The Káiser (Reyes de la oscuridad pt2)

Capítulo 42

—¿Cómo te fue? —preguntó John ingresando a la habitación de César—

—Matus quiere que haga negocios con él pero sabe que el único requisito que le pido es terminar la sociedad que tiene con Tom. —le respondió abriendo su camisa—

—Hasta dónde yo se entre ellos dos no van muy bien las cosas, creo que todo tiene que ver con su hija. —mencionó el hombre—

—Me imagino que pensó que cazando a su hija con Tom iba a tener más poder pero tal parece que el chico no está decidido a casarse con ella ahora con eso de que tiene un nuevo romance con esa chiquilla me imagino que es menos la probabilidad de que eso suceda. —alcanzó a mencionar cuando el radio de comunicación de John empezó a sonar interrumpiendo la plática

|El hombre rápido lo tomó con una de sus manos y escuchó con atención lo que le decían del otro lado de la línea, lo volvió a guardar y mencionó.|

—Tania está aquí, pide hablar contigo, está en el despacho. —dijo—

—¡Tania! Pero si acabo de venir de su casa. ¿Habrá pasado algo? —mencionó sorprendido-

—Creo que los ojos de esa mujer ya no están en Tom Kaulitz. —dijo el hombre con una sonrisa viendo donde César empezó a cerrar nuevamente su camisa para ir a recibirla—

—No digas tonterías no estoy para esas cosas y lo sabes. —se justificó—

—Ya sé que no... pero no te va a caer mal relajarte un rato y pasarla bien con esa mujer después de todo no sería la primera vez además no tienes ningún compromiso con nadie ya es momento de que empieces a disfrutar nuevamente de la vida.

—Mejor cállate. —pronunció el emperador saliendo de su habitación yendo hacia el despacho—

|Cuándo llegó al despacho encontró a Tania sentada sobre su escritorio, mostrando sus hermosas piernas desnudas.|

|Ella solo sonrió coqueta y jugó con su cabellera rubia colocándola en uno de sus hombros haciéndole notar su pronunciado escote.|

—¿Pasó algo? —le preguntó el emperador  pasando su mirada por todo su exquisito cuerpo—

—Lamento venir a molestarte a esta hora pero platiqué con mi padre unos cuantos minutos después de que abandonaste la casa, el me dijo que tenías problemas con Tom y por eso estoy aquí. —pronunció con voz dulce y coqueta—

—No te estoy entendiendo. —mencionó parándose frente a ella sin dejar de observar sus piernas desnudas—

|Tania bajó del escritorio avanzó coqueta y decidida llegando a su encuentro y se colgó de su cuello restregando su cuerpo sobre el.|

|César solo apretó las manos en puños al sentir su contacto provocativo sobre de el tratando de controlarse.|

—¿Sigo sin entenderte Tania? — mencionó apartándose de ella sutilmente para no ser grosero—

—Cómo ya lo sabes yo fui pareja de Tom hasta hace unos días y se muchas cosas que podrían ayudarte, conozco sus gustos, los lugares que visita, también conozco todos sus contactos, sus amistades que a pesar de que son pocas sé quiénes son también sé cuáles son sus hombres de confianza las rutas que emplea cada vez que sale algún lugar. —le propuso pasando la yema de sus dedos por su pecho desnudo ya que traía su camisa un poco abierta—

—¿Me estás diciendo que estás dispuesta a traicionarlo? —le preguntó con una sonrisa tratando de apartarse de ella pero fue imposible—

—Por ti soy capaz de cualquier cosa... déjame estar a tu lado no se que es lo que te habrá hecho Tom y tampoco me importa pero yo podría ayudarte. —mencionó pegando su cuerpo nuevamente al de César—