Who Loves Jimin? | YOONMIN

Capítulo 27

Yoongi estaba muy nervioso y demasiado asustado.

No podía creer lo que estaba por hacer. Ya se había vuelto loco.

"Esto no está bien"... se repetía a si mismo en su mente.

Aunque hiciera un clima agradable, ya estaba comenzando a sudar.

Con acciones torpes, tocó el timbre de aquella casa.

- ¿Qué haces aquí?- fue lo primero que dijo la persona que abrió la puerta.

- Hola Yeji... ¿Mamá y papá están en casa?- preguntó mirando de manera vulnerable a su hermana menor.

Min Yeji observaba a su hermano con asombro, no sabía que decir. Hace años que el pálido no visitaba Daegu, mucho menos su casa. Pero ahora, está parado en la puerta, preguntando por sus padres; los cuales no le habían dirigido la palabra desde hace casi diez años.

- Pasa... mamá está en su habitación y papá en el estudio, iré a buscarlos- indicó llevando a Yoongi hasta la sala.

Fue ahí que Min se sintió completamente fuera de lugar. Yeji lo guiaba como si el castaño nunca hubiera estado en esa casa. Se sentía incómodo, sentía que no formaba parte de esa familia, de ese hogar.

Tal vez ya no lo hacía.

Despacio se dirigió hasta el mueble donde se encontraba la televisión, ahí habían varias fotografías de la familia.

Yeji y Hyunjin de bebés.

Yeji y Hyunjin en la escuela.

Yeji y Hyunjin en su cumpleaños número dieciocho.

Yeji y Hyunjin en un momento agradable junto a sus padres.

Miró detenidamente todas aquellas fotos esperando, anhelando aparecer por lo menos en una.

No fue así.

No había ni una sola foto de Yoongi.

Una sonrisa amarga se dejó ver en su rostro. Tal vez ya se había hecho la idea, pero aún así dolía. Y mucho.

- Yeji hija ya te he dicho que no me gustan las visitas que llegan sin avisar... ¿A quien invitaste eh?- la voz de la señora Min Yong-Sun se escuchaba en voz baja, parecía que regañaba a su hija, pero la veía con tanto cariño que a Yoongi le dió envidia.

Quería que su madre lo viera así, aunque sea solo una vez.

- Pues...- cuando llegaron a la sala, Yeji miró a su hermano sin saber cómo explicarle a su mamá que él estaba ahí. Inmediatamente la señora Min siguió la mirada de su hija y cuando encontró a la dichosa visita, su corazón se detuvo.

Yong-Sun soltó a su hija del brazo y tapó su boca con ambas manos, mientras sus ojos se empañaban de lágrimas.

Yoongi, su Yoongi estaba ahí parado, en la sala de su hogar.

Tenía tantos años sin verlo, estaba tan grande, tan apuesto. Seguía manteniendo el mismo rostro que cuando era apenas un adolescente, pero ahora con unas facciones más maduras.

- Yoongi... hijo- las palabras salían en un tono tembloroso. La señora Min se acercó hasta su hijo y lo abrazó.

En un principio, Yoongi no supo cómo reaccionar. Su madre lo estaba abrazando, después de tantos años; era capaz de ponerse a llorar como un bebé.

Pero no lo haría.

Porque aún se encontraba dolido por lo que pasó.

Aún manteniendo sus brazos a los costados se permitió recargar su cabeza con la de su madre. Tratando así de obtener y recordar para siempre el calor que emanaba su cuerpo.