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Iniciaron las clases con el profesor que cada día les recordaba que faltaba poco para el examen que tendría más de treinta pregunta y toda la hora de su clase para terminarlo, con saber eso hizo que todos sus alumnos estén atentos a su curso y sea...

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Iniciaron las clases con el profesor que cada día les recordaba que faltaba poco para el examen que tendría más de treinta pregunta y toda la hora de su clase para terminarlo, con saber eso hizo que todos sus alumnos estén atentos a su curso y sean participativos porque pensaban que tendrían algunos puntos más que los ayudaría a recompensar su nota si es que salen mal en su examen lo cual, nadie quiere.

—Bueno, alumnos, nos vemos. Estudien que falta una semana para que hagan el examen— se despide al escuchar el timbre de cambio de clases.

—¡Chau profe!— dicen todos del salón con una sonrisa nerviosa, menos Merlina quien guardo su cuaderno.

—Merlina, ¿Me ayudarías esta vez a estudiar? Que no entendí nada— le pregunta un poco nerviosa.

—Claro— responde mirando la pizarra.

—Gracias— sonríe, podía darle un abrazo, pero sabía que eso no le gustaba del todo a la contraria.

La hora de su profesora paso rápido, muchos se relajaron pues ella era más amable y como estaba embarazada no se podía enojar o estresar tanto, así que iban a ver algunos días que ella faltaría para irse a revisar y en esos días ellos aprovecharían para hacer desorden en el salón. Debajo de la carpeta de cada estudiante estaba su proyecto que le había mandado la profesora que les iba a tocar por finales de clases y tenían que exponer, los primeros tres voluntarios iban a sacar más nota según su profesora.

Así que podías ver a algunos que estaban repasando su hoja por si se les olvidaba algo, otros que solo estaban calmados porque se aprendieron de memoria todo y al final unos pocos que iban a improvisar en su exposición. Se habían puesto a estudiar gracias a que su profesora de segunda hora les haya dado permiso a todos.

Habían ido primero a la cafetería después de clase, donde les había atendido Tyler que hablo un poco con ellas para luego ir a otro cliente

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Habían ido primero a la cafetería después de clase, donde les había atendido Tyler que hablo un poco con ellas para luego ir a otro cliente. Las dos chicas hablaron un poco, Enid intentaba que la contraria diga un poco más de ella, que cuente algunas cosas como ella había hecho la primera vez que salieron, pero al parecer no iba a tener ningún tipo de información porque las respuestas de la azabache eran cortas y a veces ignoraba algunas preguntas suyas. Así que rendida decidió dejar de hacer preguntas y tan solo, disfrutar de la tarde.

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