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Después de la muerte del rey del pueblo de la rosa, la reina paso a tener todo el control, ordenó cerrar las puertas del reino y mando a expulsar a todo aquel que no cuente con magia.

La princesa estaba en contra, pero ninguna de sus palabras fueron escuchadas. La misma no solo había desterrado a aquellos sin magia, también volvió a casarse y tuvo un joven heredero.

La princesa huyó del reino, la única mujer que compartía la verdadera sangre real, se oculto entre la oscuridad del bosque y lucho contra los sacerdotes restantes, a lo largo de los años fue haciéndose una mujer guerrera.

La misma reunió un equipo, un ejército de guerreros asesinos de todo aquel que atente por sus vidas, en aquel ejército se encontraba un mago, el mismo registro todo hechizo que aprendía de su líder, mentora y futura esposa

El necronomicon fue creado, solo aquellos con la magia necesaria podían usarlo, un libro de artes oscuras.

¿Por qué cuento esto?

Eso es fácil de responder.

A través de los años, la magia real se fue perdiendo, hasta el último linaje.

Para los aldeanos del reino del esté, un ladrón y monstruo, para el reino del centro del bosque, un rey perdido.

La familia Renrink fue por mucho tiempo un apellido que solo represento un ejército guerrero, sin saber que sangre noble corría por sus venas.

Mortem era joven y su presencia de magia no era muy activa en ese entonces, Reaper era quien controlaba mejor su magia, pero aún no sabía manifestar todo su poder.

Sin embargo, ambos aún poseían magia real y al controlar sus poderes por completo les darían un libre uso de la misma. No entremos en detalles.

Mortem comparte ciertas cosas con su hermano, puede ver almas, puede manifestar fuego y puede hablar con los muertos, ambos niños con un tipo de magia igual.

No hay que dejar de lado que ninguno de los aldeanos del pueblo del centro reconoció a Reaper, apesar de que se parecía al difunto Rey, esto se debe a que la reina sabía acerca de la atracción sexual de su marido y lo odiaba.

Obligo a todos a callar cualquier cosa sobre el rey y al saber que su hija escapó le resto importancia después de todo no es como si realmente le importase su hija, solo estaba ahí por el poder de reina.

Años de generaciones, años de nueva magia, finalmente el linaje había realizado lo que alguna vez el Rey Tod deseó. Reaper había enamorado al príncipe del Este, lamentablemente ahora debía actuar como un desconocido.

Tod se había enamorado, en aquel entonces era una blasfemia, pero no podían culpar a alguien solo por amar, ahora las cosas habían cambiado, ya era algo normal, al menos es ese momento, pero una vez más, el mago y el rey no podían amarse, antes por un pensamiento, ahora, por una espada en manos equivocadas.

¿Algo podría cambiar?

No es seguro, pues como lo menciono Fresh una vez....

"Aquel que no conozca su historia, estará condenado a repetirla"

Solo un plebeyo...  {Afterdeath}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora