Capítulo 26: "El apuesto Joker"

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 Sólo tenía ojos para él. 

Estaba tan sexy que vi como las miradas de todas las mujeres y algunos hombres se posaban en él, incluida la mía. Iba con un traje de etiqueta azul marino que resaltaba su figura a más no poder y en su rostro había una diferencia brutal por que iba SIN MAQUILLAJE.

Su cara era tan bonita que no pude apartar la vista ni aunque lo intentase. Sus ojos negros destacaban de su pálida y aterciopelada piel blanca que escondía detrás del maquillaje. Tenía un aire juvenil con aquellos rizos rubios que le caían alrededor de los hombros, parecía un joven de veinte años en busca de aventuras. Sus cicatrices se hacían notar alrededor de su cara, muy pronunciadas que, aunque daban pánico, a mi me resultaban muy sensuales... Soy muy rara para estas cosas.

Dejé de recorrerlo con la mirada y observé que llevaba una pistola en la mano. "¡PUM PUM PUM!", el Joker dio tres disparos al techo del ascensor con otros ayudantes vestidos de la misma forma que en el robo que presencié hace ya una semana... Los días se me pasan volando.

-¡Hemos llegado!- Exclamó el jefe de la cuadrilla, Joker.

"PUM", disparó otro tiro al aire antes de salir del ascensor.

-Buenas noches damas y caballeros.- "La ironía era lo suyo desde luego" pensé mientras que la gente se echaba lentamente atrás, aunque vi a alguna mujer que otra oponiéndose. Yo disimulé lo mejor que pude y me fui al mismo tiempo hacia atrás.- Venimos a amenizar la velada.- Cogió un aperitivo de gambas y se lo comió mientras seguía hablando.- Sólo tengo una pregunta, ¿Donde esta Harvey Dent?- Siguió masticando con la boca abierta y se dirigió a una fila de personas que había a su alrededor. Apuntó con la pistola a una mujer que no parecía muy asustada, si no ruborizada por el aspecto de su atacante, y le quito la copa de champán. Tiro la mitad de la bebida al suelo y la otra se la bebió. Después fue hacia la otra fila donde me encontraba yo y fue preguntado persona por persona sin saltarse ninguna.- ¿Sabes donde está Harvey?, ¿Sabes quién es?, ¿Donde esta Harvey?.- Y en mitad de la fila, se encontró conmigo.

Un gran rubor en sus mejillas le delataron solamente al contemplarme. Su vista me recorrió de la cabeza a los pies hasta clavarme sus ojos en los míos. Mis mejillas se tiñeron de rojo y una sonrisa pícara de medio lado apareció en mi rostro. Se le notaba nervioso y parecía que no encontraba las palabras adecuadas durante unos instantes que se me hicieron eternos, hasta que al fin decidió hablar.

-Desde luego que tu no sabes donde esta Harvey guapa.-  Su voz tenía cierto aire seductor que me hizo delirar unos segundos. Después le costó apartar la mirada de mi al igual que yo de él, pero al final, siguió con el resto de la fila.- ¿Sabes donde esta Harvey?, tengo que contarle algo, una cosilla.- Al ver que el sujeto no respondía, le sujetó la cabeza y, mientras la movía de lado a lado, dijo.- No.

Se dirigió hasta una especie de camarero que sostenía una bandeja con comida.- Bueno, me conformaré con sus allegados.

Y, por fin, una víctima le respondió.

-No nos dan miedo los matones.- En su voz había un cierto tono amenazador.

-¿Sabes? Me recuerda a mi padre.- Vi como sacaba la navaja del bolsillo y yo sólo podía pensar "¡que no lo haga, por Dios, que no lo haga!", le cogió del pescuezo cuando terminó de comer y le metió la navaja en la boca.- ¡Odiaba a mi padre!.

Estaba apunto de reaccionar, hasta que una mujer se adelantó y, con gran valentía le plantó cara.

-¡Basta ya!.- Exclamó mientras vi en el fondo de sus ojos el pánico que ocultaba. "Pobrecita, supongo que será la novia de Harvey" deduje fácilmente. Ese coraje solo podría tenerlo alguien que estaba implicada con la víctima. 

El Joker sonrió notablemente y soltó al tipo que tenía amenazando. Al fin obtuvo lo que quería, alguien que podría saber donde estaba Harvey Dent.

-Hooooola preciosa.- Puede que suene estúpido, pero cuando dijo eso, un atisbo de celos se me produjo en mi interior, aún sabiendo que sólo estaba intimidando a su víctima. Se acercó a ella sigilosamente mientras la miraba con gran satisfacción.- Tu debes de ser la amiguita de Harvey.- Siguió acercándose hasta que la miró a los ojos y noté como la chica se ruborizaba al admirar su rostro sin ningún rastro de maquillaje. Nadie se imaginaba que fuera tan bello como ahora sin su "pintura de guerra".-Y eres preciosa.- La empezó a rodear lentamente y recortó la distancia que había entre ellos. La mujer soltó un suspiro al verlo tan cerca de ella y noté que el rubor seguía aumentando en su rostro.-Te veo nerviosa... ¿Es por las cicatrices?.- Con la navaja señaló la única imperfección que tenía en su cara, y la chica se ruborizó aún más si cabía. Al parecer, no era la única que le parecían sensuales.- ¿Quieres saber como me las hice?.- Le siguió mirando completamente hipnotizada y él le dijo.- Ven.

Ella dio los pasos justos para que él la pudiera sujetar por la cabeza fácilmente y le pusiera la navaja en la boca. Me puse en su lugar y pensé "ha hecho mal en obedecer a su orden, pero, en su lugar, yo tampoco podría decir que no."-Estaba casado, era muy guapa, como tú... Me decía que me preocupaba demasiado, que tenía que sonreír más... A ella le gustaba el juego y se endeudó con quién NO DEBÍA... Un día le rajaron la cara, no podíamos pagar su cirugía, ella no aguantaba más... Yo quería volver a verla sonreír, quería que supiera que no me importaban sus cicatrices, así que me metí una cuchilla en la boca... Y me hice esto yo sólo.- Señaló las cicatrices dirigiéndole una mirada muy seductora.- ¿Y sabes qué? ¡Ella no podía ni mirarme! Me dejó...- Lo dijo con fingida tristeza que parecía muy real.- Ahora le veo la gracia... ¡Estoy siempre sonriendo!.- Ella cogió fuerzas para no dejarse encandilar por él y, cuando por fin consiguió apartar su mirada de sus hipnóticos ojos negros, le dio un rodillazo en la entrepierna.

Empezaron a reírse él y muchos delincuentes disfrazados de su grupo al unísono. En un momento dado, Joker me dirigió la mirada y lo decía todo. Sólo tenía ojos para mí, ninguna mujer estaba a mi altura. Yo me sonrojé y no se bien por que, le guiñé un ojo mientras le miraba sin disimular. Creo que le gustó demasiado que le hubiera guiñado el ojo por que perdió el control de la situación y no pudo volver a aferrar a su presa de nuevo, así que volvió a la intimidación verbal.- Tienes coraje, así me gusta.

Y una voz robótica apareció de la nada y dijo.

-Entonces yo te voy a encantar.



Me vuelves loca. (Joker)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora