reencontraron en una van que los llevaría a Milton Keynes, donde se quedarían en una pequeña casa que tenía Max cerca de las instalaciones de Red Bull.

"Fue un día largo, ¿No?". Comentó Max con una pequeña sonrisa "Bastante, pero por fin estamos juntos de nuevo". Susurró Sergio apoyando su cabeza en el hombro del más alto, cuidando que no fueran vistos por el conductor "Lo sé, han sido pocos días, muy pocos de hecho, pero se sintieron como una eternidad". Habló Verstappen en el mismo tono "Es cierto". Contestó Checo en un bostezo, dejando ver su cansancio "Será mejor que descanses mijn mooie zon, así estarás descansado para el resto del dia". Sugirió Max con una pequeña sonrisa "Tienes razón mi solecito hermoso". Respondió Checo dejándose llevar del sueño, pues habían estado en el estudio desde temprano y sería un viaje algo largo.

El rubio estuvo observando los paisajes de la ruta de Londres hacia su destino, pensando en cual podría ser el siguiente paso en su relación, quería que llevaran al menos unos 3 o 4 meses antes de anunciarle la noticia a Horner, y luego ya verían cuándo sería prudente anunciarlo finalmente al público; poco después de que comenzaron a salir, poder ser quienes eran libremente; tomar de la mano, abrazar e incluso besar a Sergio sin ninguna pena ni necesidad de ocultarse, se había convertido en uno de los sueños de Max, realmente quería que fueran libres y lucharía por ello sin importar el costo.

Un rato después, el joven también se quedó dormido, apoyando su cabeza en la de Checo.

Cuando finalmente llegaron a su destino final era casi de noche, agradecieron por el transporte y se adentraron en la pequeña pero acogedora casa.