INFIERNO DESEO [Toji Fushiguro, Sukuna Ryomen y tú] +18

Capítulo51: indiferente

Satoru Gojo salió de la habitación tomándose la cabeza con una mano.

Satoru Gojo: Qué maldita resaca

(TN): Satoru..buenos dias. —dije sonriente—

Satoru Gojo: Si si como sea —moviendo el brazo—

(TN): En el refrigerador hay unas botellas hidratantes por si lo necesitas y analgésicos en el primer cajón de la cocina.

Satoru no me contestó y se dirigió a la cocina. Parecía molesto e indiferente a mi. ¿Habrá escuchado lo que pasó hace un momento? . Toji y Sukuna lo observaban con las manos en los bolsillos. Su actitud me molestaba ¿Acaso no tenía modales? ¡Por lo menos agradecerme el gesto!

Caminé detrás de él molesta, anoche estaba dispuesto a ser mi "tercer hombre" y ahora ni los buenos días me da.

(TN): Creo que iré a correr —dije enojada—

Toji: Pero amor, no haz tomado desayuno.

Sukuna: Además estás recuperándote de los golpes. Tu cuerpo no está listo.

(TN): DIJE QUE IRÉ A CORRER —elevando la voz—

Satoru Gojo mientras tomaba la botella hidratante me observaba seriamente sin decir una palabra. Fui a mi habitación a cambiarme de ropa mientras toji y Sukuna venían detrás de mí hablando de lo mala que era mi idea.

Toji: Por favor (TN) haznos caso

Sukuna: Sólo lo hacemos por tu bien

(TN): No soy una niña pequeña. Entiendan que estoy bien y no me molesten. —dije enojada—

Toji: No nos trates así (TN) ¿acaso no ves que me duelen tus palabras?

Sukuna: No era mi intención ... —dijo triste—

Me coloqué un conjunto deportivo y salí sin dar más explicaciones. No quise disculparme, sólo salí de ahí lo más rápido posible. Cuando llegue a la entrada Satoru me atajó.

Satoru Gojo: ¿estás bien?

(TN): ¿y acaso eso te importa? —dije sin esperar su respuesta—

Salí de ahí sin móvil, sólo las llaves de la casa. Comencé a trotar sin rumbo hasta que llegué a una roca grande en el medio del camino. Decidí parar un momento a descansar. Una tristeza embargaba mi corazón, me dolía más el trato de Satoru Gojo que las palabras ácidas que les dije a los chicos.

¿Acaso estuvo mal comprometerme? Debí aceptar a Satoru Gojo como mi tercer hombre o qué.

Apoyé mi cabeza en mis rodillas y mis brazos rodeaban ésta. No pude detener el llanto, en verdad, me sentía muy mal. La indiferencia de Satoru Gojo me hacía mal. Cuando me pude tranquilizar caí en una pequeña siesta. Al despertar sentí que alguien me había estado abrazando por detrás .

Ehhh?! —dije somnolienta—

Satoru Gojo: Soy yo..—dijo susurrando—

(TN): ¿Qué haces aquí? No te pedí que vinieras

Satoru Gojo: Vine a pedirte disculpas, no debí responderte de esa manera.

Sus manos eran cálidas , tocaban mi abdomen mientras abrazaba. Su voz susurraba en mi oído para que lo perdonara pero aún seguía muy molesta.

Satoru Gojo: Perdóname. En verdad discúlpame.

(TN): ¿Qué te hace pensar que es por ti mi molestia? Mi mundo no gira en torno a ti ¿lo sabías?

Satoru Gojo: Si lo sé. Pero eso no quita que me disculpe si he cometido algún error.

(TN): No quiero verlos. A ninguno de ustedes. LARGO.

Satoru Gojo: No. No me iré.

Comencé a patalear como las niñas pequeñas pero Satoru se rehusaba a soltarme.

Satoru Gojo: por cierto. Gracias por la botella hidratante y los analgésicos. Gracias por preocuparte por mi.

Satoru se acercó a besar mi mejilla, apoyé mi cabeza en su hombro pero seguía sin mirarlo.

Satoru Gojo: Oh vamos. Dame una sonrisa

Lo ignoré por completo. Satoru suspiraba angustiado porque no quería ceder.

Satoru Gojo: (TN) ...mírame por favor

Decidí hacerle caso ya que su tono de voz fue diferente ésta vez. Ahora era él quien comenzaba a sentirse muy triste. Nuestros labios estaban muy cerca el uno con el otro, una lágrima caía por la mejilla de Satoru. Con mi mano derecha la limpié y él apoyó su mano sobre la mía.  Nos quedamos mirando por un momento, sus ojos azules observaban cada detalle de mi rostro. Cuando se acercó para besarme yo incliné mi cabeza hacia atrás ya que no pretendía besarlo. Satoru Gojo insistió en ello y no pude resistir. Nuestras lenguas se tocaban entre sí de manera armoniosa. Quería detenerme pero me era imposible, deseaba besarlo, sentir su lengua dentro de mi boca.

Satoru Gojo: Me moría de ganas de besar tus labios. ¿Haz pensado en lo que te dije? —dijo jadeando—

(TN): ¿Aún quieres ser mi "tercer hombre" ?

Satoru Gojo: Por supuesto que sí . Me vuelves loco.

(TN): ¿No te molesta que me haya comprometido con ellos ?

Satoru Gojo: Claro que sí. Pero es tú decisión.

No podía detenerme. Hablábamos entre besos y aún así no dejaba de tocar su lengua.  Mi temperatura comenzaba a elevarse, trataba de controlar mis impulsos pero me era difícil. Yo llevaba un conjunto deportivo. Una chaqueta con cierre sin sostén y calzas elásticas.

Satoru Gojo: Estoy muy caliente —dijo jadeando—

(TN): Yo también lo estoy —dije—

Satoru comenzó a bajar el cierre de mi chaqueta dejando al descubierto mis pechos. Sus manos manoseaban y apretaban mis pezones haciéndolos más duros. Logró sacar un gemido de mis labios haciendo que eso fuera suficiente para quitarme la chaqueta. Luego siguió con mis calzas, bajó su pantalón dejando afuera su miembro. Con lo enojada que estaba había olvidado por completo colocarme ropa interior así que estaba totalmente desnuda para este momento.

Satoru Gojo: Súbete en mi miembro —dijo—

Al sentarme sobre él, hizo que gimiera de nuevo ya que estaba muy duro para lo estrecha que me encontraba. Mi calentura hacía que saltara sobre él varias veces por segundo. Satoru Gojo tomaba con firmeza mi trasero mientras gemía en cada sentón que realizaba.

Satoru Gojo: ¡Joder! Eres una Diosa (TN). No sabes lo caliente que me pones. —gimiendo— Hoy en la noche prométeme que vendrás a mi habitación, te lo imploro.

(TN): —gimiendo— Es una promesa. Hoy en la noche iré.

Satoru Gojo: Ahhhj —gemidos— tengo que follarte para el resto de mi puta vida.