Los rayos de sol entraban por la ventana, todavía no me acostumbraba a la luz por esa razón me dolían los ojos. Me sentía vacía, pero no sentimentalmente, sino que sentía mi estómago completamente vacío. Ayer no había parado hasta lo último, que fué jugo gástrico.
Quiero dejar de hacerlo pero se que no lo voy a hacer. Ni yo me entiendo, tampoco se porqué es que no quiero parar.
Había desayunado con los chicos, no podía saltarme el desayuno, estaban todos, no podía engañarlos tan fácilmente como lo hago solo con Juani.
— ¿ Que vamos a almorzar ? — preguntó Feli.
— Para Pipe, recién terminamos de desayunar — dijo Mati.
— Pero hay que ir preparándonos para ese momento — todos nos reímos.
— Puedo amasar unos ñoquis si quieren — propuso Enzo. Todos se lo festejaron.
— Ñoquiis, ñoquiis, olé olé olé olé, ñoquiis, ñoquiis — cantaron todos mientras golpeaban la mesa.
— Bueno che, ahora voy a comprar las cosas, eso lleva tiempo y más si quieren repetir el plato — dijo entre risas. — ¿ Me acompañas chinita ? — me dijo.
— Bueno dale — si vamos caminando hasta el supermercado podría estar en movimiento y bajar un poco de lo que ya había comido.
Salimos de mí casa y así fue, fuimos caminando.
— ¿ Y que onda con Sofi ? — pregunté.
El suspiró. — Nada, estamos en buenos términos, pero ella ya tiene a su pareja y yo me siento bien así — me contestó. — Che Eva — le di mí atención. — Yo anoche te escuché — carraspeó la garganta — Te escuché vomitando en el baño — dijo cabizbajo.
Me había escuchado. Me había descubierto una persona. — Y sé que no fue por alcohol porque no tomaste nada — esta vez lo dijo mirándome.
— ¿ Estás insinuando que me lo provoqué ? — me crucé de brazos.
Me estaba poniendo nerviosa, me estaba alterando un poco. Sentía miedo. — Yo te pregunto a vos ¿ Te lo provocaste ? — dijo el parando el paso, lo imité. Quedamos mirándonos fijamente.
Me crucé de brazos. — Yo no hice nada y vos no sabes nada de nada — aclaré.
— Entonces lo hiciste — afirmó cabizbajo.
— ¿ Por qué sacas esas conclusiones ? Si te acabo de decir que no hice
nada — insistí.— Evangeline, estás adelgazando demasiado, tenés ojeras ¿ te pensas que no me doy cuenta que siempre después de comer te vas al baño ? — me estaba poniendo nerviosa.
— Mí sistema digestivo es rápido — el chasqueó la lengua.
— Si dale ¿ Y cuando dejas de comer ?
ESTÁS LEYENDO
𝓔𝖼𝗅𝗂𝗉𝗌𝖾 ; ᶠᵉˡⁱᵖᵉ ᵒᵗᵃⁿ́ᵒ
Fanfiction𝙀𝗅 𝖺𝗆𝗈𝗋 𝗂𝗇𝗎𝗇𝖽𝖺 𝗌𝗎𝗌 𝖺𝗅𝗆𝖺𝗌. 𝙇𝖺 𝖼𝗈𝗇𝖾𝗑𝗂𝗈́𝗇 𝗊𝗎𝖾 𝗍𝗂𝖾𝗇𝖾𝗇 𝗒 𝗅𝖺 𝖾𝗅𝖾𝖼𝗍𝗋𝗂𝖼𝗂𝖽𝖺𝖽 𝖺𝗅 𝗆𝗂𝗋𝖺𝗋𝗌𝖾, 𝗅𝖺𝗌 𝗆𝖺𝗋𝗂𝗉𝗈𝗌𝖺𝗌 𝖾𝗇 𝖾𝗅 𝖾𝗌𝗍𝗈́𝗆𝖺𝗀𝗈. 𝘿𝗈𝗌 𝖼𝗈𝗋𝖺𝗓𝗈𝗇𝖾𝗌 𝖽𝖾𝗌𝗍𝗂𝗇𝖺𝖽𝗈𝗌.