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Capítulo 45
•Declaración de guerra•

Al otro día Jesús hablaba con ese maldito tipo que no importaba que hiciéramos igualmente quería hecharnos, Maggie golpeó con sus nudillos la puerta para poder entrar.

-¿Gregory?- lo llamó Maggie y Sasha abrió la puerta
-le estaba diciendo a la Sra. Caitlinque trajera algunas de sus conservas de ruibarbo para ustedes es nuestra forma de agradecerles por la ayuda de anoche- nos dijo
-es Sra. Maitlín- le corrigió Jesús
-pueden llevárselas cuando se vayan y deberían irse ya, porque los Salvadores podrían volver en cualquier momento- continuó diciendo y Sasha nos miro molesta
-yo me iré- dijo ella
-Sasha...- le decía Maggie intentando detenerla
-pero deja que se quede ella y estaremos a mano por lo de anoche- agregó
-no hay trato, pero ha sido encantador tenerlas por aquí- decía
-solo dime cómo podemos hacerlo funcionar- pidió ella
-creo que tenemos que...reunirnos en privado para explorar...- le decía con una mirada asquerosa
-que imbecil- le insulte
-vete al diablo- le dijo Maggie molesta
-¿de verdad estás insinuando...?, no, ¿saben qué?, lo siento, le diré a la Sra. Caitlin que guarde sus conservas- nos dijo
-podrias decirle a la señora Caitlin que se meta sus conservas por...- fui interrumpida ya que escuchamos ruidos y vimos por la ventana a una gran camioneta entrar con miles de esos imbéciles de los salvadores
-¿saben lo que harán si las encuentran aquí?Jesus, mételas en el clóset- ordenó empujandonos
-Gregory...-  le dijo Sasha
-métanse ahí ahora y no se muevan ni hablen y tal vez salgan de esta con vida- no dijo

Jesús nos llevó a la habitación de Gregory y nos metimos en su armario escondiéndonos de por lo que escuche era Simón la mano derecha de Negan, puse mi mano sobre el hombro de Maggie dando una caricia para que se calmara, estuvimos un buen tiempo encerradas allí hasta que Jesús nos abrió la puerta y salimos del pequeño lugar.

-¡te dije que las escondieras en el clóset del pasillo!- lo regaño Gregory
-no, dijiste "clóset"- se defendió Jesús
-esta es mi recámara, ¿qué si hubieran entrado aquí antes de que yo...?- preguntó sin terminar
-¿antes de que nos entregaras?, te habrían matado a ti primero- le dijo Maggie
-cariño, estoy hablando con Jesus- le dijo Gregory
-detente- le pidió Jesús
-¿por qué sigues defendiéndola?, estamos aquí ahora mismo porque ella y Rich no se encargaron de las cosas como dijeron que lo harían- decía él
-los Salvadores trataron de matarte- le recordó Jesús
-fue un malentendido y tan pronto como se vayan los Salvadores, las sacamos a ellas de aquí antes de que algo verdaderamente malo pase- dijo
-ellas se quedan, ¿o quieres hacerlo público?¿quieres hacer el trato con Alexandria público?¿y perder la negación plausible?¿perder tu posición?- le amenazaba Jesús
-¿así que vas a estar a cargo ahora?- le preguntó de vuelta
-no es solo que tú no lo estarás, Maggie, Sheila y Sasha se quedan y yo me quedo, todos vamos a ser como una gran familia disfuncional- respondió
-entonces lo seremos y veré que lo superemos, hice progresos con ellos hoy, lo viste- le dijo Gregory
-eso no es lo que vi- dijo Jesús
-¿sii?, bueno, eso es lo que pasó nosotros jugamos bien y ellos también, ¿ves, querida?, los Salvadores de hecho pueden ser bastante razonables- apenas termino de hablar cuando Maggie le dio un puñetazo en la cara y le quitó de un bolsillo interno de su chaqueta el reloj de Glenn -es un muy buen reloj, no debería ser dejado afuera en la lluvia- dijo tocando su mejilla
-este es ahora nuestro hogar así que aprenderás comenzando a llamarme por mi nombre no Marsha, no "querida", ni "cariño", Maggie- le exigió -Maggie Rhee- aclaró

Sin Gregory veíamos por la ventana de su oficina como se marchaban los salvadores cerrando el portón, me di cuenta que Maggie tenia la misma rabia que yo llevaba por dentro y que ella y Sasha estarían bien aquí.

-cuando llegué aquí, Gregory ya estaba al mando, pensé que la gente lo escogió por una razón viéndolo ahora, creo que solo sucedió, no me gustaba cómo hacía las cosas, pero no podía imaginarme a nadie más en su lugar, ahora sí puedo- dijo mirando a Maggie
-¿quién?- preguntó ella
-ya lo hablaremos en algún momento, debería haber hablado con Gregory antes, lo siento con suerte, me dejarás que se los recompense- decía disculpandose
-lo haremos- aseguró Maggie -los portones están cerrados- mencionó al querer salir
-espera, aún están afuera cargando- le dijo Jesús
-te veré en el remolque- le dijo a Sasha
-te acompaño- le dije

𝑱𝒖𝒔𝒕 𝒕𝒉𝒆 𝒕𝒘𝒐 𝒐𝒇 𝒖𝒔 |Daryl Dixon|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora