Sandra Vega.
¿Sabes esos momentos que marcan un antes y un después en tú vida?
Algunos resultan bueno, jodidamente excelentes.
Y otros, jodidamente horribles, sientes que caes en picada hasta un suelo frío.
Bueno.
Me estampé contra el suelo, todos mis organos explotaron y morí cuando apenas toqué el suelo.
Nada bonita la imagen.
De todas las cosas que pude haber creído que había en esta caja, por ninguna razón hubiera supuesto esto.
Levanto la pequeña nota, las letras están impresas pero lo que la hace todo menos minusculo esto, es lo que dice.
Volví por ti tornado.
Cuatro frases, las únicas que hasta ahora me han hecho temblar por dentro, me han hecho entender que todo pasa por algo y ese algo siempre tiene un maldito objetivo. En este caso yo me gané el premio.
Wuu.
Lo peor, o si hay peor. Es que cuando bajo la mirada al peluche que sé completamente con mucha seguridad es de Cassy, tiene un agujero de bala en el lado izquierdo del pecho.
Justo en el corazón.
Y los hilos se unen, las piezas del rompecabezas empiezan a tener sentidos, y él maldito movió su pieza dejandome en jaque.
Hijo de puta.
Jimmy tenía razón cuando decía que el asesino estaba detrás de alguien, nada más y nada menos que yo.
Cuando me carcajeo como loca, además de que lo estoy. Tapo la jodida rabia, el panico que siento al saber que este tipo a estado muy cerca de Cassy y la satisfacción de que pronto voy a ver de cara a cara al asesino de mis padres.
— Sandra.— Levanto la cabeza lentamente al escuchar el llamado de Mark. Observo al tipo como si no me hubiera tomado ya el tiempo en estás semanas de detallarlo bien.
El tipo me gusta tanto, me hace tener escalosfrios apenas verlo. Sé que es peligroso sentir lo que siento, pero es más fuerte que mi mente.
El problema es lo que ahora tengo en mis manos que lo cambia todo, él ya tiene mucha mierda por dentro como para darle un poco de la mía.
Así que cuando mis ojos chocan con los lindos de él, sé que me debo alejar apesar de lo que había avanzado con él, lo mucho que nos habíamos acercado y lo mucho que me mojen sus besos junto con las caricias que nos damos.
No se merece que lo maten por mi culpa.
Porque para eso regresó el asesino de mis padres, para matarme.
— ¿Está todo bien?— La preocupación en su voz me hace titubear por un momento, al acercarse para ver que hay en la caja me devulve a la realidad.
Vuelvo a colocar todo en su sitio mientras tapo todo, sonrío como si esta caja no se llevara una parte de mi.
— Claro que sí.— Jimmy entra en ese momento y por su cara se nota que no ha sido el mejor mes y lo voy a empeorar. Me acerco a él olvidando todas mis cosas en el escritorio.— Buenos días jefe, le tengo buenas noticias.— Frunce el ceño al escucharme y me evalúa, me río.— Tengo al asesino de esas personas.— Abre los ojos como platos, le extiendo la caja y este la agarra como si fuera un billete de lotería y fuera el ganador.
Le doy una palmada en su espalda y me dirijo a la salida de la comisaría, ignorando el llamado de Mark y las miradas de todos.
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Bebida, Lagrimas y Sangre.
Humor"El daño del pasado, es la secuela del presente" Dos personas llenas de un pasado que sin saberlo los une. Un crimen en la ciudad los hará trabajar juntos, sin saber que esos mismos crimenes los une mas de lo esperado. ¿Podran matar a su pasado o su...
