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Donghyuck no podía evitar apartar la mirada de la película para observar a Mark. Aunque intentaba disimularlo, sentía una curiosidad incontrolable por saber qué pensaba su amigo en ese momento.

Mientras tanto, Ten notó la distracción de Haechan y le susurró suavemente: — Deja de mirarlo tanto, te estás perdiendo la película.

Haechan suspiró, sintiéndose atrapado entre la incomodidad y la curiosidad. ¿Por qué le costaba tanto apartar la mirada de Mark?

Ten percibió la confusión de Haechan y le susurró de nuevo: — ¿Te gusta mucho, no es así?

El rostro de Haechan se coloreó ligeramente de rojo, aliviado de que los demás miembros estuvieran demasiado absortos en la película o dormidos para darse cuenta de su turbación.

— ¿Qué quieres decir? —preguntó Haechan, confundido por la insinuación de Ten.

— He visto cómo te mira —respondió Ten en voz baja, haciendo que Haechan se ruborizara aún más, incapaz de entender completamente lo que su amigo quería decir. Haechan se sintió atrapado entre la sorpresa y la confusión ante las palabras de Ten. ¿Cómo podría Ten haber notado algo que ni siquiera él mismo entendía por completo?

— ¿Cómo me mira? —preguntó Haechan en un susurro apenas audible, tratando de mantener su voz tranquila a pesar de la turbulencia de emociones que sentía en su interior.

Ten le lanzó una mirada significativa antes de responder con calma: — Como si fueras lo más importante para él. Como si... como si... —titubeó un momento, buscando las palabras adecuadas—, como si estuviera buscando algo más que solo amistad.

El corazón de Haechan dio un vuelco ante las palabras de Ten. ¿Acaso Mark sentía algo más por él? La idea le parecía tan inverosímil como emocionante, pero a la vez, aterradora. ¿Y si arruinaba su amistad al confrontarlo con sus sentimientos?

— No lo sé... —murmuró Haechan, incapaz de articular sus pensamientos en palabras coherentes.

Ten le ofreció una sonrisa comprensiva y le dio un suave apretón en el hombro. — No te preocupes tanto por eso ahora. Solo disfruta el momento y la película. Si realmente sientes algo por él, el tiempo lo revelará por sí mismo.

Haechan asintió, agradecido por el apoyo de Ten, pero su mente seguía dando vueltas en torno a la posibilidad de que sus sentimientos por Mark fueran correspondidos. Sin embargo, por el momento, decidió seguir el consejo de Ten y tratar de disfrutar la noche de películas, aunque una parte de él no podía dejar de preguntarse qué pasaría.

Después de los créditos de la película, Taeyong se despertó con un ligero sobresalto, sintiendo una sensación incómoda en el cuello por haberse quedado dormido en una posición incómoda. Al abrir los ojos, notó que Jaehyung estaba junto a él, sacándole fotos con la cámara del teléfono mientras la baba se deslizaba por la comisura de su boca.

— ¡Ey, Jaehyung, para ya con las fotos! —exclamó Taeyong, frotándose los ojos para despejarse del sueño y tratando de limpiarse la baba con la manga de la camiseta.

Jaehyung soltó una risita traviesa, pero obedeció y guardó el teléfono. — Lo siento, Tae. No pude resistir la oportunidad de inmortalizar este momento tan... encantador —bromeó, señalando la baba con una sonrisa.

Taeyong rodó los ojos con diversión y se estiró perezosamente. — Bueno, ya es hora de dormir. Se nos ha hecho tarde y mañana tenemos un día ocupado. —Se levantó del sofá, estirándose para desentumecer los músculos.

Los demás miembros comenzaron a despertarse lentamente, bostezando y estirándose como gatos perezosos. Se pusieron de pie, comentando sobre la película y bromeando entre ellos mientras se dirigían a sus respectivas habitaciones para descansar.

Después de la noche de películas, Haechan se retiró a su dormitorio, sintiendo que la conversación con Ten aún resonaba en su mente. Al buscar con la mirada a Mark, se encontró con los ojos del mayor fijos en los suyos. Un rubor intenso inundó sus mejillas al sentir la intensidad de esa mirada.

— Buenas noches, Mark —dijo Haechan, tratando de mantener la calma a pesar de la turbulencia de emociones que sentía en su interior.

Mark le devolvió la mirada con gentileza, y Haechan pudo notar una chispa de complicidad en sus ojos. — Igualmente —respondió el mayor con voz suave y reconfortante.

Haechan se deslizó bajo las sábanas, con el corazón latiendo con fuerza en su pecho. Aunque se sentía nervioso por lo sucedido, también se sentía reconfortado por la presencia de Mark.

Con una sonrisa tímida en los labios, Haechan cerró los ojos y se dejó llevar por el sueño, sintiéndose agradecido por tener a Mark como amigo.

Asustado - Markhyuck [NCT] (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora