Alertas.

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El camino a la terminal estuvo en silencio , mi padre siempre fue un hombre de pocas palabras, solíamos divertirnos tanto cuando era pequeña, y ahora casi ni contacto teníamos, pero sabia que siempre que necesitara algo, el estaría para mi.
Luego de dejarme en la terminal, puse divisar que mi madre también estaba ahí, mis padres separados eran los mejores amigos que podían existir, mis padres juntos eran agua y aceite, cuando se vieron se abrazaron y saludaron con un beso en la mejilla, hablaron de mil cosas, se cuentan sus anécdotas siempre que se encuentran, se ponen al día de sus vidas y se ríen mucho, hace muchos años, mas o menos 5, Mamá me pregunto si yo quería que ella volviese con papá, mi respuesta fue un no, pero era porque mi madre había sufrido mucho por el y no quería que sucediese de nuevo, además cada uno tiene su pareja, realmente es imposible que vuelvan.

Subí al ómnibus con mis compañeros de clase rumbo a nuestro último viaje juntos, de todas maneras mi cabeza esta en otro lado. Ignacio no me había escrito en toda la mañana.

Quería divertirme con mis compañeros pero es que no podía, opte por ponerme  a escuchar musica mientras leía, el paisaje era verdaderamente hermoso, el punto de destino era Bariloche, en la zona en la que yo vivía no había nieve, por ende iba a conocerla en este viaje, era un viaje de 12 horas, por ende opte por descansar además mi telefono se había quedado sin señal.
......
Desperté y ya casi estábamos llegando a nuestro hotel, en eso me quede muy asombrada por el paisaje, hacia muchísimo frio, menos mal que tenia una manta que había subido conmigo por si me agarraba frio.

Decido mirar mi telefono, el cual seguía diciendo que no tenia señal. Mierda.

Llegamos al hotel, hicimos el check-in y fuimos a nuestras habitaciones, antes le había pedido la contraseña de WiFi a la chica de recepcion, y fue ahí cuando empece a sentirme mal.

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-Hola bonita perdon por desaparecer todo el dia - 12:00pm
-¿Me bloqueaste? No te llegan mis mensajes - 12:30pm
-Te estoy llamando y el telefono da apagado, ¿no quieres hablar conmigo? -15:00pm
-Bueno veo que realmente no te importa hablar conmigo. - 16:00pm
-Catalina deja de ignorarme!!!- 17:00pm
-Me pase todo el día tratando de contactarme contigo-20:00pm
-Seguramente ya conseguiste otro pene para montar, mis amigos tenían razon- 00:00am

Ese fue su último mensaje mas las múltiples llamadas que tenia en la casilla de mensajes, había llegado al hotel a las 07 de la mañana, apenas termine de instalarme, decidí llamarlo, primera llamada, rechazada, decido enviarle un mensaje.

-Ey acabo de llegar al hotel, subiendo la montaña no tenia seña, ¿porque me tratas así?- Termino de escribir ese mensaje y tengo una llamada entrante.

-Hola bonita- era el.
-¿Porque me escribiste esos mensajes?- Dije saliendo al balcón para que mis compañeras no escuchen.
-Estaba muy nervioso lo siento- se notaba afligido.
-Si pero si no confías en mi, esto no va a funcionar-
-Lo siento si, estaba enojado y tu no me respondias- decidí callar, podría haberle avisado.
-Cuéntame, ¿como estuvo el viaje?
-Dormí todo el camino hacia aquí, la verdad que así se pasaron mas rápido las horas-
- ¿Como es tu cuarto? ¿Quienes son rus compañeras-
- Estoy con 4 amigas y es una habitación grande para todas-
-¿Tienen alguna habitación de chicos cerca?- ¿porque preguntaba eso?
-La verdad es que no.-
-Genial, bueno preciosa tengo que trabajar, hablamos mas tarde adiós, te amo- ¿QUE?

Colgó, suspire de lo frustrada que estaba, aveces me saturaba demasiado su comportamiento, un día me quería, al otro me odiaba.

Me dispuse a desarmar mi valija, esa noche había fiesta de colegiales, así que decidí disfrazarme como una, obvio le mande una foto Ignacio de como me veía, este me respondió con un corazon y luego me dijo.

-Estas mostrando mucho- Con un emogi de enojado al lado.
-Si sabes que soy tuya verdad?- respondí tratando de cambiar el destino de la conversación.
-Te dije que no llevaras esa ropa, esto es peor que el disfraz de policia que llevaste- Habíamos peleado cuando reviso mi maleta, la ropa que iba a llevar y los disfraces para las temáticas de las fiestas.
-¿Podrías decirme que estoy hermosa?- ya me había enojado su actuar.
-Si estas hermosa, pero no me gusta que muestres demasiado.- no conteste.
-El labial rojo no te queda bien- escribió nuevamente.

Me sentí extraña cuando volví a mirarme al espejo, ¿ realmente estaba mostrando mucho?, volví a ver mi rostro con labial rojo y me lo lave, cuando estaba mirándome al espejo y sacándome fotos, me sentía muy bella ahora estaba sintiendo que la ropa no me quedaba bien.

