SHAYLA
-Tiene una reunión dentro de un rato con sus socios-me acomodo un mechón de cabello detrás de la oreja.
-¿Naciste aquí?-su pregunta me toma por sorpresa.
-Sí, nací aquí.
-¿Entonces por qué nunca en mi vida te había visto?-me mira extrañado.
-¿Me ve cara de adivina?
Su expresión cambia.
-De adivina no, pero de divina sí-al decir eso mis mejillas se sonrojan.
¿Ha dicho qué soy divina?
Sí, lo hizo
-Créame que si fuera adivina ya supiera el porque siempre tiene una cara de culo al llegar a la empresa.
-¿Te importa?
Sí
-No, solo tengo curiosidad-agarro la tableta.
La oficina se queda en un silencio tenso, camino hacia la puerta con intención de irme pero su voz me detiene.
-No hay razón.
-¿Eh?-lo miro sin entender lo que ha dicho.
-No hay razón para que siempre esté así.
-Debería sonreír más para que no se ponga viejo tan rápido-noto que intenta ocultar una sonrisa pero falla horriblemente.
En eso las puertas se abren y entra una chica con un vestido muy llamativo haciendo que haga una mueca; es un poco más alta, piel morena con unos ojos cafés, cabello rubio y unas caderas tan marcadas y solo con verla tengo el presentimiento de que es demasiado plástica para mí gusto, literalmente.
-Mi amor-ella lo besa y lo peor del caso es que el le corresponde con muchas ganas sin importarle que yo esté mirándolos.
Maldito
Salgo de la oficina asqueada por la situación y también con un malestar raro en el estómago, como si lo tuviera revuelto y pesado.
¿Estoy celosa?
Por supuesto, querida
Lisa aparece mirándome extrañada por la cara que tengo.
-¿Has visto a un muerto?
-Eh no ¿Por qué?-carraspeo ya que mi voz está muy ronca para mí mala suerte.
-Tienes una cara de horror como si hubieras visto a un fantasma-sigue mirándome extrañada pero cuando la rubia sale de la oficina de Viktor de inmediato entiende.
-Hola Lisa-la saluda ella.
-Vaya, pero si es Sasha la perra-se miran entre ellas con un profundo odio-¿Terminaste de follar con Viktor?
Me atraganto con saliva.
¿Follaron?
-En realidad hice otra cosa-se lame los labios y capto al instante la indirecta.
Perra
-Adiós querida-antes de irse me mira de una manera que se, que no le agrade para nada.
-Iré hacer unas cosas, adiós Shayla-me sonríe y se va dejándome con el estómago más revuelto.
Solo olvídalo, tampoco es como si me importara.
Sí, te importa
Niego con la cabeza y sigo arreglando unos documentos porque debo olvidarme de mi jefe amargado.
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Fuego Ardiente (Libro 1)
RomanceTodas las personas conocen a Shayla y a su pobre familia pero hay un solo hombre en el mundo que no la conoce pero la conocerá de casualidad. ✰✰✰ Shayla tiene 23 años su belleza la hace deslumbrar a donde sea que vaya pero para ella misma se conside...