Yoongi conoció a Hoseok cuando era un bebé de apenas siete meses, sus padres le dijeron que ese pequeño niño era su destinado, su futuro omega.
Yoongi lo aceptó, sin embargo creció.
A los diecisiete años Yoongi regresó a Corea-Seul, pero no regresó...
X: Te lo dije, ¡te adviertí que te comportaras apropiadamente, sin embargo seguiste tu propia opinión y aquí tienes las consecuencias! ¿¡estás feliz, díme lo estás!? --Aborrecía tanto a su hijo en ese instante-- ¡¡Responde!!
Hoseok: N-No lo estoy, madre.
Jennie desesperada y con dolor en el corazón al ver llorar a Hoseok, quiso correr a gritos a la reina, sin embargo no podía hacerlo ya que ella solo era la sirvienta personal de Hoseok. Solo pudo consolar a su pequeño acariciando su mano.
X: Lo único bueno que sucederá, la última oportunidad es tu noche de bodas. Tienes que salir embarazado, es la única forma.
No dijo más, volteó y se marchó azotando la puerta.
Entonces el omega pudo romper en llanto y acurrucarse en los brazos de su amiga y casi madre.
Hoseok: ¿Por qué me pasa esto? ¿Por qué decidió tener un segundo esposo tan pronto? --Lloró desconsoladamente-- ¿Qué hice para merecer esto, Jennie?
Jennie: No, no mi pequeño tú no hiciste nada. --Limpió las lágrimas del príncipe-- Tú no mereces este sufrimiento, si pudiera sacar ese dolor que sientes para hacerlo mío, lo haría sin pensarlo mi pequeño. Ya no llores porfavor. --Lo consoló llorando ella también--
Hoseok no pudo dejar de llorar, no sabía si le dolía más la noticia, la cachetada o haber decepcionado a su madre.
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