-Diviértete, te llamo mas tarde- ese fue su último mensaje.

En la fiesta me dispuse a tomar sin parar, me estaba divirtiendo con mis amigas, baile hasta cansarme, me sentía sexy y poderosa, mas los chicos que estaban a mi alrededor querían bailar conmigo e invitarme un trago. Había un chico muy lindo, de otra institución pero se hospedaba en el mismo hotel que nosotros, se me acerco con un trago en la mano.

-Te he visto toda la noche, estas bellisima- se acerco a mi oído, mis amigas observaron, rieron y me dejaron a solas.
-Gracias- acepte el trago y le dedique una sonrisa, no estaba haciendo nada malo realmente, no me parecía mal aceptar el trago.
-¿Quieres bailar conmigo?- Asentí y el agarro mi mano, llevándome de nuevo a la pista, me giro y quedo el detrás de mi, seguíamos bailando, la estaba pasando muy bien, me sentía de nuevo la chica que se había mirado al espejo y se sentía muy poderosa, decidimos salir al patio de fumadores para mas tranquilidad, nos sentamos en unos bancos y colocamos nuestros tragos sobre el y decidimos hablar.
- Bueno, veo un bello rostro pero aun no se tu nombre- Bajo la luz de los faros podía ver sus ojos azules, era realmente musculoso y tenia cabello rubio, casi como el color del sol" y era alto debía medir como 1,80cm.
-Catalina- Dije amablemente.
- Mi nombre es Joan un gusto - beso mi mano.
- Cuéntame Joan, ¿también finalizas curso?-Pregunte curiosa.
- Si, estoy a punto de conseguir una beca deportiva, juego rugby y vine a celebrar el fin de curso. - Eso explica esos músculos.
Me reí ante su comentario, luego escuchar mi celular sonar, Ignacio.
-Me disculpas Joan, debo atender esto.-
-Ve tranquila- me sonrió de una manera muy bonita.

-Llevo toda la noche enviándote mensajes- Se escuchaba enojado.
-¿De que hablas? Mi celular no ha sonado en toda la noche- dije asombrada.
-Revisa tus mensajes, esa es toda la atención que me das- Dios, que le pasa. Giro para ver a Joan, que se despedía desde lejos, me decepcione pero al fin y al cabo iba a verlo en el hotel.
-CATALINA TE ESTOY HABLANDO- Estaba enfurecido. Y yo estaba mirando todos los mensajes que estaban llegandome, ¿acaso no había señal en este lugar?
-Estoy viendo los mensajes Ignacio, no tenia señal-
-Otra vez esa excusa-
-Estoy diciéndote la verdad, no entiendo porque te pones asi-
-Porque te extraño y me siento solo sin ti- me cayo como balde de agua fría.
-Yo también te extraño pero no puedes comportarte así- Fui sincera.
-Además el solo saber como ibas vestida a esa fiesta me hizo volverme loco, realmente me dan ganas de agarrar el auto e ir a buscarte-
-Tranquilo, la estoy pasando bien, además ya hice amigos- Dije contenta.
-¿Hiciste amigos? ¿HOMBRES?- Dijo en todo raro, como tratando de disimular su enojo.
- Si se llama Joan, es un chico muy amable- me interrumpió.
-Y tu crees que quiere ser tu amigo, seguramente te estaría mirando las tetas y por eso se te acerco-
-Pero no es...- me volvió a interrumpir.
-Sabes que disfruta tu fiesta mañana hablamos.- colgó.

Ahí me encontraba de nuevo, confundida y enojada, decidí volverme al hotel, cuando iba saliendo de la discoteca, les avise a mis amigas que me iria y una voz me detuvo.
-Catalina- era Joan.
-Ya vas al hotel? - me pregunto.
-Si si ya voy para allá, estoy algo cansada-respondí sin animos.
-Si quieres volvemos juntos y tomamos un cafe- sonreí ante este gesto.
-Esta bien vamos- El me dio su mano para subir a el pequeño colectivo que la empresa de viajes nos disponía para volver al hotel, nos sentamos, recosté mi cabeza en su hombro y el solo se dedico a acariciar mi cabello.

.........

Arroje el telefono a la otra punta, ¿porque tenia que mostrarse de esa forma al mundo?, ¿era necesario ir tan provocativa? Todo el mundo iba a mirarla y eso no podía pasar.

Decidí encender marihuana y empezar a beber, le envié un mensaje a Zaira necesitaba sacar mi ira acumulada y la verdad tenia muchas ganas de sexo, Catalina no iba a enterarse, era tan estúpida como para verlo, además la muy tonta confiaba en mi.

Zaira no tardo mucho en llegar y apenas la vi estampe mis labios en su boca.

-Pensé que le serias fiel- decía mientras me besaba.
-Catalina, no va a enterarse, se cree todas mis mentiras- Después de decir esto la subí sobre mi regazo, mientras ella besaba mi cuello e iba bajando para darme una buena mamada.

-Dime que soy mejor que ella- Dijo la rubia para pasar su lengua sobre la punta de mi miembro.
-Sabes que lo eres - Dije recostando mi cabeza en el sillón mientras ella hacia su trabajo.



En tus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora