Menta & Chocolate

hermanos

-¿Es una broma, verdad? - pregunté confundido, seguro de no haber escuchado el teléfono en ningún momento en toda la tarde. Ni siquiera recordaba ponerlo en silencio. - ¡Oh, mierda! - me quejé más para mí mismo, cuando después de buscar en mi bolsillo me percaté de que simplemente no encendía, lo más probable era que hubiera dejado la música corriendo en mi teléfono durante todo el rato que había estado en la cafetería. - Lo siento, no me di cuenta de que no tenía batería.

-Esa no fue mi pregunta, y más que respuesta parece excusa.- aseveró la chica, causando que me sobresaltara un poco. Después de todo, ¿por qué le debería explicaciones a ella? - ¿Qué hacías con el maldito que se cogió al ex prometido de mi hermano? - preguntó la chica de brazos cruzados. Había algo en ella que me recordaba mucho a Craig, no en el sentido de la apariencia. En eso no tenían nada en común: su cabello rojo y piel pálida como la porcelana contrastaban perfectamente con el cabello negro y piel solo un poco bronceada del chico, aunque tenían el mismo azul en los ojos. Físicamente, si los encontrara juntos en la calle, ni siquiera pensaría en que son parientes. Por otro lado, esa forma de fruncir la nariz y de girar la mirada fastidiado me resultaba algo encantador, había mucho de él en ella.

-¡Por Dios! ¡TRICIA TUCKER! - gritó Craig enojado, haciendo que ambos volteáramos a verlo sorprendidos. Aunque lejos de que la chica estuviera asustada, parecía enojada. - Te prohibo que vuelvas a hablarle a Kyle de esa forma, ¿escuchaste, adefesio? ¡No sabes nada! - aseveró  levantándo de inmediato y casi automáticamente el dedo corazón en contra de su hermana, que no tardó prácticamente ni 3 segundos en hacer lo mismo. - ¡Por eso no quería que vinieras! ¡No quería que llegaras a joder como siempre!

-¿Qué? ¿En serio? Tu novio sale con Cristopher y ¿tú te enojas conmigo? ¿En serio lo defiendes? - gruñó en sorpresa.

-¿Podemos simplemente hablarlo? - traté de preguntar, aunque fue inútil. Estaban tan metidos en su discusión, a tal punto que ni siquiera notaban mi presencia.

-Solo trato de entender por qué toleras la presencia de Cris aún en tu vida. ¿Cómo es que yo estoy más enojada que tú?

-Solo cállate, Kyle y ellos llevan años conociéndose, Tricia - aseveró antes de voltear a verme un par de segundos antes de regresar a la discusión con ella -. Él es de los amigos cercanos de Tweek y Cris...

-¡Eso no le da derecho a darte la espalda y salir con el hijo de puta que te destrozó la vida! ¡Él más que nadie debería entenderlo! - las cosas se quedaron en silencio por un momento y me sentí herido. Estaba algo fuera de lugar. Siempre había sido impasible y, de la nada, él simplemente había explotado de forma completamente destructiva. - ¿No se trata de eso una relación?

-¿Tú qué vas a saber de relación, mocosa estúpida?.

-Aparentemente más que tú, ¿no te has puesto a pensar que él tiene casi mi edad? ¡Míralo, él tampoco sabe nada!.

-¿En verdad? ¿Vas a usar eso? Eres una mocosa entrometida.

-Y tú un dejado de mierda, por eso te engañan, al rato no andes llorando en casa de mi tía si este te hace lo mismo con el cabrón que recoge tus sobras.

-¡Crajo! ¿Puedes callarte solo un segundo? - respondí de inmediato a la chica, mientras que los dos presentes volteaban a verme sorprendidos por meterme en esa discusión de "hermanos". - ¿Y qué si salí a tomar un café con Cristopher? No es como que me guste o me vaya a una cita, solo fuimos a ponernos al día - añadí con las manos en puño antes de cruzarme de brazos. No es que la odiara, la acababa de conocer, y solo estaba preocupada por su hermano, pero era frustrante. Se sentía justo como cuando Rebecca me señaló por un engaño que nunca pasó. La mirada despectiva que buscaba insaciablemente un culpable y una discusión, la diferencia era que Craig me estaba defendiendo, y sentir algo de apoyo de parte de una pareja... se sentía bien. - No le tengo compasión a tu hermano por lo que pasó, porque es un hecho que si Tweek no lo hubiera engañado, yo no estaría aquí - respondí, viendo una sonrisa en el rostro del azabache que, de la nada, pareció relajarse dejando solo a una "rabiosa" pelirroja frente a mí -. Así que, en parte, ¿estoy agradecido? Gracias a que él se fue de la cafetería, tu hermano me dejó hacer prácticas con él y conocí al hombre que más admiraba. ¡Trabajé con él! Así que, disculpa si me siento algo feliz de que eso pasara. No soy Tweek, y no tienes por qué dejar caer sobre mí tus frustraciones.