Mi segundo primer amor ☆ Haobin

「68」

1 de Febrero de 2024

Hao caminó hacia el hotel viendo a Hanbin parado a lo lejos fuera de este, se extrañó por ello y rápidamente fue a su encuentro.

—¿Qué haces aquí? —dijo viendo como el pelinegro le devolvía la mirada —hace frío

—Te estaba esperando —una sonrisa ladeada se dibujó en su rostro —¿cómo te fue?

—Fue más fácil de lo que pensé... —suspiró profundamente —resulta que Heeseung ya sabía

—¿Sabía...?, ¿qué es lo que sabía?

—Lo que sentía y... bueno... lo que sentía por ti —bajó la mirada jugando con sus dedos por los nervios

—¿Por mí? —alzó las cejas sorprendido y poco después una sonrisa salió por sus comisuras

—Me gustas —elevó la mirada mirando directamente a sus ojos —no sé desde cuando me gustas, no sé en qué momento empecé a sentir algo, pero estoy seguro de que fue mucho antes de darnos besos —el pelinegro rió —Hee lo sabía, se había dado cuenta hace mucho pero al igual que yo... quiso tratar que lo nuestro funcione, pero yo ya no sentía lo mismo... —volvió a suspirar, un nudo en la garganta se le formó —gracias por ayudarme a buscarlo

—No te preocupes bonito, para eso están los amigos

—¿Ahora eres mi amigo? —rió

—¿Eso no decías tú?

—¿Para ti yo era algo más?

—Siempre fuiste algo más, Hao, tu eres especial —una sonrisa cálida iluminó al castaño

—Te amo, sabes —sus ojos brillaron —gracias por hacerme tan feliz

—Mi sueño era pasar el 14 de Febrero siendo tu novio, parece que si se va a cumplir

Hao rió acercándose al pelinegro depositándole un beso en los labios.

—Ah, no te dije, Heeseung había comprado dos entradas para el concierto de Taylor en Tokio, pero bueno, él no es tan fan como yo, así que me las regaló

—¡¿Las dos?!

—Sí —asentía con felicidad —es para el 10, eso significa que vamos a ir a Japón

—¡No puede ser!

—¡SI!

Hanbin abrazó a Hao cargándolo y dándole vueltas en círculos de la emoción. Poco después cuando lo soltó, le tomó de las mejillas y lo besó con tanto amor.

—¿Quieres ser mi novio?

—S-sí —unas pequeñas lágrimas de felicidad se escaparon de sus ojos —¡si quiero!

...

Regresaron al hotel tomados de las manos, Matthew los visualizó y saltó de la emoción acercándose a ellos.

—¿Son novios?

—Sí, Matt, ahora ya somos novios oficialmente —el mayor levantó al aire sus manos entrelazadas

—¡Por fin! —Taerae se levantó soltando un gran suspiro —vieron que no era tan difícil

—Cállate —respondió Hao de forma divertida

Después de un rato, ambos chicos subieron a su habitación. Ya era hora de partir a Seúl de nuevo, pero ellos no quería dejar el lugar, ahora sentían nostalgia.

—En la casa también vamos a dormir abrazados —mencionó Hanbin tratando de cambiar el semblante de su novio

—Lo sé, pero... aún no probamos la tina que está en el baño, siempre quise meterme a una de ellas

—¿Y qué estamos esperando?, ven —extendió su mano para que el menor lo siguiera al baño

Luego de quitarse la ropa, se sumergieron en el agua caliente, cada uno en diferentes extremos.

—¿Cómo se siente?

—Increíble —Hao estaba tan feliz dentro —deberíamos comprar una tina para la casa también

—Eso será después de ver a Taylor

—Bueno —rió —¿cuántos días vamos a quedarnos en Japón?

—Te diría que para siempre, pero las clases inician en Marzo, así que no podemos

—Pero podríamos quedarnos todo el mes y celebramos San Valentin ahí

—También podríamos ver las flores de cerezo apenas caiga la primavera

—Piensas igual que yo —salpicó agua al aplaudir de emoción haciendo que un poco le cayera al ojo de Hanbin —

—Ay... dios —se cubrió los ojos quejándose por el picor ya que el agua tenía un poco de jabón

—¡Oh!, lo siento mucho —se acercó a él preocupado y el mayor aprovechó para robarle un beso

—¿Estabas fingiendo? —preguntó apenas se separó de él

—Tal vez —sonrió ladino

Rodeó al castaño de la cintura jalándolo hacia sí mismo haciendo que se sentara en su regazo. El agua se contraía de un lado al otro con los movimientos suaves de Hao al mover sus caderas sobre su novio.

—Si te pido que te cases conmigo, ¿aceptarías? —preguntó el pelinegro en un susurro y con la voz agitada

—¿Qué pregunta es esa? —sonrió acercándose al cuello del contrario y lo succionó

—Ngh... —gimió —¿no aceptarías?

—¿Me lo vas a pedir ahora? —respondió de forma burlona —¿vas a sacar un anillo del agua?

—Sí —rió bromeando

—Entonces sí —sonreía dándole un beso introduciendo su lengua dentro de su boca y jugueteando con ella

Ambos cuerpos se empezaron a calentar, se estaban frotando entre sí y Hao tomó el miembro de su novio entre sus manos masturbando una y otra vez hasta terminar de colocarlo en su entrada.

—Ah... mgh... —cerró los ojos con fuerza —Hanbin... me gustas... —dijo al mirarlo a los ojos y después lo besó aferrándose a su cuello mientras subía y bajaba sus caderas lentamente

—Te ves tan sexy así...

—¿Tu crees? —rió y siguió gimiendo, aquello entraba muy profundo cuando se movía tan despacio —se siente muy bien... mgh...

—Ha... Hao... —la vista que tenía era hermosa. Acariciaba cada parte del castaño y besaba su cuerpo por todo su torso, a veces mordiendo, otras veces succionando dejando pequeñas marcas que desaparecerían en par de días —te amo, mi amor

—Te amo —besaba sus labios dejando mordiscos también en ellos

El amor que se tenían era transmitido en ese acto de amor. Se tocaban, mordían y besaban repitiéndose mutuamente que se querían.

Se amaban tanto que sentían que sus corazones iban a explotar. En sus estómagos volaban mariposas y sus cuerpos temblaron al sentir que se iban a venir.

Finalmente llegaron juntos al orgasmo volviéndose a besar y acariciar. Terminaron de bañarse y volvieron a la cama para dormir por última vez en aquel hotel antes de volver a Seúl.