"El daño del pasado, es la secuela del presente"
Dos personas llenas de un pasado que sin saberlo los une.
Un crimen en la ciudad los hará trabajar juntos, sin saber que esos mismos crimenes los une mas de lo esperado.
¿Podran matar a su pasado o su...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Dos disparos se escuchan.
Cubro mi boca con la mano evitando que un grito salga al ver los cuerpos de mis padres caer inertes en el suelo.
Siento las lagrimas rodar por mis mejillas y una piedra en mi garganta.
El hombre con el arma pasa entre los cuerpos sin vida de mis padres acercándose hasta el armario donde estoy escondida. Muerdo la palma de mi mano para no gritar, observo como levanta la mano llevandola a la manilla de la puerta del armario, cuando su palda gira la manilla un telefono suena.
Quita la mano de la manilla y por la rendijas del armario logro ver como saca el telefono del bolsillo del pantalón. Contesta el telefono y lo escucho susurrar unas palabras las cuales no entiendo y después de unos segundos cuelga el teléfono llenando la habitación de silencio.
Me sobresalto cuando empieza a reírse, mi piel se eriza al escuchar su risa, mi pecho arde por cada respiración que retengo.
— Sé que estás ahí.— Abro los ojos al escucharlo y apreto más la palma contra mis diente para no gritar cuando golpea la puerta.— Volveré para matarte tornado.— Un escalosfrio pasa por todo mi cuerpo al escucharlo decir el sobrenombre que me tenían mis padres.
Se da la vuelta pasando por los cuerpos y antes de verlo desaparecer lo unico que observo son unas sicatrices en sus manos y un tatuaje en la parte de atrás de su cuello.
Escucho sus pasos al bajar la escaleras, la puerta suena al ser abierta para después ser cerrada. Se escucha cuando prende el carro y las ruedas raspar el suelo al ponerlo en marcha.
Con manos temblorosas empujo la puerta del armario para que se abra, salgo lentamente con las piernas temblando hasta los cuerpos sin vida de mis padres. Me dejo caer al lado de mi madre, manchandome de su sangre, me abrazo a su cuerpo llorando.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
