VI0LENT0METR0 | Noco.

16 . Abusar sexualmente

Sí, bueno, luego de esto y lo que sigue esperen muchos capítulos en Amorometro como consuelo.

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Noah era realmente malo, muy malo. Un tipo tan guiado por sus sentimientos pero a la vez alguien que sabía escuchar, todo dependía ciertamente de la persona y su estabilidad mental.

Para Cody siempre había sido alguien muy bueno, cuando eran novios apenas, Noah sabía escucharlo, hacerlo sentir feliz, darle su espacio e incluso entendía cuando estaba mal o bien, era como... Alguien perfecto.

Pero dicen que nunca terminas de conocer a alguien por completo, eso pudo comprobarlo aquel día, aunque su mente prefería olvidarlo, no pudo evitar recordar aquello que le atormentaba.

" Era de noche y estaban ambos en casa de Noah, apenas se habían vuelto novios un par de días atrás. La madre del hindú no estaba; Tuvo un viaje de negocios y él se quedaría a dormir en casa de su novio. Todo parecía salir bien.

Estaban viendo una película, algo lindo y del agrado de ambos... Más de Cody a decir verdad, ciertamente infantil, "Charlie y la fábrica de chocolates" siempre tuvo un gusto raro por esa película. Quizás eran los dulces o lo mágico que se veía, no lo sabía.

Aproximadamente daban las doce de la noche cuando empezó a quedarse dormido, Noah apagó la TV y cerró todo con seguro, cargo a Cody en brazos mientras subía las escaleras para llevarlo a su habitación.

Lo dejo caer en esa bonita cama que Cody siempre quiso tener.

El dormir sería bueno, pero no era lo que pasaría.

Y lamentaba tanto haberse quedado con él.

Noah había empezado a quitarle la ropa a Cody, el apenas podía forcejear contra el moreno por el cansancio que sentía.

- Noah, no... -

Murmuró casi dormido, su vista solo se enfoco en el chico que se desvestía frente a él.

Estaba aterrado.

No le dió su consentimiento, no le dijo que quería eso, no quería hacerlo, no quería que su primera vez fuese así, el quería algo especial.

Por favor, no le hagan eso.

- Tranquilo, está bien. -

Pero sus plegarias jamás fueron oídas por nadie, sintió como las frías manos de su novio pasaban por su cuerpo temblante de nervios. Sus dedos bajando por su entrepierna y en su entrada. Estaba respirando agitado, no porque le gustará eso, porque apenas podía moverse para evitar que pase.

Quería llorar, pero las lágrimas no salían, ni una sola, como si sus ojos estuvieran secos.

A los minutos empezó a sentir que algo entraba en su interior, sabía bien que era, pero jamás quiso eso. Jamás.

Su respiración era irregular, sus quejas y súplicas porque se detenga eran como susurros en vano, su cuerpo no respondía.

Noah, su novio, lo estaba abusando sexualmente, lo estaba usando, violando, habían miles de palabras para lo que estaba haciendo pero no recordaba ninguna al estar perdido sin poder hacer nada en su defensa.

Esa noche dejo de ser "virgen", dejo de ver a su pareja de la misma forma y se sintió tan sucio que ni litros de desinfectante lo harían volver a sentirse como antes. "

Oh Dios, recordar eso lo hacía sentir igual, querer llorar sin poder hacerlo, querer huir de las manos de ese chico.

Pero no podía hacer nada por si mismo.

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