Capituló 27

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|Los dos le dieron un trago a sus copas. El se acercó hasta ella y se fue sobre sus labios y la besó con amor, iniciando así su noche de bodas.|

|Los dos sentían su corazón palpitar con fuerzas en su pecho por toda la felicidad que estaban compartiendo por ser esposos.|

|César se quitó su saco y corbata, abriendo algunos botones de su camisa y se acercó de nuevo a ella para besarla y disfrutar de sus suaves labios.|

|Sarita enredó sus pequeñas manos en su cuello correspondiendo a ese profundo beso húmedo y apasionado lleno de amor.|

|Se separaron por falta de aire y con una sonrisa en sus rostros, mientras que se veían con las miradas brillantes.|

|César pasó su mirada por su cuello, pecho y hombros desnudos, guiando su vista hasta el nacimiento de sus senos redondos que se marcaban con fuerzas por su hermoso vestido de novia.|

—¿Quieres comer algo? —preguntó con su mirada oscurecida y dilatada, dándole un suave beso en una de sus manos—

—No tengo hambre, solo quiero un poco más de eso. —respondió apuntando hacia la botella de champagne—

—Claro que si Sara.

|El emperador se separó de ella y fue por la botella de champagne y rellenó nuevamente las copas y se volvió a sentar en un lado de ella.|

—¿Quieres caminar en la playa? —le preguntó sin dejar de admirar su belleza—

—Si... si quiero. —respondió llevando de nuevo su copa hasta sus labios—

|El la tomó de una de sus manos ayudándola a ponerse de pie y la pegó a su cuerpo.|

—Te amo Sara, te prometo que te voy hacer muy feliz. —mencionó depositándole un suave beso en una de sus mejillas—

|Sarita al escuchar sus palabras se lanzó a sus brazos emocionada y muy enamorada porque era correspondida.|

|El la cargó en su hombro escuchando sus carcajadas con fuerzas, mientras que avanzaba por la arena llegando hasta la orilla de la playa.|

|Con cuidado la bajó y la colocó sobre la arena. ella sintió las olas del mar mojar sus pies y su vestido largo.|

|César se deshizo de sus zapatos al igual que de sus medias, quedando descalzo y dobló sus pantalones sonriendo al ver que Sarita alzaba su vestido para que no se mojara.|

|El llevó una de sus manos hasta el bolsillo de su pantalón, sacó su celular y le empezó a tomar fotos ya que veía la espuma de las olas que llegaban hasta sus pies envolviendo el vestido de novia entre ellas.|

|Sarita no dejaba de sonreír y chapotear entre el agua y él no dejaba de tomarle fotos una y otra vez emocionado.|

|Ella corrió hacia el lanzándose a sus brazos enredando sus piernas en su cintura y llenándolo de besos ruidosos por todo el rostro.|

—Te amo, te amo mucho.—mencionó escuchando sus carcajadas roncas—

|De nuevo se besaron envueltos en esa felicidad que los consumía. Se separaron con la respiración acelerada.|

—Quiero... quiero estar entre tus brazos, quiero que me toques. —dijo sonrojada desviando su mirada avergonzada—

|César sonrió a su petición, llevó una de sus manos hasta su nuca y se acercó hasta su oído y con sus labios chupó el lóbulo de su oreja haciéndola estremecer.|

—Yo quiero hacerte el amor hermosa muñeca—mencionó con voz ronca, besando su cuello con hambre deseoso de ella—

|Sara solo cerró sus ojos a ese delicioso contacto, echando la cabeza hacia atrás dándole acceso a que la siguiera besando.|

The Káiser (Reyes de la oscuridad pt2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora