𝑪𝒖𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒏𝒂𝒅𝒊𝒆 𝒗𝒆

73 7 7
                                    

CAPÍTULO 14

NOBARA POV

17 de Abril de 2022

𝙎𝙤ñ𝙚 𝙪𝙣 𝙫𝙚𝙧𝙖𝙣𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙨𝙚 𝙝𝙞𝙘𝙞𝙚𝙧𝙖 𝙚𝙩𝙚𝙧𝙣𝙤

𝘿𝙚𝙨𝙙𝙚 𝙚𝙡 𝙢𝙤𝙢𝙚𝙣𝙩𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙫𝙞 𝙩𝙪 𝙢𝙞𝙧𝙖𝙙𝙖

𝙈𝙚 𝙙𝙚𝙧𝙧𝙚𝙩𝙞𝙨𝙩𝙚 𝙘𝙤𝙣 𝙚𝙨𝙖 𝙢𝙞𝙧𝙖𝙙𝙖

𝙋𝙚𝙧𝙤 𝙚𝙡 𝙫𝙚𝙧𝙖𝙣𝙤 𝙨𝙚 𝙫𝙤𝙡𝙫𝙞𝙤 𝙪𝙣 𝙞𝙣𝙫𝙞𝙚𝙧𝙣𝙤

𝘾𝙪𝙖𝙣𝙙𝙤 𝙫𝙞 𝙦𝙪𝙚 𝙤𝙩𝙧𝙤𝙨 𝙗𝙧𝙖𝙯𝙤𝙨 𝙩𝙚 𝙚𝙨𝙥𝙚𝙧𝙖𝙗𝙖𝙣

El día 4 de Abril

Era la clase de Metodología de la Investigación. La Maestra asignó la tarea extensa, dimos gracias que omitió el punto 2.3.

—¿El punto 2.3 también debemos resolverlo?— dijo un idiota, imbécil, infeliz, pobre diablo Nerd de quinta.

Todos volteamos a ver al perpetrador de nuestra semana, y quizás de nuestros próximos cinco fines de semana. Ese inútil que con su bocotá había aumentado la tarea de esta anciana decrépita.

Las voces de mis compañeros se apagaron; la primera vez que volví a ver a Yuji Itadori, él estaba sentado al otro lado del Salón de clases de la última clase de ese día 4 de Abril. Lo note mínimamente más flaco que cuando estuvo en mi casa, había puntos estelares en su mandíbula, que destilaban por su cuello, mundanamente se conocen como lunares, pero yo les llamaba constelaciones. Su simple presencia me provocó una arritmia cardiaca y un paro respiratorio por su sempiterna hermosura física como su personalidad.

Bajo su brazo algo apenado, pero sin temor a ser juzgado. El, no era un nerd, seguramente no tenía un gran IQ, pero eso no me importaba. Yuji no necesitaba destacar con ese lindo cabello rosa palo, ya me había hecho caer una vez. Y el uniforme le sentaba de maravilla. 

Yuji, era ese chico que se ponía feliz cuando el cielo estaba de colores.

Se me formó un pozo en el estómago porque la chica rubia a mi lado comenzó a agitarme, entonces fui capaz de regresar a la realidad. Perdí de vista a Yuji un segundo nada más y cuando regresé a ver su escritorio estaba vacío.

Después vivimos un episodio extraño donde el me dio un elote a medio morder, lo comí igual, porque fue Yuji quien me lo regalo. Creo que nos besamos indirectamente.

Hace tres meses que Inumaki y yo terminamos, él sufrió una Denuncia de parte del Ministerio de Telecomunicaciones de Tokio por haber filtrado aquel video en horario familiar. La multa ascendía a los diez millones de dólares, ya que los niños nunca iban a olvidar las traumantes imágenes. Kirara Hoshi, perdió su canal de YouTube, Twitch, su Perfil en Tiktok, Instagram y Facebook, fue una catástrofe y lo sigue siendo. Mi hermano aparentaba no estar afectado pero sabía que si lo había dañado un poco.

Un día estábamos en mi casa

—Jin me dio un apartamento en Kyoto.— ella dijo acomodando los anteojos mientras pasaba su pagina de lectura en la Tablet

—¿De verdad? ¡Eso es fantástico! ¿Me darás un Tour?— emocionada di saltitos tomando su brazo.

Después de la muerte de toda su familia me alegraba que haya sido acogida por una familia tan buena como era los Itadori. Y también me encantaba que le dieran la libertad de seguir con su vida.

—De hecho iba a pedirte que te mudaras conmigo. Estas por cumplir 18 ¿No es un buen regalo de cumpleaños?— mencionó acercando su mano hacia la mía

—Si claro, eso no esta en mis planes.— enlace mis dedos con los suyos

—Siempre te contienes por tu hermanito.— dijo sarcástica zafando su mano de la mía

—¿Contener? No. Pero no pienso dejarlo solo, esta casa es demasiado grande para él. Además, pensé que te irías a la Universidad el año que viene.— ladee mi cabeza confundida

—Así era, pero yo creí que podía convencerte para que fueras a vivir conmigo después saldríamos de aquí y terminarías tu educación en el extranjero mientras yo voy a la Universidad.— frunció sus labios

—Suena un buen plan, pero acabo de regresar. No tengo planes de dejar el País.— aclare

—Me arrepiento de no haber ido contigo, y también me arrepiento de no haberte detenido aquel día que te fuiste. Quizás ahora ya tendría tu corazón en mis manos. -- ella ¿bromeo?

Maki Zennin, era una chica alta de estatura y estatus, elegancia, glamour, era fantástica en los deportes, amigable e imponente delante de los Profesores, destacaba en todos los aspectos. Los hombres la deseaban y las chicas la envidiaban. Era mi amiga desde toda la vida, nosotras solíamos tomarnos de la mano para cruzar la calle, pasábamos las tardes en mi habitación chismeando sobre las demás personas y nos burlábamos de ellas. Maki incluso me dejaba maquillarla y dormir con ella. No había secretos entre nosotras, confiaba ciegamente en ella.

Maki Zennin era perfecta ante mis ojos, pero solo tenía un defecto: era mujer.

—Es broma, es broma, tu y yo más que amigas, no, eso es estúpido. Bromeo.— ella aclaro su garganta

—Si, quizás en otra vida seas hombre entonces si.— palmee su cabeza con mi mano

—Has estado algo rara estas últimas semanas.— cambio de tema nada contenta

—Me gusta alguien, pero el no me ha hablado.— suspire

—¿Quien? ¿Lo conozco? ¿Cómo se llama el imbécil ese?— apago su Tablet inclinando su cara sobre la mía

—Es el chico nuevo del Instituto, su nombre es Yuji Itadori, ese es el chico que me gusta.— dije golpeando su frente con la mía

—Yuji Itadori...— pronunció su nombre con algo de recelo —Creo que no es buena idea que te ilusiones tan rápido de alguien digo, acabas de terminar con Inumaki.—

—Si, pero ya pasaron tres meses.— le mire

—¿Vas a olvidar siete años en tres meses? ¡Ufff! ¡Yo no lo veo tan posible, así que mejor quédate sola! Ese es mi consejo.— tomo su mochila

—Creo que lo pensare, pero no se si lograre aceptarlo. Yuji es como los rayos del sol.— le conteste

—Nobara, no salgas con Yuji.— pidió triste

—No te preocupes, ni siquiera hablo con el.— contradije

—Prométeme que no saldrás con el.— ella puso esa mirada

Nunca le conté a Maki de mi acercamiento del primer tipo con Yuji. Hacerme prometer algo como eso era injusto, en ese instante pensé que tenía una oportunidad con el chico de cabello rosa así que crucé mis dedos a escondidas.

—Lo prometo.—

Le acompañe a la puerta, ahí nos abrazamos en despedida temporal. Minutos después entró mi hermano menor llorando a mares, confundida no sabía si abrazarlo o regañarlo.

—Bien, aquí estás en tu casita, yo te daré tu espacio.— Anya retrocedió cautelosamente

—¿A DONDE VAS ESTUPIDA? DESPÍDETE BIEN DE TU NOVIO ¿ACASO YA NO ME AMAS? ¡SI YA NO ME AMAS SOLO DILO!— exclamó desde el marco de la puerta limpiándose las lagrimas con el brazo

—Lo lamento, perdóname Conejito, no volverá a suceder.— le dio un beso en los labios

—¡MMM! ¡BIEN! ¡PONTE LA ESTÚPIDA PULSERA QUE TE COMPRE! ¡QUE TODOS SEPAN QUE TIENES DUEÑO Y QUE SOY YO!— le amarró la mencionada en la muñeca —¡AHORA LÁRGATE DE MI CASA ESTUPIDA ZORRA! ¡¡Y NUNCA VUELVAS!!— le tiró la puerta en la cara

El ando a zancadas ardiendo de enojo, no sabia que lo puso así. Trate de no hacer contacto visual con el pero no pude evitarlo.

—¿QUÉ MIERDA ESTÁS MIRANDO?— grito molesto pasando de mí a las escaleras

—Nada.— trague en seco y fui a abrir la puerta

ROSES ARE PINK |Itanoba|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora