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30k lecturas, nunca imaginé todo lo que este libro les gustaría.
Como agradecimiento les dejare unos datos curiosos del libro en el final.
Ahora si, ¡disfruten!.

Las semana pasó rápido y fue ligera gracias a que al ser la primera de clases, no hubo mucho trabajo. Melanie, Jared y yo salíamos de vez en cuando. La coach avisó que regresaríamos a los ensayos en una semana, también dijo que habrían castings para las chicas de nuevo ingreso.

Con papá seguía hablando, me daba miedo lo cerca que estaba de volverlo a ver.

Mamá regresó al trabajo, y...

Con Pablo, seguíamos hablando; me contaba lo bien que le estaba yendo en los entrenamientos y que pronto empezarían las reclutaciones a equipos, estaba nervioso por ello pero estaba segura de que lo lograría.

Me dijo que había un equipo que el admiraba mucho, reclutando jugadores.

Lo notaba muy emocionado, Pablo de verdad soñaba con dedicarse a eso.

Estaba con Melanie y Jared en mi casa viendo películas. Mamá trabajaría hasta tarde y era una forma muy agradable de pasar el rato, por fin era viernes.

El clima estaba algo fresco, así que era muy apetecible quedarse en casa.

Mel y yo, estábamos acurrucadas con una mantita en uno de los sofás, mientras Jared descansaba en el otro.

Me estaban obligando a ver crepúsculo—la película más penosa según yo—que para ellos, era una obra de arte.

La escena era cuando la protagonista está en la cafetería con sus amigos y conoce al protagonista.

—Que ridiculez—refunfuñé llevándome una palomita a la boca.

Mis amigos me fulminaron con la mirada en cuanto me escucharon.

—Esta es la mejor escena—dijo Jared ofendido.

—Es un asco—hice una mueca de desagrado.

—¿Cómo se atreve?—dijo Mel, llevándose una mano al pecho dramáticamente.

—Perdónala dios—Jared dijo mirando al techo negando con la cabeza.

—Retráctate mujer—Melanie me apuntaba con su dedo mientras entrecerraba los ojos.

Me reí de ambos.

—Perdón por decir la verdad—dije divertida y después me encogí de hombros.

—Te perdonamos...—empezó Jared como si se le hubiera ocurrido la mejor idea del mundo—si hacemos pijamada.

Ambos me miraron con una sonrisa esperando por una respuesta.

Suspiré con pesadez, obviamente quería que se quedaran pero me gustaba crear drama.

—Bien.

Mis amigos chillaron felices, y continuamos con la película. Nos acomodamos en mi habitación, Mel y yo dormiríamos en mi cama, y Jared... en un colchón inflable.

Claro que se quejó.

Pero, no cabríamos los tres en mi cama.

Un verano con mi enemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora