27-Una Triste Realidad

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Desperté, senti un dolor sordo que palpitaba en mi cabeza cuando abrí los ojos, note que había mucha oscuridad a mi alrededor, escuchaba la lluvia pero no me estaba mojando, intente mirar a mi alrededor mientras mi mente intentaba recordar dónde estaba. ¿Qué había pasado?

Sentía mi cuerpo pesado, como si estuviera cargando el doble de mi peso. Unos metros frente a mi podia ver algo de luz, al parecer estaba junto a un muro y lo que me cubría de la lluvia era un gran trozo de pared que cayó sobre el muro, por eso estaba tan oscuro, el trozo de pared caído bloqueaba la luz del cielo.

El aire olía a humedad, un olor que me revolvió el estómago por alguna extraña razon, creo que mi cuerpo esta algo sensible. Traté de incorporarme, pero una punzada de dolor en mi cabeza me hizo desistir.

Al parecer no podia levantarme en este momento.

Me arrastre poco a poco hacia el muro para intentar recostarme contra el, queria tener una mejor vision de donde estaba con ayuda del muro.

Me costaba demasiado mover mis brazos y piernas, despues de un esfuerzo considerable y de soportar un intenso dolor que sentía al mover cada parte de mi cuerpo logre recostarme contra el muro, intente mirar hacia la luz pero senti nauseas y vomite a un lado...

Ah... Mi dolor de cabeza habia empeorado...

Intente mirar nuevamente pero veia algo borroso, no veia nada claro, me pareció distinguir dos siluetas pero no estaba seguro.

Me toque un momento el cuello para combrobar mi temperatura ya que me sentia algo extraño, ya veo... Tengo fiebre, con razon mi dolor de cabeza es tan fuerte.

Era increible lo moribundo que me sentia.

Vi una figura acercase, era un niño... Ah... Ya recuerdo, es el niño, poco a poco empece a recordar que habia pasado, me desmaye cuando intentaba revisar al caballero.

El niño se acerco, me miro algo feliz y empezo a tratar ayudarme a levantar.

Robert: N-ni...ño

No pude hablar bien, me pesaba la lengua.

El niño empezo hacer ruidos raros y me apuntaba con su dedo hacia afuera mientras me jalaba, no le entendia muy bien que queria decirme, le apunte a mis piernas y le dije como pude que no podia moverme muy bien.

Este al parecer me entendio y se acerco a mi, me jalo del brazo con fuerza para alejarme de la pared, despues puso sus dos manos debajo de mis brazos desde mi espalda y empezo a rastrarme hacia afuera.

Literalmente soy un peso muerto en este momento, despues de arrastrarme a donde habia visto la luz al inicio me ayudo a recostarme nuevamente en el muro.

Mire un poco y ya entendia mas o menos la situacion, afuera seguía lloviendo pero no estábamos afuera, estabamos dentro del campamento destruido, más especificamente adentro junto a la entrada.

Significa que no ha pasado mucho desde que me desmaye, note que el niño estaba algo agitado, quizas no hace mucho me arrastró a mi y al caballero hasta aqui dentro, el niño me apunto al caballero que estaba tirado a mi lado ahora.

Asentí con mi cabeza y me acerque al caballero un poco.

Tome su pulso, estaba increiblemente debil, pero aun estaba con viva, le quite su capucha, note que tenía unas... ¿Orejas en la cabeza? Lo mire mejor y tenía cara de chica, al parecer era una mujer. Es curioso la cantidad de mujeres guerreras o magas que vienen de la brecha, por lo menos aqui en mi mundo era raro ver a una mujer luchando, supongo que ahora que estamos en esta actualidad tan desastrosa ya no es tan extraño, diria que es normal, cualquier persona que tenga dos brazos y dos pierna en funcionamiento es un soldado mas, seria un desperdicio de personal empezar a discriminar otravez.

La Brecha Entre Los MundosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora