Pasaron unos 20 minutos, y esperé hasta que Haitam se durmiera. Luego recogí mis cosas para volver a casa.
Hasta que en la puerta me encontré con su madre.
-Salam alaikum, Haitam ya esta dormido, y para no molestar ya estaba saliendo
-No ye preocupes hija, un gusto volver a verte de nuevo
-El gusto es mío, in cha allah volvamos a vernos pronto
Entre cháchara, cuando ya me iba a alejar me volvió a parar.
-Por cierto...- se pensó que era lo que quería decirme- ...me he dado cuenta de que mi hijo Haitam está muy agusto contigo, y me alegra verlo así
-Oh, que contenta estoy de escuchar eso- le dije con una sonrisa
-Veras, Haitam no tuvo una adolescencia fácil, estuvo metido en algunos que otros líos, y varias veces se ha buscado problemas, pero ahora lo noto más tranquilo, este es el Haitam que yo quería ver, lo echaba de menos a mi niño- dijo y comenzó a llorar
Se me acumularon una mezcla de sentimientos inexplicable.
Tenia una alegría muy grande en el fondo tras escuchar aquellas hermosas palabras, y al mismo tiempo tenia ganas de llorar. Mas que por tristeza, ha sido por pena. Por ver por lo que ha tenido que pasar un joven, siendo tan pequeño, tener que pasar por todos aquellos problemas que oían mis oídos.
-Me alegro mucho señora...
-Halima, me llamo Halima
-Un gusto conocerte Halima, yo me llamo Salma
Nos estrechamos la mano y continué hablando.
-No me esperaba escuchar eso de Haitam, se que ha tenido una infancia difícil, pero yo también, sin conocerlo apenas, me he dado cuenta de que en el fondo es un chico muy agradable y buena persona, él no es malo, es su entorno el que le influye. Créeme Halima, has criado al mejor hijo que se puede criar.
Mientras le di un pañuelo para que se secara las lágrimas, me dijo:
-Bueno no te quiero hacer llegar tarde a tu casa y que se preocupen tus padres, muchas gracias por estar aquí de verdad
Me despedí de ella y volví a casa. Un poco cansada por el dia ajetreado de hoy, pero mañana toca nueva aventura in cha allah, así que solo toca decir alhamdulillah y prepararse.
(...)
Llegué a casa y estaba Munir todavía despierto, eran las 23:30, nunca había llegado tan tarde a casa.
-Dónde estabas?
-Yo...eh, bueno estaba en el hospital
-Y eso? te pasa algo?
-No, no, solo que... mira Munir eres como mi hermano no te voy a mentir, veras...- le conté que no vino a clase y que me dijo él de ir al hospital en el que se encuentra
-Pero Salma, sabes que te has arriesgado en muchos sentidos verdad?
-Si ya lo se pero....
-No si ya lo se no Salma, mira se que no tengo ninguna autoridad sobre ti, pero creo que soy quien te tiene que decir que esta bien y que esta mal ahora que no esta tu hermano. Has estado en una habitación tú y un no mahram tuyo solos, has salido sin avisar a nadie y si has avisado a Nirmin no cuenta porque esta igual de loca que tú, y para colmo os mandáis mensajes mutuamente sin el permiso de nadie? Esto ya es bastante Salma
No podía contradecirle porque tiene toda la razón del mundo. Así que siguió hablando él.
-Escúchame bien Salma, si de verdad quieres a ese chico y crees que el de verdad te quiere a ti, que sea lo suficientemente hombre para venir a tocar la puerta de casa a pedirte la mano como se tiene que hacer
-Gracias por el consejo Munir, por favor ni una palabra de esto a Ali
-Anda vete a dormir
-Buenas noches
-Buenas noches
Me dirigí al cuarto y me puse a pensar sobre lo que me dijo.
Creo que es Allah quien me ha dado bastantes señales de que me tengo que alejar de Haitam. Primero lo de Adriana, y luego una charla de Munir que verdaderamente la necesitaba... Subhanallah.
No me entraba el sueño hasta que decidí parar de sobrepensar ya que mañana había clases, y bachillerato no es un juego.
Continuará...
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Mi Verdadero Halal
RomanceSalma: una chica adolescente que busca solucionar sus imperfecciones en esta dunya para complacer unicamente a Allah, y al igual que todo el mundo, tiene objetivos claros en esta vida que quisiera alcanzar. Haitam: un chico muy desviado del camino c...