Un alfa para Soobin

Capítulo XIII

El silencio reinaba dentro de aquel auto donde viajan el Kai y Soobin después de recoger a JinYoung en la escuela. Esa misma rutina se había repetido durante ya una semana. Soobin estaba tranquilo, no había tenido señales de Yewon y se había adaptado al nuevo departamento a la perfección.
Ya no sentía que era enorme o muy lujoso. Se había acostumbrado demasiado pronto a los lujos a los que Taehyun estaba acostumbrado.

Pronto a unos metros pudo distinguir la entrada de su lugar y una sonrisa se dibujó instantáneamente en sus labios quitando el cinturón de seguridad listo para abrir la puerta.
Sin embargo se sostuvo del frenos de manos y del panel de enfrente ante el paro abrupto del mayor. Se giró hacía él alfa con confusión en su rostro antes de dirigir su mirada a su cachorro asustado.

Había estado durmiendo por lo que al sentir el freno del auto abrió sus ojos asustado comenzando a sollozar estirando sus manos hacía el omega quien rápidamente bajo para cargar al cachorro entre sus brazos liberando su aroma para tranquilizarlo.
Por su parte el alfa observaba con sorpresa se la omega frente a la puerta de la pastelería y con un suspiro de frustración bajó del auto acercándose al omega quien dió un paso atrás acompañado de una mirada de reproche.

–Lo siento Soobinie, lo siento JinYoungie. Hyung lo siente–dió pequeñas palmaditas en la espalda del pequeño.

–¿Por que te detuviste así? Acababa de quitarme el cinturón Hueningkai.

–Lo siento... Es solo que no esperaba ver a mi hermana en la entrada de tu pastelería.

–¿Tu hermana?–la expresión del omega cambio a una de sorpresa dirigiendo su mirada hacía la entrada con curiosidad–, ¿es la chica de cabellos rubios de allá?

–Precisamente es ella.–suspiro y miro al omega con una sonrisa de resignación en su rostro.

–No le dije que nuestro cortejo término. Seguramente viene a saber quién eres.

–Descuida Kai. Está todo bien–le sonrió con tranquilidad caminando en dirección hacía su pastelería entrando al local después de saludar a la omega con una sonrisa.

A los pocos segundos escuchó un grito con emoción proveniente de ella y dirigió su mirada hacía la entrada. La omega abrazaba a su hermano con fuerza mientras daba pequeños saltos en su lugar. Le pareció una escena bastante tierna pero a la vez dolorosa.
No podía evitar pensar en Taehyun y en todo lo que se perdía por no haberse enterado antes sobre sus otras hermanas y su familia verdadera. Si lo supieran, ¿serían igual de amables y cariñosas con él?

Taehyun era un alfa que se merecía lo mejor del mundo y tener una familia que daría lo que fuera por ti no tenía precio. Pero estaba tranquilo, justo ahora su hermano tenía un omega que lo amaba y lo cuidaba como si fuera la joya más valiosa calmando así su preocupación como el omega preocupón que era.

–¡Soobin hyung!–unos brazos no tardaron en rodearlo junto con ese aroma a naranja y manzanilla combinado ahora con el limón y eucalipto de Taehyun.

–¡Beomgyu! Cuanto sin verte–se giró hacía el menor para poder abrazarlo de vuelta.

–Lo se, apenas hoy Taehyun me dejó salir. Decía que el mimado era yo pero no me quería dejar salir de nuestra cama...–su sonrisa se amplió a la vez que dejaba salir un suspiro enamorado–, que bien se siente poder decir nuestra cama.

–Estoy muy feliz por ti, ¿tu también estás feliz por el tío Beommie ¿cachorro?–el pequeño se aferró a su cuello causando una mueca de indignación en el omega.

–¿No extrañaste a tu tío Gyu cachorro?–nuevamente los sollozos del infante se hicieron escuchar. Soobin por su parte liberó más de su aroma para tranquilizar a su pequeño mientras que Beomgyu ponía una expresión de pánico en su rostro.