High Speed Lovers [Chestappen AU]

25. Familia

Luego del último gran premio del año en Abu Dhabi, Max y Checo no le dieron mucho tiempo a las celebraciones, pues debían estar en México para el martes, así que, a la mañana siguiente se fueron en un vuelo a primera hora hacia México. Al llegar, era ya la mañana del martes, así que dejaron sus cosas en casa de los Pérez y salieron casi que volando al hospital, siendo Max quién trataba de calmar a Checo, pues sentía que en cualquier momento subiría el auto por el paso peatonal para adelantar el tráfico.

"Hola mamá". Saludó Sergio abrazando a su madre, tratando de retomar el aliento luego de subir unos 13 pisos por las escaleras debido a que el ascensor estaba ocupado y Checo no tenía paciencia ese día "Hijo, Max ¿Que hacen aquí?". Cuestionó la mujer sorprendida de ver a ambos pilotos "Vinimos a ver a papá, bueno, vine a ver a papá, Max me está acompañando". Explicó Sergio encargándose de la situación, la madre de Checo dió nuevamente un suspiro de alivio "Ah bueno hijo, tu papá ya entró a cirugía, dijeron que salía en unas dos o tres horas. ¿Te parece bien si te quedas aquí mientras tú hermana y yo vamos a tomar algo?". "Claro mamá, ustedes coman algo y tomen un poco de aire, yo me encargo". Contestó Checo con seguridad, ambas mujeres fueron a buscar la cafetería, pues llevaban ya unas horas allí. Ambos pilotos tomaron asiento en la sala de espera.

"Tranquilo amor, todo va a salir bien". Afirmó Max sosteniendo la mano de Sergio, notando como poco a poco dejaba de mover su pierna "Gracias... Gracias por venir conmigo cariño". Habló Checo recostando su cabeza en el hombro de Max, quien besó suavemente su cabeza y pasó su brazo por su hombro, abrazándolo "No me agradezcas amor, es mi deber estar contigo cuando lo necesites, así que, aquí me tienes a tu lado y así será siempre". Esas palabras conmovieron y tranquilizaron al castaño, quien sonrió ligeramente mientras abrazaba el brazo de Max, como si fuera un peluche. Se sentía seguro, protegido, y le agradaba, a ambos.

"Familiar del paciente Antonio Pérez". Llamó el doctor saliendo de la sala de cirugías, inmediatamente Checo se puso en pie "Soy yo, ¿Está todo bien doctor?". "Si, quería avisarle que todo salió bien, el señor tendrá que estar en el hospital por lo menos unos 4 días en recuperación y observación en caso de alguna novedad". Explicó el doctor con serenidad, tranquilizando al mexicano "De acuerdo, muchas gracias". "No hay de que, en un momento lo llevarán a su cuarto, y en unas horas debe comenzar a despertar". Avisó el médico dándole un pequeño apretón de manos "Perfecto, muchas gracias".

Checo dió un suspiro de alivio al oír que todo había salido bien "Bueno, el doctor dijo que todo salió bien". Max tomó la mano de Checo, la acarició suavemente y luego la besó "¿Ves? Te dije que todo estaría bien, amor". Habló con una cálida sonrisa, la cual el castaño correspondió "Lo sé".

Unos minutos después, la madre y hermana de Checo volvieron "Buenas noticias ma, dijeron que todo salió bien, ya lo llevaron a su habitación, dicen que tendrá que estar en recuperación por unos días para asegurarse de que no haya ninguna complicación... También dijeron que tardará algunas horas en despertar de la anestesia". Anunció Sergio entusiasmado mientras dirigía a las mujeres al cuarto de su padre "Ay qué bien mijo, gracias a Dios y la virgencita, si quieres, ve a casa y nosotras te avisamos cuando despierte". Contestó la castaña considerando que su hijo literalmente había atravesado el mundo para poder estar allí, así que debía estar agotado "Ni se te ocurra mamá, me quedaré aquí, ustedes vayan y descansen". "Mijo, tu a mi no me mandas, vienes de un fin de semana de carrera, me imagino que apenas medio dormiste y te viniste para acá, además me da vergüenza con Max, el también debe descansar. Así que se van los dos para la casa y descansan por favor, te avisaré sobre cualquier novedad". Ordenó la mujer, quien a pesar de la edad de Checo y todo lo demás, por supuesto seguía dándole órdenes, las cuales Sergio obedecía tercamente "Está bien, iremos a descansar mamá, nos vemos luego". Afirmó despidiéndose de ambas mujeres "Iremos a casa a descansar, ¿De acuerdo?". Explicó Checo tomando la mano de Max, quien también se despidió con una sonrisa.