Capítulo 25

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Mark Harrington.

Aprieto los puños contra el lava manos pensando en las palabras de Vega.

¿Gay?

¿Qué mierda?

¿Cree qué soy gay?

¿Y por qué me afecta tanto?

Niego mientras levanto la mirada hacía el espejo, observo mi rostro buscando algo, un detalle que le haya dado esa idea. Pero no sé que la haría pensar eso.

¿Quien es ese gran tipo?

¿Y por qué mierda sentía que me estaba ofreciendo a él?

Abro el grifo, coloco mis manos bajo el chorro y me mojo el rostro, trato de despejar todos esos pensamientos y tratar de averiguar quien es ese tipo, junto también del porqué esa niña le dice mamá.

Ver su cabello igual de rizado que el de Vega me dieron escalofrios.

Salgo del baño y me dirijo a la cocina, encontrando solo a Clark en ella. Está apoyado en la pared mientras observa su telefono y toma una cerveza.

Levanta la mirada, sonríe al verme.

— Te dije que nos volveríamos a ver Mark.— Termina la cerveza para después botarla.— No esperaba que en estás condiciones.— Guarda el telefono y se cruza de brazos.

Aprieto los dientes.

— ¿Encontraste a los otros dos?— Levanta la ceja curioso pero la sonrisa divertida no se le va, a este si le quiero partir la cara.— Jimmy dijo algo.— Sé rie, asiente.

— Ese viejo sabe mucho.— Dice cuando su risa se calma.— No dijeron nada.— Aguanto la respiración al escucharlo. Los tiene.— Mañana los van a encontrar, no te sorprendas mucho.— Me giña el ojo. La sangre me hierve al escucharlo hablar tan natural de eso, no lo piendo cuando me acerco a él, ladea la cabeza sin despegar la mirada y no se aleja cuando quedo a centimetros de su rostro.

— ¿Comó mierda puedes estar tan calmado después de lo que le hicieron?— Le digo escupiendole el rostro. No despegamos los ojos del otro.— Dejame a mi hablar con esa gente, verás como los hago cantar.— Se ríe, se malditamente rie en mi cara. Su risa para de repente y todo su rostro se transforma, su mirada se oscure y se vuelve peligrosa pero la sonrisa no abandona su rostro asesino.

— Mira niño, te aconsejo que des un paso atrás antes de que te meta un tiro entre las cejas.— Susurra de forma peligrosa pero no me muevo un pelo.— Y creeme que te digo que sé hacer hablar a gente y más gente que lastimó a Sandra. Nadie se mete con ella y salen vivos.— Su nariz se pega con la mía y evito las ganas de alejarme.— A mi no me amenaces Mark, no te conviene tenerme de enemigo. Y si te digo que voy a encontrar a las personas detrás de ella y te aseguro que las voy a matar tan lentamente que no querrán a verse metido alguna vez con ella.— Gruño, este sonrie más.

— ¿Me puedo unir si van a follar?— Me alejo como si me estuvieran quemando y vuelvo la vista al tipo enorme en la puerta, nos mira a cada uno con expreción divertida.

— No bateo para ese lado Clint.— Escucho a Clark a mis espaldas.— Ahora no sé Mark puede que tengas chance.— Niego buscando la compra de comida y empiezo a arreglarlo.— Bueno eso es lo que quiere Sandra.— Detengo mis movimientos al escucharlo.

— No me gustan tan rudos aunque no te niego que no se ve mala carne.— Un escalosfrio pasa por mi espalda a escucharlos reirse. Niego agarrando uno de los platos y coloco comida.— Ni te molestes grandote, está dormida.— Me sorprendo al escucharlo pero se vuelve rápidamente en enojo. Me volteo y camino hacía él.

Bebida, Lagrimas y Sangre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora