SPECTRE 08 [Din Djarin x OC]

012

Cuando Adhara bajó del Razor Crest, el olor a soldaduras y combustible la invadieron totalmente. La bahía de atraco era más grande de lo que parecía desde la nave, la chica confirmó que se trataba de una ex imperial al encontrar los viaductos de ventilación en los puntos en que normalmente se encontraban.

Siempre buscando un escape.

Eso lo había aprendido de su hermano.

Tan concentrada estaba escaneando el lugar, que no notó a quienes estaban observándola a ella.

—La tenías muy bien guardada, Mando —la voz risueña pero gruesa de un humano la hizo voltear a la mesa de control que había en el centro de la bahía. La chica enarcó una ceja, acelerando el paso y colocándose a un lado del Mandaloriano. Miró al viejo de arriba abajo, imitando su descaro.

—Es bonita, ¿No creen? —Adhara volteó hacia una twi'lek de piel pálida, casi lila. Sus ojos la miraban con cierto desafío, una espolvoreada de diversión en su brillo. Casi como un lothcat observa a su próxima cena.

—Pequeña —habló un devaroriano de piel roja, veneno, desdén y burla en el adjetivo. Adhara volteó hacia el gigante por tan sólo un segundo.

Miró el perfil del Mandaloriano, cruzando sus brazos —¿Un devaroriano, en serio? ¿Tienen a un gugan guardado en alguna parte, también?

El alien gruñó, la twi'lek rió con un siseo. Mando se cruzó de brazos.

—No creía que eras del tipo de trabajar en equipo, Mando —dijo otro humano, sin quitar la mirada de Adhara—. Soy Mayfeld.

—Ex—Stormtrooper —dijo el Mandaloriano volteando su visor hacia la chica, ella no pudo contener una pequeña risa que surgió desde su estómago ante la implicancia del tono de su compañero.

—Francotirador —corrigió Mayfield, molesto.

—Eso no me dice mucho —sonrió sarcástica Adhara.

El viejo volvió a reír, logrando que las nuevas protestas de Mayfeld se acallaran — Ustedes sí que combinan —Adhara bufó ante el comentario del viejo, quien sin dejar de dirigirse al Mandaloriano preguntó:—. ¿Tiene nombre?

—Su nombre no es importante —Sonrió Adhara, respondiendo por sí misma.

—De alguna forma vamos a tener que llamarte, cariño —dijo Mayfeld.

—Llámame Ghost —ofreció ella, encogiéndose de hombros.

El viejo aplaudió una sola y seca vez —Justo lo que necesitamos.

—Ghost pilotará la Crest, ese es el trato —Dijo el Mandaloriano.

—Hey, no hay quejas de mi parte —dijo Mayfeld.

—Así que —intervino Adhara—. ¿Me dirán qué es lo que hay que hacer o esperarán a que lo adivine?